En todo el continente crece la autonomía y el autogobierno de los afrodescendientes. Cuba y Venezuela preocupados por esa diversidad lanzan una ofensiva para fomentar la nacionalidad única, que desconoce el carácter plurinacional de los estados

22.Jun.11    Identidades y Multitudes

Vea Nota de Clajadep al final del artículo

Cuba: Valoran importancia de seminario sobre los afrodescendientes en América
Por Pedro de la Hoz

Los caminos de reflexión abiertos durante los cinco días del Seminario Cuba y los afrodescendientes de América, auspiciado por el Instituto Juan Marinello en La Habana, apuntaron hacia el reconocimiento de la enorme deuda histórica con los hombres y mujeres arrancados por la fuerza de sus tierras para ser explotados y a la necesidad de visibilizar los aportes sociales, económicos y culturales de quienes contribuyeron a fundar nuevos pueblos en esta parte del mundo.
También fueron ventilados problemas que gravitan sobre las poblaciones negras y mestizas del hemisferio, como la pobreza, la marginación, la falta de oportunidades y la discriminación.
Aún en una sociedad como la cubana, en la que con el triunfo de la Revolución fueron desmontadas las bases institucionales de la discriminación y en un proceso inédito se democratizaron la educación y la cultura, persisten ciertos prejuicios raciales y no se han podido todavía borrar definitivamente las desventajas históricamente acumuladas entre los sectores poblacionales negros y mestizos.
En tal sentido cobraron fuerza las palabras dichas por Miguel Barnet al clausurar el evento, cuando expresó que Cuba estaría incompleta si no reconocemos en su justa medida el aporte de los africanos y sus descendientes a la formación de la nacionalidad y la cultura del país, en tanto debe lucharse mientras sobrevivan uno solo de los prejuicios y taras legados por la anterior sociedad discriminadora y racista.
Por eso, al hablar también desde la perspectiva cubana, el sociólogo Fernando Martínez Heredia, Premio Nacional de Ciencias Sociales, al inaugurar el foro manifestó:
“El racismo favorece a las necesidades ideológicas de aquellos que aspiren a un regreso mediato al capitalismo, porque es una naturalización de la desigualdad entre las personas, algo que nadie admitiría en la Cuba actual si se planteara respecto al orden social en general. Por tanto, con mucha más razón tenemos que desarrollar y hacer triunfar el antirracismo: la lucha por la profundización del socialismo en Cuba está obligada a ser antirracista”.
Pesan las palabras dichas por el activista social norteamericano James Early al reconocer:
“Estados Unidos no lidera hoy el movimiento afrodescendiente mundial, a pesar de la larga historia de lucha de sus comunidades. El centro se encuentra en América Latina y el Caribe, porque es donde se está intentando hacer coincidir las agendas ciudadanas con las estatales. En este contexto, la Revolución Cubana que hizo de los marginados —los de antes de 1959 y los que quedaron después— sujetos listos para construir su país, tiene una responsabilidad central por el ejemplo que irradia al resto de la región. Construir entre todos debe ser la propuesta: en la diversidad tomaremos mejores decisiones”.
A estos esfuerzos se sumará, desde hoy en Caracas, el Foro sobre la Afrodescendencia en Nuestra América, que hasta el jueves 22 pondrá acentos en las transformaciones sociales en el continente y en el diálogo con los pueblos africanos.

Nota de Clajadep:
Dos congresos afrodescendientes uno detrás del otro. Sintomático.
Hace ya algunos meses han salido a la luz artículos cubanos y venezolanos sobre indígenas y afros, que son sectores que antes no influían en la política ni amenazaban al poder. Vea en Cuba, un tercio de la población son afros, un tercio españoles, básicamente gallegos, y un tercio de mulatos, o sea, un tercio de blancos, sin embargo en el Comité Central del partido y en el parlamento, las tres cuartas partes o más aún son blancos. Saque sus conclusiones.
En este artículo los afros no son una nación, sino apenas parte de la diversidad, parte del surgimiento de la “nación” cubana, o sea, ahí no hay pluralidad de naciones. Hasta hace dos años atrás los originarios de antes de la invasión europea en Cuba habían sido aniquilados y exterminados por los gallegos, sin embargo no ha sido posible seguir manteniendo en secreto la información de que aún hay descendientes de esas comunidades que recién se están “investigando”. Si en todas partes las comunidades luchan por su autonomía,no vaya a ser que alguno por ahí se le ocurra levantar cabeza, hay que encontrarla antes y subordinarla. Por eso también a los negros hay que darles como bombo que no son nación, sino fundadores de la nación cubana.

Es gracioso que se diga que el eje de la africanidad está en América Latina y el Caribe, porque es donde se está intentando hacer coincidir las agendas ciudadanas con las estatales.

O sea, si los estados “están haciendo coincidir sus agendas” con el movimiento afrodescendiente, ya es mérito para ser el centro del asunto. Extraño, a menos que sean las agendas ciudadanas que lo estén haciendo hacia el estado, pero eso no nos consta de ningún país y es justamente lo que se intenta hacer con esta seguidilla de “congresos” justamente en los estados que quieren aparecer con dicha “agenda”. La idea es conseguir que algunos movimientos se pronuncien en defensa de la alternativa estatal para salir de la ignominia y lo más seguro es que van a conseguir algunas firmas que les permitirán lanzarlas contra los movimientos más autónomos, como aquellos de la periferia de la ciudad de Salvador, estado de Bahía en Brasil, o los garífunas de Honduras que forman parte del bloque popular comunitario o algunas de las comunidades del Proceso de Comunidades Negras de Colombia, o varios remanentes de Quilombos en Brasil, los llamados “quilombolas (los que no han sido atrapados por el PT), algunas comunidades de la costa de Ecuador, otras del Perú y de otros lugares donde la autonomía y el autogobierno se van enlazando horizontalmente con la autodeterminación indígena,campesina y algunos barrios de ciudades.

Queda más claro cundo dicen que es el “centro” porque se está intentando, o sea, están tratando ellos mismos. “Somos el centro, chiquillos”.

Dos congresos.
Vaya
Deben estar realmente preocupados.
Podemos imaginar la enorme proporción de funcionarios estatales, militantes de los partidos de gobierno y agentes de seguridad del estado que habrán en los respectivos “congresos”.
Menos mal que no eran negros los guerrilleros que entregó el gobierno venezolano a Colombia …