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Chaparral (Tolima), Colombia: protesta indígena ante Fiscalía por captura de comunario
Indígenas que permanecen a las afueras de la Fiscalía en Chaparral, amenazaron con tomarse en las próximas horas de manera permanente las oficinas del organismo investigador. Exigen libertad ante detención arbitraria de Fernando Martínez, el indígena de 21 años capturado por una patrulla del ejército el pasado 26 de agosto, cuando se dirigía a su vivienda luego de participar en la minga que concluyó en la capital del Tolima.
Quince días completan las protestas pacíficas adelantadas por miembros de las comunidades indígenas Pijao y Paez frente a las instalaciones de la fiscalía de Chaparral, como exigencia a la liberación de Fernando Martínez, un joven de 21 años, capturado por tropas del Batallón Caicedo en el corregimiento de El Limón el pasado 26 de agosto cuando se disponía a regresar a su vivienda, luego de participar en la minga indígena y popular que concluyó en la capital del Tolima.
Aunque inicialmente las autoridades aseguraron que en un término no mayor a 24 horas Martínez quedaría de nuevo en libertad, lo cierto es que hasta hoy el indígena no ha podido regresar a la calle ya que el proceso que se le adelanta por el delito de rebelión reposa en este momento en el Consejo Superior de la Judicatura, organismo que deberá decidir su situación jurídica.
Ante la gravedad de estos hechos que el propio Isaías Noscué, gobernador del resguardo Nasaquigüe de Las Mercedes, califica como arbitrarios, los líderes indígenas plantearon la situación al propio presidente de la república, Alvaro Uribe Vélez, durante la Asamblea General del fin de semana, a lo que el mandatario de los colombianos respondió ordenando al ministerio encargado del tema apersonarse cuanto antes del caso.
Hasta la tarde de ayer la carencia de respuestas contundentes de parte de las autoridades, llevó a que las comunidades al frente de las protestas lanzaran un ultimátum en la medida en que si no se produce la liberación de Fernando Martínez en las próximas horas, estarían dispuestos a bloquear permanentemente la puerta de acceso a la sede de la Fiscalía en Chaparral impidiendo el ingreso o la salida de cualquiera de los funcionarios o personas que permanezcan en su interior o que deseen acceder a ella.
En total entre 60 y 100 personas aguardan por una respuesta positiva, que ponga fin a los días de prisión de este joven por quien el gobernador Noscué, lidera una férrea defensa, al considerar que en ningún momento este ha estado vinculado con grupos alzados en armas.
A su vez el líder étnico aseveró que en las tres ocasiones que ha tenido la oportunidad de dialogar con Martínez, el indígena ha insistido en sus acusaciones contra un capitán y un teniente quienes al parecer le estarían amenazando de muerte presionándolo para que se declarase como miembro activo de la subversión.
A lo anterior hay que agregar que una vez se conoció de la detención, la fuerza pública sustentó dicha actuación en una aparente orden de captura que las poblaciones étnicas desmienten.
“Para nosotros, esta detención es arbitraria. Fernando Martínez sí pertenece a la guardia indígena, pero no a grupos ilegales, como se le acusa.
