Sorprendente resultado electoral palestino: Cae Al Fatah y la población elige a la guerrilla Hamas

26.Ene.06    Análisis y Noticias

El primer ministro palestino, Ahmed Qurea, y su Gobierno en pleno presentaron hoy jueves su dimisión al presidente Mahmud Abás, poco después de que Al Fatah reconociera la victoria de Hamas en las elecciones legislativas celebradas ayer en Cisjordania, Gaza y Jerusalén oriental.

Hamás ha ganado “al menos 70 de los 132 escaños” del Parlamento palestino, reconoció en declaraciones a EFE Abdelsalam abú Askar, asesor de Mohamed Dahlán, ex ministro palestino de Asuntos Civiles y uno de los máximos dirigentes de Al Fatah.

Los líderes de Hamás, Ismail Haniye y Mahmud A-Zahar, han asegurado hoy que la victoria de su partido en los comicios tendrá consecuencias internacionales sin precedentes para el proceso de paz.

“Nuestra victoria es una lección a la comunidad internacional, y cambiará la actitud de Israel, los países árabes y Occidente hacia el conflicto palestino israelí”, según Haniye y A-Zahar.

La Comisión Central de Elecciones (CCE) ha retrasado la primera emisión de resultados oficiales de las elecciones, en un principio prevista para anoche a las 22.30 hora local (20.30 GMT), hasta esta tarde a las 19.00 hora local (17.00 GMT), para verificar que no se ha cometido ningún fraude.

Mientras tanto, Qurea se ha reunido con el presidente Abás en la sede de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) en Ramala, capital administrativa de la Autonomía Palestina.

También, altos mandos israelíes se han reunido esta mañana con el ministro de Defensa, Shaul Mofaz, para estudiar las consecuencias de la aparente victoria de Hamás.

Fuentes del Ministerio de Defensa dijeron que evaluarán las primeras consecuencias de la victoria de los islamistas, en tanto que el Gobierno israelí debe reunirse esta noche para estudiar los asuntos políticos.

El veterano político israelí Simón Peres, que viaja hoy a Ammán para entrevistarse con el rey jordano Abdalá II, dijo que si Hamas ganó las elecciones será un problema para el Gobierno de Abás, dependiente de la ayuda económica de la Unión Europea y de EEUU, para quienes ese movimiento es una organización terrorista.

En las filas de Hamas, el portavoz del movimiento islámico en la franja de Gaza, Mushir al Maseri, dijo que EFE que no espera que los resultados oficiales finales sean muy diferentes y expresó la intención de su movimiento de formar un Gobierno de unidad nacional aunque haya obtenido mayoría.

El quinto en la lista del movimiento integrista, Yaser Mansur, por la ciudad de Naplusa, afirmó que su movimiento ha ganado la mayoría de los escaños en los principales distritos electorales palestinos.

En Naplusa Hamás se adjudica cinco de los seis diputados, en Hebrón los nueve de la circunscripción, en Ramala cuatro de cinco, en Jenín dos de cuatro, en Tulkarem, Salfit y Tubas todos y en Kalkilia ninguno, según Mansur.

En las filas de Al Fatah, Abú Askar expresó su descontento al indicar que “Hamás no tiene un programa político” y aseguró que “dentro de un año se volverán a celebrar elecciones” debido a la situación insostenible que se avecina.

“Pronto se enterarán los palestinos a quién han elegido. No sé quién pagará sus salarios”, añadió Abú Askar.

Un activista de Al Fatah en la localidad de Beit Hanún, en la franja de Gaza, Ziyad Hamad, de 30 años, expresó su rabia mientras manifestaba que “es inconcebible” que el movimiento que comenzó la lucha por la liberación de Palestina, haya sido derrotado”.

En el exterior, una de las primeras reacciones fue la de sus congéneres en Egipto, los Hermanos Musulmanes, el mayor grupo de oposición en ese país.

Mohamed Habib, segundo del movimiento y portavoz del mismo, dijo a EFE que la victoria de Hamas es “un golpe a Israel y a EEUU” y además una elección del pueblo palestino por “seguir con la resistencia” contra Israel.

Los resultados “reflejan el rechazo de los votantes palestinos a la flagrante injerencia de agentes externos a las elecciones en favor de ciertos grupos”, dijo Habib, en referencia al apoyo más o menos velado que el movimiento oficialista Al Fatah ha obtenido desde EEUU, Europa, Israel y los gobiernos árabes.

Estupor y tristeza en Al Fatah se suman a temor por teocracia del Hamas

La derrota que le propinó Hamas a los representantes de Al Fatah en las elecciones parlamentarias causa estupor y desesperación hoy, jueves, entre sus militantes de Gaza, donde los integristas islámicos conquistaron la mayoría de escaños.

Las informaciones de distintas fuentes acerca de la victoria de los integristas -aún extraoficiales-, tomaron por sorpresa a miles de activistas y simpatizantes de Al Fatah, que anoche, al concluir los comicios, festejaban convencidos del triunfo.

El primer ministro de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Ahmed Qurea, veterano dirigente de Al Fatah, dimitió antes de conocerse los resultados oficiales. Por ley, el presidente Mahmud Abás debe ofrecer a Hamas la formación del próximo Gobierno

“La victoria de Hamas tendrá grandes consecuencias”, declaró el máximo dirigente político de Hamas, Mahmud A-Zahar.

“Representantes de nuestra organización se incorporarán a la ANP y combatirán desde adentro contra la corrupción”, agregó durante su interlocución con los periodistas.

También dijo que “continuará la lucha armada y la victoria hará que Israel haga concesiones (en los territorios ocupados) a los palestinos. Asimismo, añadió, la victoria de Hamas cambiará la actitud de Egipto y Jordania en el conflicto con Israel, con el cual suscribieron tratados de paz en 1979 y 1994, respectivamente.

A-Zahar, víctima hace dos años de un ataque de la aviación israelí, una operación de las llamadas “asesinatos selectivos” de la que salió herido, llamó a todas las facciones palestinas a sumarse al programa político de Hamas. La victoria electoral, afirmó, “ha sido un golpe para Estados Unidos e Israel”.

El primer ministro en funciones de Israel, Ehud Olmert, se reunirá esta noche con varios ministros de Estado para analizar las consecuencias del triunfo atribuido a los candidatos islámicos, cuyo carta constitucional incluye la destrucción del Estado hebreo.

El triunfo de Hamas, de hecho, puso fin al monopolio de Al Fatah en la calle palestina. Algunos observadores palestinos consideran que muchos votaron por los integristas para castigar la corrupción y el caos reinante en las calles de Gaza y de ciudades cisjordanas.

“Al Fatah ha cometido muchos errores en los últimos años y debiera de aprender de ellos”, según Husein Zaanín, de 45 años. Un votante tradicional de Al Fatah, Zeyad Hamad, que esta vez apoyó a Hamás, llamó a un “gobierno de unidad nacional”.

Al Fatah, el principal partido de la coalición de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), durante décadas encabezado por Yaser Arafat, y desde su fallecimiento por Mahmud Abás, venía conduciendo desde hace cuarenta años los destinos del pueblo palestino y los esfuerzos diplomáticos para recuperar los territorios ocupados por Israel en la guerra de 1967.

Hamas acusaba a Al Fatah en la campaña electoral de “no haber hecho nada” por la causa de su pueblo, sin embargo, Arafat, al refrendar los históricos acuerdos de Oslo (1993), consiguió regresar con miles de guerrilleros en el exilio a suelo palestino, estableció la ANP, y acordó con Israel la autonomía en Gaza y zonas de Cisjordania con la intención de lograr un Estado independiente.

El Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamas, fervor), que habría ganado 77 de los 132 escaños del Parlamento palestino, según su portavoz, Mushir al Masri, fue fundado por el jeque Ahmed Yasín en 1987, tras el estallido de la primera “Intifada” contra la ocupación, en Gaza, donde lo asesinó la Fuerza Aérea israelí en 2004.

Un destacado dirigente de Al Fatah de Ramala llamó hoy al cabeza de la lista electoral de Hamas, Ismail Haniye, para felicitarlo por el triunfo.

Sin embargo, los activistas de Al Fatah no disimulaban su frustración y tristeza, y algunos no ocultaban el temor de que Hamas imponga una teocracia islámica en Palestina.

“Esta ha sido una traición del pueblo palestino a Al Fatah”, se lamentaba Ahmed abú Husein.

Por su lado, Salah Oudeh, de 32 años, del pueblo norteño de Beit Hanún, que votó por Hamas, dijo esperar que la victoria islámica “no haga olvidar al pueblo ni sus sufrimiento cuando sus representantes en el Parlamento se sienten en la Cámara”.