Comunarios de la Central de Organizaciones de Pueblos Indígenas Guarayos (Copnag) bloquean carretera cansados de la tala indiscriminada de la Tierra Comunitaria de Origen (TCO)

29.Ago.05    Análisis y Noticias

Guarayos bloquean la carretera a Trinidad

Santa Cruz, Bolivia.- Unas 200 personas procedentes de varias comunidades originarias de Guarayos bloquean desde ayer la carretera a Trinidad, exigiendo la inmediata presencia de los responsables del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) y del prefecto del departamento, Rubén Darío Cuellar, para aclarar el enfrentamiento ocurrido el jueves, donde un policía perdió la vida por defender un predio presuntamente en litigio.

El alcalde de Ascensión de Guarayos, Robert Shoock, señaló que los originarios de esa provincia, efectivamente, han interrumpido el tránsito vehicular entre Santa Cruz y Trinidad, pidiendo que las autoridades investiguen los hechos del pasado jueves y el avasallamiento de tierras de los originarios.

“Ellos están ) de Guarayos y el poder político que hay de por medio”, dijo la autoridad municipal agregando que este sector está molesto que las concesiones forestales se hagan aparecer como tierras agrarias.

Dirigentes de la Central de Organizaciones de Pueblos Guarayos (Copnag) señalaron que el predio, donde ocurrió el enfrentamiento, se encuentra en el área de la TCO y cuestionaron que el INRA persista en atender algunas demandas en la zona.

Primera jornada

Se cumplió ayer el primer día de bloqueo en Ascensión declarado por la Central de Organizaciones de Pueblos Indígenas Guarayos (Copnag), sin miras de una solución inmediata, el conflicto contrariamente tiende a empeorar por el apoyo de la Alcaldía, el Comité Cívico de Ascensión, la Subprefectura y de otros pueblos originarios a la medida adoptada por Copnag.

Más de 80 camiones y buses quedaron parados en la entrada de Ascensión por el bloqueo que se cumple desde las cero horas de ayer. Cientos de pasajeros formaron una romería hacia el centro del pueblo para pasar la noche. Muchos viajeros acordaron hacer trasbordo con los choferes de los buses varados a ambos lados de la vía bloqueada.

“Alrededor de la 13:00 hablé con la ministra Bozo y le expuse el problema. Quedó en devolverme la llamada, sin embargo, no lo hizo. A las 16:45 le hablamos otra vez, pero no pudimos establecer contacto, así que todo queda como está”, señaló Robert Shock, alcalde de Ascensión.

José Abiyuna, presidente de la Copnag, manifestó que el bloqueo continuará de manera indefinida hasta que se hagan presentes el prefecto Rubén Darío Cuéllar y el director departamental del INRA, Santiago Paniagua Flores.

“Hablamos con el secretario general del Prefecto y nos dijo que Cuéllar se encontraba en Roboré en compañía de la ministra Bozo. Por lo tanto, pensábamos que podían pasarse acá, pero no lo hicieron”, indicó Abiyuna.

Agregó que las organizaciones dispusieron el cierre de los negocios en Ascensión. Con esa instructiva, un grupo de jovenzuelos, presumiblemente integrantes de una agrupación juvenil, recorrieron las zonas más concurridas del pueblo y obligaron a cerrar los mercados, los restaurantes, puntos de llamadas, locales nocturnos y otros negocios para que el bloqueo se haga sentir en la población.

Uso de la fuerza

El prefecto del departamento, Rubén Darío Cuéllar, admitió el bloqueo en el ingreso a la localidad de Ascensión de Guarayos. Dijo que respetará el derecho a la protesta, pero advirtió que si la medida de presión perjudica a otros ciudadanos instruirá la intervención de la fuerza pública.

Remarcó que la Prefectura busca una solución de estos conflictos, pero los sectores sociales interesados no asistieron a la reunión de la Comisión Agraria Departamental (CAD), convocada para el jueves pasado, y consideró que detrás de este hecho hay motivaciones “políticas”.

Los restos del policía del Batallón de Seguridad Física, Julio Cabrera Calderón, de 38 años, víctima del conflicto de Guarayos, fueron enterrados ayer por sus familiares y camaradas. Según el comandante de esta unidad, Wilfredo Torrico, la familia del policía recibirá una indemnización de 3 mil dólares.