Elecciones en Perú y rendición de la izquierda

Las clases poderosas, oligarquías y empresarios, no están muy preocupados de quien gana, ya que los tres primeros en la encuestas tienen el firme propósito de profundizar el modelo de extractivismo y la diferencia está en el como van a contener la resistencia, tema que los de más arriba se lo dejan a los políticos y a los militares.



Elecciones en Perú y rendición de la izquierda

Jaime Yovanovic Prieto

Keiko, la hija del dictador Fujimori, goza de gran simpatía en las fuerzas armadas y en sectores populares encandilados por el nacionalismo, no así en capas medias y, menos aún, entre las regiones andinas y amazónicas, muy populosas y de preeminencia indígena.

Las clases poderosas, oligarquías y empresarios, no están muy preocupados de quien gana, ya que los tres primeros en la encuestas tienen el firme propósito de profundizar el modelo de extractivismo y la diferencia está en el como van a contener la resistencia, tema que los de más arriba se lo dejan a los políticos y a los militares.

Keiko ofrece mano dura democrática y nacionalista con predominio de los militares, Juan Pablo Krestinsky o como se escriba, ofrece la mano dura sin nacionalismo, derechista cívico neoliberal, con predominio de la ley y la policía. Verónika Mendoza, que disputa el segundo lugar con el anterior, ofrece el mismo programa nacionalista de Humala y “negociaciones” con los afectados por el extractivismo, además de un enorme programa populista que se acerca claramente a los programas kirchnerista en Argentina y lulista en Brasil, aunque ya mostró la hilacha diciendo muy suelta de cuerpo que le gusta mucho el modelo de estado uruguayo, en el que todos sabemos fue presidente el simpático Mujica que con una mano hacía imagen popular mientras con la otra aprobaba la ley minera que había concitado la oposición y movilización de miles de uruguayos que se distrajeron mirando los malabares de Mujica, tan lindo él, que hasta merece el premio Nobel, como escribió más de un cretino y hasta circularon firmas donde hicieron caer a una gran cantidad de incautos. Después de los pasos de baile y las gracias populistas de Mujica, que sirvieron de voladores de luces para aplicar la orden empresarial de abrir paso al extractivismo minero, la gente quedó con la sensaciónn de que les habían metido el dedo en la boca. Y Mendoza quiere hacer lo mismo, esperando ser más eficiente que Humala en ablandar el cuero duro de los defensores de la madre tierra.

Mendoza fue diputada por el Partido Nacionalista del Etnocacerismo de la familia Humala, militares de línea dura nacionalista casi fascista que durante algunos años mostraron simpatía por el nacional-populismo chavista. Humala no supo enfrentar la resistencia contra la minería y en su gobierno hubieron de paralizarse varios proyectos de gran envergadura, como el de Conga, que resultó emblemático por la enorme movilización popular y acción directa que concitó y que creó una escuela y secuela multiplicadora en las regiones andinas, llevando a varios grupos de izquierda a adentarse en los movimientos y en las instituciones locales como gobernaciones y similares, con lo que ya están “listos” para negociar.

Buena parte de los sectores izquierdistas andinos que han trabajado ferozmente estos últimos años para penetrar y conducir los movimientos, levantaron a uno de ellos, Santos, como candidato presidencial sin la menor posibilidad, en tanto la izquierda tradicional y una gran diversidad de grupos y partidos nuevos de la izquierda menos peleadora que los andinos, formaron el Frente Amplio con los nacionalistas y le han dado a Mendoza una cara “de izquierda”, por lo que a nivel continental las fichas las están poniendo en ella, esperando que pase a segunda vuelta para soltar campaña internacional y hacer malabarismos, mariguansas y payaseos para re-encantar a la decadente izquierda mundial y continental, como los apostadores de caballo, que esperan un “dato” para circular la esperanza que luego se cae y así van tras el siguiente dato de caballos arreglados para inflar nuevamente la esperanza y el encantamiento como globos de fiestas infantiles, sabiendo todos que esos “datos” son circulados desde los mismos propietarios de las cuadras que compiten, pero la esperanza es lo último que se pierde y el perdedor tiene que aguantar el chaparrón en casa porque se gastó el dinero en una yegua de cuatro patas.

Como Humala no pudo con la resistencia, ahora el partido Nacionalista está apoyando a Mendoza bajo cuerda y el gobierno moviendo fichas solapadas para los “datos” de su caballo ganador, lo que quedó públicamente demostrado con el apoyo “personal” que dio a la candidata “de izquierda” uno de los principales dirigentes de ese partido, dejando abierto el camino para que luego no sea sorpresa.

La clase de los poderosos no tiene confianza en Mendoza, debido su baja capacidad operativa-funcional y a que ha sido humalista, esto es, se trata de quienes no han conseguido quebrar el rechazo popular a la minería, pero si que le tienen confianza a la izquierda peruana, que esperan que consiga quebrar la mano de la resistencia como hacen o han intentado hacer los gobiernos progresistas a nivel continental engatuzando a todo el mundo en medio de las carcajadas de quienes pagaban al abogado de Panamá para esconder dineros en los paraísos fiscales, muy criticados por los organismos internacionales, pero que funcionan, tal como son criticados los narcotraficantes. La izquierda peruana, siermpre temerosa de la autonomóa comunitaria tradicional en las regiones andinas, concentra sus esfuerzos en los sindicatos, como siempre, y áreas campesinas burocráticas, como el PC chileno controla Ranquil y Anamuri. Los grupos más radicales han partido en jauría hacia las regiones de Puno, Cajamarca y demás de preeminencia aymara y quechua, como los grupos radicales chilenos que se han ido a meter entre los mapuche para quemar camiones e incendiar iglesias, con lo que demuestran que quieren ir más allá de la autodefensa pacífica que impera en las comunidades de todo el continente, dejando claro que sólo se trata de la lucha por el poder. Los ex guerrilleros peruanos han sido más zorros que los ex guerrilleros chilenos, pues se han ido despacito al ritmo de la gente y conquistando paso a paso cargos sindicales e institucionales, consiguiendo obstaculizar el desarrollo de la autonomía comunitaria en varios lugares, no como los extremistas chilenos, que quebraron la comunidad de Temucuicui para sumar a una parte menor del lof a “la lucha contra el sistema”, o sea que los destacamentos de luchadores pasan a ser más importantes que las autoridades tradicionales. Los grupos que apoyan a Santos, que son varias generaciones de diferentes grupos de dos grandes vertientes, que trabajan juntos compitiendo ferozmente en la penetración y sometimiento de las formas de vida comunitaria a las estrategias de guerra popular y similares, o sea, quebrar el ser andino para ordenarlo acorde a los intereses del futuro control estatal por las fuerzas insurgentes, que es el discurso que hoy atrae muy poca gente y estos grupos piensan que en las comunidades indigenas les irá mejor. Las dos grandes vertientes rebeldes son Bandera Roja, maoistas estalinistas, salidos del PC tradicional tras las pugnas sino-soviéticas, con una gran cantidad de partidos y corrientes hijos y nietos del grupo inicial, uno de los cuales fue el Sendero Luminoso, del cual continuan varias tendencias en diferentes regiones, aunque reducidos a una mínima expresión, y por otro lado los guevaristas, cuya principal vertiente histórica fue el MIR de De la Puente, que luego se quiebra en varios grupos, uno de los cuales forma el MRTA, que luego también se quiebra en varias fracciones y grupos que, como el MIR chileno, tienen orgánicas para todos los gustos. Las comunidades de la selva, especialmente asháninkas y ashuar se han enfrentado a todos estos grupos, algunos de los cuales reclutaban tropas a la fuerza, así como hoy día defienden la vida y los territorios de la voracidad extractivista y la repŕesión institucional Ese el drama de la dominación, como hacer para que los comunitarioa acepten la cruz primero para clavarles la espada. Los iglesias no han funcionado mucho, pues los habitantes de las selvas ya han aprendido, por eso los partidos se encuentran ante un muro infranqueable. Algunas ONGs extranjeras han conseguido mantener cierta relación paternalista que los comuneros han sabido aprovechar mientras los oenegeros se tiran de los pelos intentando descubrir como hacer para entrar más. Pero es difícil, ya que a nivel continental el MST brasileño, brazo agrario del PT de Lula, ha sido casi el único que ha conseguido quebrar experiencias comunitarias autónomas y transformarlas en estructuras dependientes de los partidos, como hizo con el Frente Campesino Ezequiel Zamora de Venezuela, con los MTDs Lanús y Almirante Brown en Argentina, con el Mocase argentino, etc, en fin que cuando quieren domesticar sectores sociales, lo mejor es enviarlos a las escuelas de cuadros de esa organización, que salen bien pulidos de allí, bien disciplinados y obedientes a la jefatura partidaria. ¡Heil Hitler! digo ¡Venceremos! Con esto usted podrá entender mejor como se mueve el piso en las regiones más rebeldes del Peru, donde la izquierda a trevés de sus instrumentos, por ejemplo Servindi, que intenta ser vocero de lo indígena junto o desde la izquierda que actualmente se ha subordinado al nacionalismo de Mendoza.

Si la segunda vuelta es entre Keiko y el que le sigue, todos van a votar contra Keiko, por lo que es difícil que ella gane, lo que explica que todos los sectores de derecha hayan apoyado la marcha contra Keiko que organizó la estructura de izquierda tradicional de los Derechos Humanos, y buena parte de ellos se hicieron presentes de forma destacada, como el hijo y familiares de Vargas Llosa, el derechista number one de ese país.

Pero el proceso electoral no termina un período ni empieza otro, sino solamente quien va a dar los tiros para que pase la maquinaria que irá a destruir la madre tierra y he ahí el cacho de los poderosos, que aprontan sus instrumentos y sus agentes por todos lados, en el poder judicial, en la prensa, en la policía, etc y aún en las universidades, acondicionando piezas para la avalancha que debe penetrar y derribar el dique popular en la forma menos escandalosa posible, en especial si llevamos en consideración que la crisis se acentua por todos lados y no mejoran los precios de las materias primas, pero, lo que es más grave son los asháninkas y los ashuar, los indomables defensores de la selva que han cerrado el paso en varios lugares a los civiles que van a emborrachar la perdiz con programas benefactores y a las empresas que llegan dejando su pesada huella en el barro, los primeros como la cruz de Colón y los segundos la espada. Cuánto tiempo demorará el ataque a la selva? Esa es la única pregunta posible y la respuesta la irá dando el manejo de factores que hagan los administradores de la cosa pública teniendo cuidado de no apretar mucho, no vaya a ser que se les escurra el demonio por otro lado.

Y sobre la sierra andina la pregunta es sobre la demora en llevar adelante el siniestro proyecto de Conga, que como Evo Morales dijo en Bolivia que la carretera sobre territorio indígena va “si o si”, los mineros peruanos tienen a Conga como espina clavada en el corazón, por lo que cualquiera que gane, los comuneros la tendrán salada, lo que obliga a desprenderse de los partidos, por muy “rebeldes” que sean y aprender de los asháninkas y los shuar, declarando los territorios bajo la autonomía y la autodeterminación comunitaria como inviolables y sagrados, por el bien de la humanidad.

No interesa quien gane, sino como se va multiplicando el ejemplo de los defensores de la selva, que expresan en sus formas de vida el cambio civilizatorio que necesitamos para detener la destrucción del planeta y soltar las formas de vida atadas a la política y a la economía, para dar rienda suelta desde los barrios y comunidades a la expansión de nuevas relaciones de cooperación y apoyo mutuo y de fraternidad y amor desde abajo, desde los corazones. Con firmeza, eso si, que camarón que se duerme se lo lleva la corriente. Así que los apostadores a los caballos que van a disputar la presidencia, mejor harán en guardas sus pesitos y hacer de la ezperanza una sumatoria de pequeños gestos y volver a casa a abrir las puertas y ventanas para que circule el buen vivir y el aire puro. Póngale pino, hermano, no se quede enredado en los palos. Deje de correr, que el caracol llegó hace rato.

Jaime Yovanovic Prieto
profesor_j@yahoo.com
@yovanovicprofej
http://yovanovic.blogspot.cl