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La Paz.
Las dos carreteras altiplánicas de acceso al vecino país de Perú continúan cerradas, al santuario a Copacabana en forma esporádica y al Desaguadero de manera permanente, por la exigencia de los comunarios de la zona de que se nacionalicen los hidrocarburos.
El altiplano paceño, los caminos a Copacabana y Desaguadero, que comunican el país con Perú, continúan cerradas, sin perspectivas de una pronta solución. La Policía descartó cualquier intervención a los grupos de bloqueadores.
La protesta de los comunarios de la zona exige al Gobierno la nacionalización de los hidrocarburos, la modificación de las preguntas para el referéndum, previsto para el 18 de julio, y la anulación del convenio que concede inmunidad judicial a las tropas de Estados Unidos.
De acuerdo con el informe presentado por el director del Organismo Operativo de Tránsito, Fernando Peláez, la carretera que conduce a la población de Copacabana sigue obstruida por bloqueos, los campesinos colocan piedras en la ruta, indicó.
Las poblaciones que participan de estos cierres de la carretera son las de Peñas, Pucarani, Batallas y Tito Yupanqui. El conflicto se extiende hasta el puerto de Tiquina. Peláez indicó que en este lugar los balseros se niegan a cruzar el lago con vehículos y pasajeros, que se dirigen al santuario de Copacabana.
En el camino que lleva hacia Desaguadero, frontera con Perú, los bloqueos de los campesinos mantienen la vía cerrada durante todo el día.
