Noticias y reacciones a los comunicados zapatistas de Alerta Roja

23.Jun.05    Análisis y Noticias

COMUNICADO DEL COMITÉ CLANDESTINO REVOLUCIONARIO INDÍGENA-

COMANDANCIA GENERAL DEL EJÉRCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL.

MÉXICO.

20 DE JUNIO DEL 2005.

AL PUEBLO DE MÉXICO:

A LOS PUEBLOS DEL MUNDO:

HERMANOS Y HERMANAS:

PRIMERO.” COMO SE HA HECHO PÚBLICO, A PARTIR DEL DÍA 19 DE JUNIO

DEL 2005, EL EJÉRCITO ZAPATISTA DE LIBERACIÓN NACIONAL ESTABLECIÓ

LA ALERTA ROJA GENERAL EN TERRITORIO REBELDE.

LA RAZÓN DE ESTA ALERTA ROJA GENERAL ES QUE EL COMITÉ

CLANDESTINO REVOLUCIONARIO INDÍGENA-COMANDANCIA GENERAL DEL

EZLN HA LLAMADO A CONSULTA A SUS TROPAS INSURGENTES, A TODOS

LOS COMANDANTES Y COMANDANTAS, A RESPONSABLES REGIONALES Y

LOCALES, Y A SUS BASES DE APOYO.

ESTA ALERTA ROJA ES UNA MEDIDA PRECAUTORIA DEFENSIVA. COMO

RECORDARÁN USTEDES, EN FEBRERO DE 1995, MIENTRAS EL EZLN SE

ENCONTRABA HACIENDO UNA CONSULTA INTERNA, FUE ATACADO POR LAS

FUERZAS GUBERNAMENTALES. EN ESA OCASIÓN, LA TRAICIÓN FUE

REALIZADA POR ERNESTO ZEDILLO PONCE DE LEÓN (ENTONCES TITULAR

DEL EJECUTIVO FEDERAL Y HOY EMPLEADO DE EMPRESAS

TRASNACIONALES) Y ESTEBAN MOCTEZUMA BARRAGÁN (ENTONCES

SECRETARIO DE GOBERNACIÓN Y HOY EMPLEADO DE SALINAS PLIEGO).

SEGUNDO.- EN ESTA CONSULTA INTERNA…

- LA DIRECCIÓN DEL EZLN ESTÁ HACIENDO UN RECONOCIMIENTO AL

SACRIFICIO, DISPOSICIÓN Y HEROÍSMO DE SUS BASES DE APOYO,

RESPONSABLES, MILICIANOS Y MILICIANAS. Y DE LOS INSURGENTES E

INSURGENTAS, POR ESTOS CASI 12 AÑOS DE GUERRA Y RESISTENCIA. TODO

LO BUENO QUE HEMOS HECHO Y LO ALCANZADO HA SIDO POR ELLAS Y

ELLOS. LOS ERRORES COMETIDOS HAN SIDO RESPONSABILIDAD

EXCLUSIVA DE LA DIRECCIÓN ZAPATISTA.

.- EL CCRI-CG DEL EZLN ESTÁ PRESENTANDO A SUS INTEGRANTES UN

BALANCE DE LA ETAPA EN LA QUE ESTÁ NUESTRA ORGANIZACIÓN Y UN

ANÁLISIS DE LA SITUACIÓN NACIONAL ACTUAL. ADEMÁS, LES ESTÁ

PROPONIENDO A SUS BASES DE APOYO, QUIENES CONSTITUYEN EL MANDO

SUPREMO DE NUESTRO MOVIMIENTO, UN NUEVO PASO EN LA LUCHA. UN

PASO QUE IMPLICA, ENTRE OTRAS COSAS, ARRIESGARSE A PERDER LO

MUCHO O POCO QUE SE HA LOGRADO, Y A QUE SE AGUDICEN LA

PERSECUSIÓN Y EL HOSTIGAMIENTO EN CONTRA DE LAS COMUNIDADES

ZAPATISTAS.

.-POR ESTO, AL HABLAR CON SUS INTEGRANTES, EL EZLN LES ESTÁ

DEVOLVIENDO LA PALABRA EMPEÑADA EL PRIMERO DE ENERO DE 1994.

TODOS LOS Y LAS ZAPATISTAS ESTÁN AHORA EN LIBERTAD MORAL DE

SEGUIR O NO CON EL EZLN EN EL SIGUIENTE PASO QUE ESTÁ SIENDO

CONSULTADO, SI ES APROBADO POR LA MAYORÍA.

TERCERO.- EN CUANTO CONCLUYA ESTA CONSULTA INTERNA,

INFORMAREMOS DE SU RESULTADO A LA OPINIÓN PUBLICA NACIONAL E

INTERNACIONAL.

¡DEMOCRACIA!

¡LIBERTAD!

¡JUSTICIA!

Desde las Montañas del Sureste Mexicano.

Por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Subcomandante Insurgente Marcos

México, en el sexto mes del año 2005

MÉXICO.

20 DE JUNIO DEL 2005

AL PUEBLO DE MÉXICO:

A LOS PUEBLOS DEL MUNDO:

HERMANOS Y HERMANAS:

PRIMERO Y ÚNICO.- LES INFORMAMOS QUE, DESDE MEDIADOS DEL AÑO DEL 2002, EL EZLN ENTRÓ EN UN PROCESO DE REORGANIZACIÓN DE SU ESTRUCTURA POLÍTICO-MILITAR. ESTA REORGANIZACIÓN INTERNA YA HA TERMINADO.

TENEMOS LAS CONDICIONES NECESARIAS PARA SOBREVIVIR, A UN ATAQUE O ACCIÓN DEL ENEMIGO QUE ACABE CON NUESTRA DIRECCIÓN ACTUAL, O QUE INTENTE ANIQUILARNOS TOTALMENTE.

LOS ESCALONES DE MANDO Y LA SUCESIÓN DE RESPONSABILIDADES HAN QUEDADO CLARAMENTE ESTABLECIDOS, ASÍ COMO LAS ACCIONES Y MEDIDAS A TOMAR EN CASO DE SER AGREDIDOS POR LAS FUERZAS GUBERNAMENTALES Y SUS PARAMILITARES.

EL CCRI-CG DEL EZLN COMUNICA QUE ESTÁ EN CONDICIONES DE SEGUIR DIRIGIENDO LA LUCHA ZAPATISTA, AUNQUE PIERDA, ASÍ SEA POR CÁRCEL, POR MUERTE, O POR DESAPARICIÓN FORZADA, A PARTE O A LA TOTALIDAD DE SU DIRECCIÓN ACTUAL CONOCIDA PÚBLICAMENTE.

ES TODO.

¡DEMOCRACIA!

¡LIBERTAD!

¡JUSTICIA!

Desde las Montañas del Sureste Mexicano.

Por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena-Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Subcomandante Insurgente Marcos

Comunicado que emite el Centro de Derechos Humanos “Fray Bartolomé de las Casas” ante la Alerta Roja decretada por los zapatistas

El Centro de Derechos Humanos resalta antecedentes.

Boletín de Prensa, San Cristóbal de Las Casas, Chiapas a 21 de junio de 2005 - 10:30 hrs.
Alerta Roja en Chiapas
Ante los hechos de los últimos dias con respecto a la alerta roja del EZLN, el Centro de Derechos Humanos quiere llamar la atención sobre los siguientes antecedentes:
Desde hace dos meses se han registrado movimientos del ejército mexicano, en lo que constituye el mayor movimiento militar desde la salida de las siete posiciones solicitadas por el EZLN en el 2001:
- A inicios de mayo… en la cañada perla, zona de influencia del grupo paramilitar Movimiento Revolucionario Antizapatista
- 4 de mayo…en Bochil y el Escopetazo en Ixtapa
- 11 de mayo…en Los Chorros
- 6 de junio… en Xo’yep campamento de desplazados zapatistas, víctimas de los paramilitares.
- 17 de junio… en Suchiate y Huixtla en el estado de Chiapas pero fuera de la zona de conflicto.
Este movimiento sólo puede ser leído desde una lógica militar. Un reposicionamiento táctico en una campaña de guerra vigente, es decir, el ejército no se retira, se reactiva.

El Centro de Derechos Humanos quiere llamar la atención sobre los siguientes antecedentes:
1.- Movimiento militar:

Desde hace dos meses se han registrado movimientos del ejército mexicano, en lo que constituye el mayor movimiento militar desde la salida de las siete posiciones solicitadas por el EZLN en el 2001:

- El Calvario (inicios de mayo), en la cañada Perla, zona de influencia del grupo paramilitar Movimiento Revolucionario Antizapatista, hoy identificado con las nuevas siglas de Organización para la defensa de los Derechos Indígenas y Campesinos (OPDDIC).

- Bochil y El Escopetazo en Ixtapa (4 de mayo aproximadamente). Bochil es el más cercano a la zona donde ocurrió el operativo militar antinarcóticos (Pueblo Nuevo, Tapilula y Rayón).

-Los Chorros (11 de mayo), cuna de los paramilitares en el municipio de Chenal’hó, en la Zona Altos, responsables de la matanza de Acteal.

-Xo’yep (6 de junio), también en Chenal’hó, en la zona de conflicto, donde existen los campamentos de desplazados zapatistas, víctimas de los paramilitares.

- Suchiate y Huixtla (anunciados el 17 de junio) en el estado de Chiapas pero fuera de la zona de conflicto.

Ante la falta evidente de información por parte de las autoridades políticas, este movimiento sólo puede ser leído desde una lógica militar. Un reposicionamiento táctico en una campaña de guerra vigente, es decir, el ejército no se retira, se reactiva.

2.- Declaraciones de la SEDENA del 20 de junio.
Ante la declaración de la SEDENA en el sentido de haber destruido plantíos de marihuana en tres municipios, dentro del área de influencia del EZLN, debemos señalar que si bien es posible que haya presencia de bases de apoyo zapatistas en Tapilula, Rayón y Pueblo Nuevo, esta presencia sería en todo caso minoritaria y su influencia es mínima. La correlación de fuerzas políticas y sociales en la zona responde a otros actores, que en su caso tienen mayor presencia y relevancia.

Nos preocupa que funcionarios como Luis Ernesto Derbez, Secretario de Relaciones Exteriores y algunos medios de comunicación, intenten relacionar el componente del narcotráfico al conflicto en Chiapas, dado que lo distorsiona, mucho más si se busca con él justificar una escalada de violencia. El comunicado de la SEDENA, ante la falta de explicaciones y las declaraciones de la Secretaría de Gobernación aparecidas el día de hoy, resulta tendencioso y peligroso.

3.- Otros hechos recientes:

1.- La reactivación del Ejército mexicano coincide con el congelamiento de las cuentas de Enlace Civil y la filtración a los medios de comunicación de los funcionarios de BBV- Bancomer de un posible ¨lavado de dinero¨ en las cuentas de la organización.

2.- Por el momento la página de web del Frente Zapatista se encuentra inhabilitada y de acuerdo a reporteros locales, en San Cristóbal hay teléfonos “que están caídos”.

3. - Reactivación del hostigamiento paramilitar, particularmente de Paz y Justicia, que la semana pasada propicio el desplazamiento de 15 familias de la comunidad de “Andrés Quintana Roo”, en el municipio de Sabanilla. También tenemos información respecto a reuniones cada vez mas frecuentes, de Paz y Justicia en la Zona Norte del estado.

Ante los hechos descritos, este Centro de Derechos Humanos exige al presidente Fox:

1.- Cese inmediato al movimiento militar del Ejército mexicano y reanudación de las vías políticas.

2.- Información pública y transparente que explique la avanzada del Ejército mexicano.

A las partes en conflicto:
Respeto absoluto al Derecho Internacional Humanitario, particularmente la protección de la vida y la integridad física de la población civil.

A los medios de comunicación y a la sociedad civil nacional e internacional:

A los medios de comunicación, seguir de cerca los acontecimientos en Chiapas en los próximos días y evitar la especulación ateniéndose a la información que se de a conocer por los actores.

A la sociedad civil, organizar iniciativas que apoyen la distensión e impidan el avance de una escalada de violencia.

La puerta al diálogo, abierta: Presidencia

La puerta del diálogo con el EZLN siempre ha estado abierta, afirmó ayer el vocero de la Presidencia, Rubén Aguilar, y aseguró ‘’de manera categórica'’ que la zona fronteriza de los Altos y la selva de Chiapas están en plena normalidad.

Aguilar eludió opinar sobre la declaración de alerta roja que hizo el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y se refirió reiteradamente al comunicado que la Secretaría de Gobernación emitió el lunes pasado, donde se afirma que no hay problemas en el estado.

Cuando se le insistió si consideraba que hubo actos de provocación que llevaron a los zapatistas a cerrar los Caracoles y acuartelar a sus tropas regulares, respondió: ‘’No hay ningún indicio'’.

Aseguró que Chiapas está en plena normalidad, según lo indica información recabada en las últimas semanas, validada con las instancias estatales y federales.

Ante la pregunta de si había indicios de que el Ejército Zapatista tuviera vínculos con algún cártel de la droga dijo que no contaba con información y que sólo podía reiterar lo dicho por la Secretaría de la Defensa hace tres días, en el sentido de que destruyó plantíos de mariguana en tres municipios de los Altos de Chiapas.

Se le insistió en conocer su punto de vista, como ex integrante de una organización armada, sobre la declaración de los zapatistas y sólo comentó: ‘’Bueno, para los que no saben, Pedro era mi seudónimo en la guerrilla salvadoreña'’.

Aguilar participó en el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional en los años 80, y estaba a cargo de la agencia de noticias rebelde Salpress.

Cuando se le preguntó si cabría la posibilidad de iniciar pláticas con los zapatistas señaló que la puerta del diálogo ha estado abierta siempre y que la oficina del comisionado para la paz en Chiapas, Luis H. Alvarez, tiene una relación permanente con las comunidades chiapanecas.

Soledad, desconcierto, incertidumbre y temor en la comunidad de Morelia

Solecito Las pocas personas que deambulaban por las calles corrían a ocultarse al notar la presencia de extraños o vehículos

Solecito La medida del EZLN nos tomó por sorpresa, dicen en Altamirano

Morelia, Chiapas, 21 de junio. Un ambiente de soledad, desconcierto e incertidumbre prevalecía hoy en esta comunidad, donde este lunes fue cerrado el caracol denominado Torbellino de nuestras palabras, debido a la alerta roja general decretada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

A la entrada de las instalaciones del caracol, situadas a las afueras de esta comunidad tzeltal -sede del municipio autónomo 17 de Noviembre-, se colocó desde el pasado lunes un gran letrero con la frase que ahora se encuentra en los cinco caracoles zapatistas: ‘’Cerrado por alerta roja'’. Sin embargo, la puerta de acceso para personas estaba sin llave y sin vigilancia, por dentro o fuera, por lo que los periodistas pudieron entrar sin problema alguno.

Asimismo, se observó que estaban cerrados el taller de zapatería, la tienda de abarrotes, la cocina, los dormitorios, las oficinas de la junta de buen gobierno denominada Corazón del arcoiris de la esperanza, la cafetería y otros locales. La construcción de varios cuartos de concreto fue abandonada a medias, y a un lado quedó parte del material que se estaba utilizando. En un cuarto cercano, cerrado con llave, había almacenadas varias bolsas de cemento. Todo estaba aparentemente abandonado.

‘’Mártires'’ pintores

En las paredes de madera de uno de los dormitorios se pueden apreciar las imágenes pintadas de Severiano, Sebastián y Hermelindo -'’Mártires de Morelia. Siempre en nuestra memoria'’, según un grafiti-, presuntamente asesinados por elementos del Ejército Mexicano el 7 de enero de 1994.

También estaba vacía la escuela autónoma, que se ubica en un amplio terreno 500 metros más adelante del caracol.

En el centro de Morelia, perteneciente al municipio oficial de Altamirano -que vive la división entre simpatizantes priístas y zapatistas-, las casas estaban cerradas. Las pocas personas que deambulaban por las calles corrían a encerrarse al ver acercarse algún vehículo. Sólo en la cancha de basquetbol que está en el centro de la comunidad varios alumnos ensayaban con su maestro un baile para la fiesta de fin de cursos.

Por otra parte, en la cabecera municipal de Altamirano, el síndico Enrique Hernández Gómez dijo en entrevista que a todos los ‘’tomó por sorpresa'’ el anuncio de la alerta roja decretada por el EZLN, de la cual se enteraron anoche u hoy muy temprano. ‘’Mucha gente, sobre todo en las comunidades, ni siquiera lo sabe'’, comentó.

Destacó que, no obstante, la situación es de tranquilidad y que en la zona no se han visto movimientos militares ni policiacos después del anuncio de la comandancia zapatista.

A unos 20 kilómetros de la cabecera de Altamirano, en el crucero de Cuxuljá, sobre la carretera San Cristóbal-Ocosingo, hoy como ayer varios camiones del Ejército Mexicano permanecieron durante horas estacionados frente a la tienda zapatista llamada Arcoiris.

Tienda zapatista, ignorada por elementos del Ejército Mexicano

Aparentemente en ambas ocasiones primero llegó un grupo para esperar otros camiones con soldados, y cuando se juntaron salieron todos hacia Ocosingo, sin haber colocado ningún puesto de control o retén. ‘’Aquí estuvieron comprando en la tienda de al lado, haciendo llamadas por sus teléfonos, pero nada más'’, comentó uno de los vendedores del local comercial, quien dijo que los federales no adquirieron nada en el establecimiento zapatista.

Justamente a un lado de la tienda comienza la terracería que conduce a Moisés Gandhi, sede del municipio autónomo Che Guevara. A pocos metros de la entrada, tres jóvenes salieron al paso para impedir el acceso a la comunidad. ‘’Hoy no se puede entrar, tienen que regresarse'’, afirmaron sin dar más explicaciones a los reporteros de varios medios de comunicación. El acceso de extraños a esta comunidad fue cerrado desde el pasado domingo.

Además del movimiento militar reportado en Cuxuljá, el Ejército Mexicano colocó hoy un retén frente a las instalaciones de la 31 Zona Militar con sede en Rancho Nuevo -a 10 kilómetros de este lugar-, en el cruce a Comitán, Ocosingo y Altamirano.

A lo largo del trayecto de más de cien kilómetros desde San Cristóbal de las Casas hasta esta comunidad, se observó que todas las actividades se desarrollan con normalidad. Sólo en Morelia se respira un aire de incertidumbre y cierto temor entre sus habitantes.

Editorial de la Jornada de hoy
El costo del desprecio

Las comunidades indígenas de Chiapas que se levantaron en armas el primero de enero de 1994 habían hecho anteriormente muchos intentos por llamar la atención, en forma pacífica, sobre su situación exasperante: el desdén oficial, la represión sistemática, el saqueo de sus tierras y sus recursos, la marginación y la insalubridad y, sobre todo, la anulación de su identidad por el México público y privado que aspiraba ­la aspiración sigue en pie­ a ingresar al primer mundo sin reparar que muchos de sus habitantes vivían ­y aun viven­ en un país insensible y áspero, con elites que se encaraman en una montaña de miseria para imitar los patrones (políticos, culturales, de consumo) de Estados Unidos y Europa occidental. Durante la salvaje “modernización” salinista, y desde mucho antes, los pueblos indios del sureste se reunieron, formularon llamados a la conciencia nacional y marcharon a la capital de la República para denunciar el ahondamiento creciente de una fractura histórica entre el país de unos cuantos, que lo tenía todo ­y que lo sigue teniendo, hoy más concentrado que hace 11 años­ y la nación de los más, que hasta la fecha no tiene nada.

No fueron escuchados. El gobierno, y con él las clases acomodadas y un buen sector de las medias, vivían una borrachera de modernidad que parecía cubrir los sufrimientos esenciales de mayorías sin casa, sin tierra, sin escuela, sin hospitales, sin voz ni voto. Esos pueblos indios decidieron jugarse, entonces, lo único que les quedaba, la dignidad, para hacerse escuchar por el resto de México y por el mundo. Irrumpieron en plena celebración por la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, para recordar que uno de los socios en ese instrumento internacional era un país generoso con los capitales extranjeros, con los altos funcionarios y con los acaudalados nacionales, pero implacable y depredador con sus propios desamparados. Las autoridades respondieron, inicialmente, con una feroz represión militar contra los alzados, pero tras unos días de combates la sociedad hizo escuchar su voz y exigió el cese de las hostilidades. Los rebeldes, a su vez, escucharon el mensaje de la ciudadanía movilizada, revisaron sobre la marcha sus estrategias y sus convicciones, y decidieron darle una oportunidad a la negociación pacífica. El salinismo, por su parte, no tuvo más remedio que detener los operativos militares e iniciar un vasto ejercicio de simulación política a fin de exhibir una imagen mínimamente presentable ante la opinión pública internacional. Priísta al cabo, inició negociaciones, no para atender las raíces del conflicto, sino para ensayar la corrupción y la cooptación de los alzados, y acabó naufragando en su propia descomposición y en las pugnas entre el entonces comisionado para la paz, Manuel Camacho, y el candidato sustituto, Ernesto Zedillo.

Cuando éste asumió la Presidencia hizo como que continuaba las negociaciones y se dedicó a preparar, en las sombras, un golpe de mano contra la dirigencia rebelde; el 9 de febrero de 1995, mientras mantenía la ficción de los contactos, hizo avanzar al Ejército a las comunidades zapatistas, giró órdenes de aprehensión contra la dirigencia indígena y a punto estuvo de hundir al país en una confrontación sangrienta y generalizada. La sociedad civil se movilizó nuevamente y logró imponer una mínima racionalidad que se tradujo en la Ley para el Diálogo y la Negociación en Chiapas y la constitución de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) del Congreso de la Unión. Se restablecieron las negociaciones, esta vez en San Andrés Larráinzar, y los representantes gubernamentales y los rebeldes lograron conformar un documento fundamental para realizar modificaciones constitucionales en materia de derechos y cultura indígenas que, de haber prosperado, habría sentado las bases para sanar la fractura entre el Estado y los pueblos indios. Pero el gobierno de Zedillo volvió a traicionar, desconoció lo firmado por sus propios enviados en San Andrés y se empeñó en la vía de la contrainsurgencia: cercar a las comunidades, hostigar a sus habitantes, armar grupos paramilitares de choque, provocar a los zapatistas. Esa estrategia criminal dio por resultado el desplazamiento de pueblos enteros que hubieron de internarse en la selva a pasar hambre y enfermedades, la violación de innumerables mujeres por efectivos militares y parapoliciales, la destrucción de viviendas, el robo de las escasísimas pertenencias de las comunidades, el acoso permanente. La política zedillista hacia los insurgentes culminó con la matanza de Acteal, organizada y dirigida por mandos policiales y militares, y cuyos principales responsables políticos son Zedillo y su secretario de Gobernación de entonces, Emilio Chuayffet. La paciencia de los alzados no se agotó ni siquiera con el asesinato de mujeres embarazadas ni con el allanamiento y la destrucción de sus comunidades por la tropa ni con la falta de palabra del Ejecutivo federal. Se mantuvieron fieles a la demanda de paz de la sociedad y esperaron tiempos mejores.

Vicente Fox llegó a la Presidencia precedido por su promesa demagógica y absurda de que resolvería “en 15 minutos” (así lo dijo) el conflicto de Chiapas. En los primeros tiempos de su gobierno las condiciones para avanzar en una solución real al problema parecieron propicias. El mandatario envió al Congreso, como iniciativa propia, la propuesta de reformas legales elaborada por la Cocopa con base en los acuerdos de San Andrés. En señal de buena voluntad, los zapatistas enviaron a la capital a una parte de sus dirigentes. Pronto pudo percibirse que la clase política del país no estaba a la altura de las circunstancias. Hubo voces racistas escandalizadas por la posibilidad de que los representantes indígenas usaran la tribuna del Palacio Legislativo de San Lázaro. Se hizo evidente que Fox no había realizado ningún trabajo político antes de enviar la iniciativa legal y que, así, la condenaba al fracaso. Finalmente, los legisladores aprobaron una vergonzosa parodia de lo acordado en San Andrés y la Suprema Corte de Justicia de la Nación desechó, una a una, las inconformidades interpuestas contra el engendro de modificaciones legales. El titular del Ejecutivo, por su parte, dio por culminados los “15 minutos” y declaró que el conflicto estaba resuelto. Desde entonces (2001) parece creerlo así.

La contrainsurgencia se ha disimulado, pero no ha cesado. En fechas recientes se ha sabido de la reactivación de grupos paramilitares orientados y financiados por la oligarquía chiapaneca tradicional, por las autoridades locales y las federales. La esfera política del país ha confundido la prudencia de los zapatistas con la extinción de su alzamiento y de las causas que le dieron origen. El desprecio del México oficial a los indios alzados ha llegado a tal punto que los supone inexistentes.

El empecinamiento ­de los tres poderes de la Unión, de los partidos, del gobierno estatal, de los emporios mediáticos­ por volver invisibles a los indígenas chiapanecos dura ya más de cuatro años, pero todo tiene límite. Las causas de la rebelión de 1994 están presentes y vigentes, aunque no aparezcan en los noticiarios, con el agravio añadido del tiempo: cuatro años más de miseria, ninguneo, provocaciones, cancelación de esperanzas personales y colectivas de dignidad, justicia, democracia, educación, salud y desarrollo respetuoso. Nadie puede reprochar a los zapatistas que no hayan tenido paciencia, contención y voluntad de paz. No son ellos, sino el México oficial, el que alienta, con su insensibilidad, su ceguera y su falta de sentido, la desestabilización y la amenaza de la violencia. Tal vez el sureste del país esté próximo a una nueva explosión indeseable y de consecuencias impredecibles pero necesariamente graves. Es posible que la sociedad deba salir de nueva cuenta a las calles a despertar a las autoridades de su prolongada siesta sexenal, a decirles que en Chiapas se gesta un nuevo estallido y que la responsabilidad corresponde, una vez más, al gobierno.

Movimientos militares:
San Cristóbal de las Casas, Chiapas, 21 de junio. Los recientes anuncios zapatistas se dan en un contexto de movimientos del Ejército federal fuera de lo común y no explicados a la opinión pública, como el reacomodo de posiciones en Chenalhó y el ingreso este fin de semana, desde el cuartel de Rancho Nuevo a la selva Lacandona, de convoyes “especiales” (como se denominan con un letrero al frente y otro en la retaguardia) llevando pertrechos y centenares de soldados en grandes camiones y vehículos todoterreno.

Pero la sensación de déjà vu es desmentida con oportunidad por las versiones oficiales que reiteran: todo es “normal” y está en calma. Menos mal, piensa uno. Una vez más, oficialmente en Chiapas no pasa nada. El reagrupamiento de grupos paramilitares en los Altos y la zona norte, o las flamantes alianzas antizapatistas de organizaciones del PRI y el PRD en Zinacantán, Chilón y Ocosingo no están sucediendo. Tampoco el reacomodo de posiciones militares. Bueno, en su conjunto la guerra de baja intensidad vendría siendo un invento de las oenegés.

No obstante, ocurren cosas dignas de reflexión. Al notificar sobre recientes operativos en su lucha contra el cultivo de estupafecientes, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) incorporó los nombres de tres municipios constitucionales a la geografía de la rebelión indígena que no estaban considerados ni por la propia instancia castrense como parte de la “zona de conflicto” o “de influencia zapatista”.

De hecho, Tapilula, Pueblo Nuevo Solistahuacán y Rayón (las tres localidades donde se encontraron plantíos, por lo visto grandes, de mariguana) están fuera del amplio cerco tendido por el Ejército federal en torno de la región indígena de Chiapas desde 1995. Ni siquiera existen allí posiciones de la Sedena, únicamente campamentos y cuarteles de las policías Judicial y sectorial.

Además, estos municipios no se localizan en los Altos, como afirma el comunicado de la Sedena dado a conocer ayer por la tarde, horas después de que el EZLN se declarara en alerta roja. El boletín fue la primera reacción de las fuerzas armadas al anuncio de los rebeldes, aunque los operativos se efectuaron, según la versión oficial, los días 15 y 16 de junio, y en realidad no guardaban relación directa con el dispostivo castrense (el más grande del país) alrededor y dentro de los municipios autónomos zapatistas.

La inexactitud geográfica resultó tan evidente que el propio gobierno chiapaneco se apresuró ayer mismo a corregir el gazapo militar. No, esos lugares no pertenecen a los Altos.

Puesto que se localizan muy al noroeste de la región tradicional del pueblo tzotzil, Tapilula, Rayón y Pueblo Nuevo Solistahuacán tampoco corresponden a la llamada oficialmente zona norte, que es de predominio chol y tzotzil, y de la cual separa a estos municipios presuntamente mariguaneros una porción importante del estado de Tabasco, aquella donde se localizan Macuspana, Jalapa y Tacotalpa.

Con precisión, Tapilula, Rayón y Pueblo Nuevo corresponden al límite histórico del territorio zoque, más próximo, por ejemplo, al otrora famoso volcán Chichonal; incluso el estado de Veracruz está más cerca de las mencionadas localidades que la región militarizada de Chiapas.

Este recurso de confusión geográfica gubernamental no es nuevo. Después de 1995 ha sido empleado de forma recurrente, siempre con pobres resultados ante la opinión pública. Así fue sobre todo en el periodo zedillista-alborista, cuando los “montajes” mediáticos eran más descarados. Las fuerzas armadas efectuaban quemas de plantíos ilegales ante las cámaras de las principales televisoras en un lugar de la geografía chiapaneca, y al hacerlo público ubicaban las imágenes en otro lugar (casualmente en territorio zapatista).

Ya entrados en ejemplos, este enviado presenció en 1998 una espectacular quema de mariguana en Los Plátanos, una comunidad entonces y ahora bajo el control de una banda armada ocasionalmente paramilitar llamada Los Plátanos, en el municipio oficial El Bosque. Aquel predio incinerado se localizaba a la vista del campamento de la Policía Judicial en el centro del poblado, cuyos efectivos no participaron en la operación, sólo la contemplaron de lejos.

Esa misma noche, el gobierno de Roberto Albores Guillén divulgó la versión, apuntalada por los noticiarios de Televisión Azteca, de que los hechos habían ocurrido en “Santa Martha, municipio de San Andrés Larráinzar” (sic retrospectivo, siendo que Santa Martha está en Chenalhó, y la quema había ocurrido en un tercer municipio: El Bosque). Pero qué importaba. Al público qué más le da dónde queda Santa Martha (o Tapilula), y si los campos en la pantalla (o el boletín) son allí o en otro lugar parecido.

Es posible que en las localidades del otro norte chiapaneco mencionadas ayer por la Sedena existan bases de apoyo o simpatizantes del EZLN (que en este caso serían zoques, tzotziles o mestizos). Los hay por todas partes, en la costa, la frontera, los valles centrales que rodean Tuxtla Gutiérrez, el Soconusco y la Fraylesca. Como sea, no tienen relación con las amplias zonas en alerta roja zapatista en los Altos, la Lacandona y la zona norte.

La información de Sedena se guarda de responzabilizar a posibles zapatistas de tan ilegales cultivos. Es altamente improbable que se pudiera demostrar: esto nunca ha sucedido. Pero tales versiones se “sueltan” una y otra vez. Nunca faltan analistas vinculados al Departamento de Estado estadunidense o académicos que trabajan para el gobierno mexicano dispuestos a “deducir” que aquí, como en Colombia y Myanmar, la insurgencia se “asocia” al narcotráfico. Mientras El Chapo Guzmán y similares anden sueltos, estas contorsiones de la propaganda contrainsurgente carecen de significado real.

Confederación patronal dice que EZLN intenta influir en las elecciones:

Intenta el EZLN influir en la sucesión presidencial de 2006, dice la Coparmex

El presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Alberto Núñez Esteva, afirmó ayer que la alerta roja declarada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) es sólo un intento por influir en la sucesión presidencial del próximo año.

En entrevista, el empresario emplazó a ‘’Rafael Sebastián Guillén Vicente'’, a quien calificó de ‘’hombre preparado, capaz, universitario de Tampico'’, a ‘’quitarse la capucha'’, presentar propuestas y participar en la política dentro de los cauces institucionales, ‘’no con amenazas'’.

Asimismo, advirtió que un nuevo levantamiento indígena sólo empeoraría la situación del país, especialmente la de los más pobres. ‘’Esta amenaza de violencia, así puede interpretarse, es muy delicada. Nos preguntamos: ¿quién gana?, ¿quién pierde? Sinceramente no creemos que ganen los indígenas y todos podemos ser perdedores. Pensar en una acción de violencia sería un gran retroceso'’.

El líder patronal sostuvo que no hay justificación para la alerta roja, porque ‘’Chiapas, en general, dentro de sus condiciones, está en calma. No sabemos qué trasfondo pueda tener esto. Nos parece que es oportunismo político, ambición mediática en una época electoral en la cual toda la atención está puesta en lo que hacen y dicen los precandidatos'’.

Las condiciones de México, afirmó el dirigente empresarial, son muy diferentes a las de 1994, cuando se dio el levantamiento zapatista. ‘’Hemos conquistado con gran esfuerzo una democracia plural, libertades. Sin duda nos falta conquistar justicia, pero tenemos las vías democráticas para resolver nuestros problemas con elecciones incuestionables'’.

-Estas manifestaciones se deben en parte a que el problema de Chiapas sigue ahí; no se resolvió ni en 15 minutos ni en cinco años…

-Eso de los 15 minutos fue un decir poco afortunado. Chiapas ha mejorado; desafortunadamente, la pobreza de 50 por ciento de la población no se resuelve de la noche a la mañana, pero le aseguro que será mucho más grave si se sigue el camino de la violencia.

‘’El único camino que existe para resolver la pobreza es crear riqueza y distribuirla adecuadamente. La pregunta es cómo favorecer el desarrollo económico con empresas socialmente responsables. Todo lo demás sería dar marcha atrás, punto. Ojalá se crearan condiciones favorables para que más empresas pudieran llevar a Chiapas desarrollo, inversiones, capacitación, empleos, oportunidades. La pobreza no se ataca con amenazas de violencia, al contrario, se aumenta.'’

-El comunicado del EZLN evidencia un hartazgo de los políticos y de sus partidos. ¿Tiene sentido pedirle que se integre a la política?

-En Coparmex hemos criticado la partidocracia, pero mediante Sociedad en Movimiento y sus más de 220 organizaciones hemos impulsado una reacción de la sociedad civil para identificar los verdaderos problemas del país y las preguntas que deben responder los candidatos para un voto razonado.

‘’Ya estamos hartos de las descalificaciones. Cualquiera descalifica, es lo más fácil, y ya llevamos mucho tiempo con eso. La solución no es pegar de gritos, sino que la sociedad civil participe, que asuma su responsabilidad para que el cambio se haga de abajo hacia arriba. Eso crea las bases para el desarrollo.'’

-Estamos viendo encono político, violencia ligada al narcotráfico y enojo de los indígenas. ¿Se parece este escenario al de 1994?

-Aquel escenario fue desastroso: la pobreza se incrementó muy considerablemente. El relajo de 1994-95 le provocó un enorme daño al país.

Alerta pastoral de la diócesis de San Cristóbal

San Cristóbal de las Casas, Chis., 21 de junio. La diócesis local afirmó que la alerta roja general decretada por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) es un ‘’indicador'’ de la ‘’situación de indefinición y de no respuesta realmente efectiva a las causas que generaron y siguen alimentando el conflicto'’ armado que se inició en Chiapas en enero de 1994.

‘’Constatamos que la injusticia estructural no ha sido resuelta hasta ahora por los programas gubernamentales, y que las necesidades básicas del pueblo se mantienen y hacen ver la ineficacia del modelo neoliberal'’, se señaló en un documento leído por el obispo Felipe Arizmendi Esquivel, en conferencia de prensa ofrecida por el prelado en compañía de su obispo auxiliar, Enrique Díaz, y los titulares de las distintas vicarías.

Ante la actual situación en Chiapas, la diócesis de San Cristóbal de las Casas exhortó a todas las partes a que, ‘’sin recurrir a la vía de la violencia, se comprometan en un proceso de diálogo constructivo que siente las bases firmes de la paz que todos anhelamos'’.

Arizmendi afirmó que la alerta roja general del EZLN ha puesto a la diócesis en ‘’alerta pastoral'’, lo que significa que ‘’estaremos muy al pendiente de lo que pueda acontecer para ayudar a superar posibles divisiones y enfrentamientos, e incluso otorgar ayuda humanitaria en caso de ser necesario, si hubiera desplazados'’.

Llamado al gobierno

En el documento de seis páginas, la diócesis llamó a los gobiernos federal y de Chiapas a que, ‘’escuchando las necesidades reales del pueblo, ofrezcan soluciones efectivas a la pobreza, a la marginación y al racismo'’. Asimismo, los invitó a ‘’escuchar con atención las críticas expresadas por diferentes voces, que invitan a todos los actores políticos a una revisión a fondo del sistema político mexicano'’.

Al Ejército Zapatista le pidió que ‘’en su lucha social y política se mantenga fiel a las causas justas, haciendo todo lo posible por evitar toda acción bélica'’, y que ‘’no deje de fomentar la necesaria autocrítica de su caminar'’. De igual forma solicitó al Ejército que ‘’colabore en la construcción de la paz evitando todo tipo de acciones que puedan fomentar un clima de enfrentamiento entre mexicanos'’.

Al manifestar su confianza en que la actual situación será ocasión de generar nuevos caminos de vida y de justicia, la diócesis de San Cristóbal se comprometió ‘’a continuar cerca de las comunidades y a estar al pendiente de los acontecimientos, colaborando en la lucha por la justicia y la paz'’.

De su lado, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) anunció que se mantendrá ‘’al pendiente'’ de la actual situación en Chiapas, y dijo ‘’estar listo'’ para actuar en caso de ser necesario, informó Oscar Torrens, representante del organismo en el estado. ‘’Estamos en alerta y pendientes de cómo se van desarrollando los acontecimientos para actuar y estar presentes, si fuera el caso'’.

Ordena Salazar suspender contactos

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, 21 de junio. El gobierno de la entidad informó que suspendió “cualquier contacto” con los integrantes de los caracoles y juntas de buen gobierno del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), y sostuvo que aún desconoce cuáles son las razones que llevaron al grupo armado a emitir su alerta roja.

En un breve boletín de prensa, la administración estatal, encabezada por Pablo Salazar Mendiguchía, señaló que en virtud de que el comunicado de los zapatistas, difundido este lunes, no explica cuáles son los “elementos objetivos” que sustentan la declaración de una alerta roja general, “por el momento se reserva el derecho de fijar su posición sobre el tema”.

En relación con el cierre de los caracoles, juntas de buen gobierno y oficinas de municipios autónomos, el documento añade que se ha instruido a las distintas dependencias que han mantenido una relación de trabajo con esos espacios de “suspender cualquier tipo de contacto en tanto la dirigencia zapatista no precise cuáles son las condiciones en las que seguirán trabajando”.

Agregó que respetará las decisiones de las comunidades zapatistas y mantendrá abiertos “los espacios para el diálogo, la reconciliación y la construcción de una paz justa y digna”.

Alerta roja en Chiapas

Ana Esther Ceceña

El anuncio de alerta roja emitido el 20 de junio por el EZLN, a pesar de las múltiples razones que le podrían dar contenido, provocó una reacción de sorpresa similar a la del 1° de enero de 1994 cuando todo estaba listo para la entrada de México en el primer mundo anunciado por el TLC. Una década después todo parecía indicar una situación de coexistencia pacífica entre las Juntas de Buen Gobierno zapatistas y los gobiernos institucionales, y la construcción de las autonomías parecía estar avanzando sin más tropiezos que los de las medidas de contrainsurgencia habituales, que las comunidades zapatistas habían aprendido a sortear, qué fue lo que desató este llamado de emergencia.

Probablemente en las próximas horas se tendrán más noticias desde la comandancia zapatista, sin embargo, hay una serie de indicios que nos pueden ayudar a ir entendiendo el momento y condiciones en que esta alerta roja ocurre.

1. Aun no habiendo enfrentamientos armados en Chiapas, el ejército, de acuerdo con una investigación realizada por el CAPISE, ha estado realizando un trazado de toda la zona zapatista, colocando cuarteles o posiciones temporales, abriendo caminos, haciendo ejercicios de patrullaje, simulación y entrenamiento. Poco a poco las posiciones militares fueron construyendo un cerco sobre Montes Azules, la tan disputada reserva de la biosfera, que parecería apuntar hacia una posible operación quirúrgica.
2. La construcción de carreteras en los dos bordes de Montes Azules, una bordeando la frontera con Guatemala y otra entrando a las zonas más identificadas de arraigo zapatista avanzó con gran velocidad en los últimos dos años logrando una comunicación rápida hacia dentro y fuera de la Selva y los Altos.
3. La cancelación de cuentas bancarias de Enlace Civil aduciendo lavado de dinero y el operativo realizado por la Secretaría de la Defensa para destruir campos de cultivo de mariguana en tierras zapatistas (SEDENA, comunicado 168) indican la construcción de un escenario, donde por cierto sorprende la complicidad de BBVA, para colocar al EZLN en la circunstancia de grupo narcoterrorista y “legitimar” la aplicación de políticas antiterroristas, similares a las del Plan Colombia, contra él.
4. La visita de Condoleeza Rice a México en marzo para fijar las nuevas normas de convivencia en términos de seguridad se centró en el tema fronterizo y en la operatividad efectiva de una “frontera inteligente” “…que no es ni una frontera abierta, ni una frontera cerrada, sino que pretende ser una frontera flexible y capaz de garantizar seguridad” (Enriqueta Cabrera, CENCOALT), en la que el aspecto de información e inteligencia ocupa la primera línea. La preocupación estadounidense se centra sobre todo en la problemática de la frontera norte, donde un hecho sin precedentes y muy preocupante es la situación de Nuevo Laredo, ciudad de la frontera con Estados Unidos, en la que las fuerzas de seguridad mexicanas perdieron temporalmente el control y se puso en evidencia el involucramiento de los cuerpos locales con el narcotráfico. Durante varios días fueron ejecutados los jefes de la policía local e incluso miembros de la AFI (FBI mexicano) sin que pudiera restablecerse el orden. Y eso ocurre en la frontera con Estados Unidos, así que se considera que la disuasión de los migrantes, narcotraficantes o terroristas miembros de Al Qaeda o de grupos similares, que entrarían a Estados Unidos por México, exige un control estricto de todas las puertas de ingreso. La frontera de Chiapas con Guatemala es un foco de interés prioritario también por esta causa.
5. El cuidado de la frontera sur mexicana se ha justificado, además, por las actividades de una mafia que trafica con migrantes, con mujeres, adolescentes y niños para prostitución y con drogas, llamada la Mara Salvatrucha. Esta organización indudablemente debe ser combatida y erradicada pero llama la atención que justo el 20 de junio, día de la alerta zapatista, estuvieran reunidos en Chiapas algunos miembros acreditados del FBI, con fuerzas locales de seguridad, para “…analizar el combate a las pandillas juveniles como la Mara Salvatrucha”. “…tres días después de que finalizara la Cumbre Internacional AntiMaras en la ciudad de Tapachula bajo el auspicio de la Organización de Estados Americanos (OEA)” (Isaín Mandujano, Este-Sur/noticias de Chiapas). De golpe, cuando se refuerzan las políticas antiterroristas desde Estados Unidos, casualmente la Mara cobra una importancia que no había mostrado en todo el tiempo que lleva causando desmanes.
6. Es una coincidencia que la OEA, que es quien auspicia el Tratado Interamericano de Asistencia [militar] Recíproca (TIAR) y el Consejo de Seguridad Hemisférica en que participan los ministros de defensa de todo el continente, haya decidido realizar su reunión en Chiapas (aunque la Mara sea fundamentalmente centroamericana). Este fue el marco para un acuerdo entre los países de Centroamérica, México y Estados Unidos para “…crear una base de datos de los integrantes de la banda Barrio 18 y MS-13 que integran la mara salvatrucha” ya que, según Horacio Schroeder Bejarano, secretario de Seguridad Pública del Estado, “…hay interés y preocupación de las autoridades norteamericanas, por mantener un cerco en la frontera sur” “…lo importante es practicar una política integral y mantener la vigilancia en la frontera sur por ser un interés de los norteamericanos” (Gaspar Romero La Voz del Sureste). El combate a la Mara se hace “…desde la perspectiva adecuada, que es la cooperación interinstitucionales e internacional. (Comunicado de Lic. Magdalena Carral, Comisionada de la Secretaría de Gobernación). Sin embargo las fronteras “inteligentes”, como ha sido demostrado, tienen múltiples propósitos; el del control de los denominados “terroristas” es, por lo menos desde el Plan Cóndor, el más importante.
7. A esto hay que agregar, evidentemente, la gran importancia que tiene Chiapas en términos de recursos que no han podido ser explotados por causa de la insurrección zapatista y la posición geoestratégica de esta región que cierra el territorio de América del Norte y que ocupa un lugar privilegiado (el centro geográfico) en los proyectos del Corredor Biológico Mesoamericano del Banco Mundial y del Plan Puebla Panamá. Esto, que no es un indicio sino una realidad, es uno de los desafíos no resueltos del presidente Fox y uno de los puntos de interés de Estados Unidos. La salida de Fox de la presidencia se acerca y las señales para hacer viable la posible candidatura de su esposa hablan de Chiapas y de privatizaciones en petróleo, agua y electricidad, una vez que ya se avanzó con la ley Monsanto.

México se encuentra en una profunda crisis, agravada por la decisión estadounidense de desplegarse hacia el sur en todos los sentidos. El clima político pre-electoral, atravesado por disputas de mafias, corrupción y descomposición determina un escenario muy revuelto en el que son previsibles los magnicidios y, sin duda, los intentos por terminar de una vez con el conflicto en Chiapas.

Con todos estos indicios, y otros que irán completando el cuadro, no sería muy arriesgado asegurar que la alerta roja zapatista responde a un intento por detener una posible operación quirúrgica o una inminente ofensiva represiva contra todas las autoridades zapatistas para descabezar el movimiento. Por ello anuncian la vuelta a la clandestinidad.

La única manera de evitar una masacre, y un avasallamiento total de nuestros pueblos, desatendiendo el llamado a alejarse de la zona por seguridad hecho por la Comandancia, es acudir masivamente a caminar al lado y con las comunidades indígenas de Chiapas para mostrar que ni ellos ni nosotros estamos solos y que no dejaremos de pelear por democracia, libertad y justicia, donde quiera que nos encontremos.

Ana Esther Ceceña
Coordinadora del GT Hegemonías y Emancipaciones
Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales