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La educación chilena se caracteriza por una pirámide que, cifras más, cifras menos, se puede mostrar así:
De 1000 niños y niñas de 5 años, sólo 800 entran a la educación básica.
De ellos terminan alrededor de 600 y entran a la media unos 500.
Terminan unos 300, ingresando a educación técnica unos 100 y a la universidad otros 100.
En la universidad van a terminar alrededor de 40 y se titulan unos 20, de los cuales menos de 10 van a ocupar su título y el resto va a trabajar en un call center, o como meseros u otras actividades. Chile tiene una enorme tasa de “cesantes ilustrados”, es decir graduados universitarios que no encuentran trabajo. Veamos la pirámide de la siguiente manera:
10 trabajan titulados
20 obtienen título universitario
40 terminan estudios de universidad
100 que habían ingresado a la universidad
300 se habían graduado en la educación media
500 son los que habían ingresado a la educación media
600 niños y niñas que habían terminado la educación básica
800 niños y niñas son los que habían ingresado a la educación básica
1000 niños y niñas que hemos considerado para demostrar esta pirámide
¿Por eso estamos luchando?
Apoyamos las exigencias elaboradas y sintetizadas por la Confech, sin embargo junto a ello es viable levantar de forma autónoma alternativas pedagógica que aseguren mecanismos de sobrevivencia para los 990 jóvenes de cada mil que quedan fuera, evitando así que caigan en las redes del narcotráfico, choreo, pirateo, “alunizajes”, prostitución, mercado negro, estafas y tantas propuestas llamadas “ilícitas” que parecen demostrar la iniciativa y “chispa” del rebusque, cuando sólo contribuyen a tapar las deficiencias intrínsecas de la economía y del estado. Al mismo tiempo esas alternativas pedagógicas por abajo deben permitir la incorporación de adultos a las actividades para salir del encierro de las casas y contribuir al encuentro que pueda, mediante diversas acciones transformadoras, modificar el contexto relacional del barrio o localidad.
Por eso el nuevo Taller de la Universidad Libre de “Alternativas por Abajo a la Educación Oficial” propende a la formación de espacios pedagógicos que combinan la recreación, la construcción y el aprendizaje, mediante actividades prácticas de participación vecinal que al mismo tiempo son espacios de empoderamiento y autonomía de desarrollo de la potencia y creatividad de los vecinos, cohibidos y acostumbrados a que todo llegue desde arriba dejando sus capacidades adormecidas. Se trata de armar las bases de otra economía que permita la subsistencia de familias desprendiéndose poco a poco de los lazos materiales e ideológicos del estado y del mercado. No se trata de “sustituir” la educación escolar, sino de dos vertientes, la primera es un complemento para quienes estudian, y la segunda es un instrumento de preparación y aprendizaje para quienes han tenido que abandonar los estudios y están “trabajando”, por eso de desarrolla los fines de semana, siendo además un apoyo a las familias en términos de recreación y cultura de los menores.
Son seis sesiones de sábado o domingo, según las posibilidades de los participantes, en el horario de 12:00 a 16:00h. en un proceso que parte desde metodologías de invitación a los vecinos, haciendo una práctica casa a casa, pasando por actividades con niños y niñas, para ir avanzando hacia emprendimientos productivos, de salud, comunicación barrial, etc. Uniendo cada actividad con la continuidad del siguiente fin de semana. La primera sesión informa y aclara esta secuencia. Las sesiones son gratuitas, solicitándose solamente una colaboración voluntaria y algo para el almuerzo común.
Para los interesados en participar los sábados, el inicio del taller es el día 27 de agosto, y para los interesados en hacer el taller los domingos, comenzamos el día 28 del mismo mes.
Inscripciones e informaciones en unlibre@gmail.com
Un saludo fraterno
Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)
Coordinador ULibre