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Muy bien le ha hecho a la Confech el nuevo aire traído por las federaciones estudiantiles que dependen de sus bases y no de los partidos, habiendo dejado para la alianza neoliberal de la Concertación y el partido comunista solamente 9 federaciones de 34 y uno, el de Talca, bastante errático y criticón, que acusa a la mayoría de ser de la ultraizquierda, que podrán serlo, pero han aportado el gran mérito de consultar permanentemente a las bases, inaugurando una nueva práctica estudiantil de democracia directa que es la que realmente ha sostenido al movimiento. Anteriormente el movimiento no había podido crecer por la camisa de fuerza de las direcciones partidarias, que priorizaban por sus intereses y los acuerdos con el bloque del gobierno anterior, como fue vendido el movimiento pingüino por el PC, más interesado en el pacto de omisión para las elecciones donde obtuvieron 3 diputados con votos de los partidos neoliberales, que en los derechos de los secundarios. Esta vez en la Confech habrían hecho lo mismo de no mediar el avance sostenido de las corrientes más avanzadas y democráticas en el seno del estudiantado universitario. También entre los secundarios juega un rol muy importante la ACES, que en vez de aceptar la dirección partidaria, ha priorizado por el asambleismo y la aproximación al sector mayoritario de la Confech.
Ello ha llevado que la lucha por las reivindicaciones juveniles, que ha incorporado asuntos de gran interés ciudadano, no sea negociada cediendo posiciones, sino más bien fortaleciendo el movimiento en las calles y ocupaciones de centros de estudio, lo que educa a la ciudadanía sobre el protagonismo social y extiende la crítica a la partidocracia. Por ello rechazaron la negociación con el parlamento, evitando así el empantanamiento de la búsqueda de la satisfacción de sus necesidades en la transferencia del tema hacia los debates y acuerdos partidarios, que era el interés del gobierno. Una vez rechazada esa instancia, no le quedó a Piñera más remedio que aceptar reunirse directamente con los estudiantes y este sábado está programado el primer encuentro en La Moneda, que para las autoridades es el “inicio” del diálogo y para los estudiantes solamente una reunión que prepare las condiciones para dialogar.
La Confech ha decidido no bajar el estado de movilización y está convocando a otra gran actividad para el día 8 de septiembre, con lo que llegan a las conversaciones en plena dinámica, en tanto el gobierno baja puntos en las encuestas y la oposición sufre la misma caída, con lo que queda clara la motivación ciudadana de búsqueda de nuevas metodologías de conducción de los asuntos públicos, que aún no están claras y todos los partidos procuran maquillarse para presentar mejor imagen.
Los pitonisos de la represión han quedado sin empleo, pues está claro que al gobierno y a los empresarios no les conviene el tema de la muerte de un estudiante, corriendo a hacer retirar de las filas policiales a algunos de los involucrados en los luctuosos sucesos de Macul que culminaron con un joven asesinado por un carabinero con metralleta Uzi, lo que obligó a la Corte Suprema a pronunciarse sobre los riesgos de la represión armada y al general Gordon a lamentarse y pedir perdón a la familia del occiso, sin embargo solicitó a la ciudadanía que no se formase una opinión negativa de ese cuerpo represivo odiado en los barrios por los constantes allanamientos, redadas, controles y detenciones, pues ante la crítica generalizada a las instituciones (partidos, gobierno, parlamento, municipios, etc) cunde el temor de que esa opinión se extienda masiva y públicamente hacia la policía militarizada, lo que también está tratando de cuidar el poder Judicial. Si ello llegara a ocurrir, al gobierno no le quedaría otra salida que irse y dejar paso a un comité de salvación nacional que incluiría representantes de los poderes públicos y partidos parlamentarios, lo que Piñera no haría jamás, por lo que debe invertir esfuerzos en que la actividad represiva sea la mínima y la negociación el instrumento preferido, cuestión que es una de las pocas cosas en que la UDI y RN, los partidos del conglomerado gobiernista, están de acuerdo. Ya es suficiente la lluvia de palos y lacrimógenas que están distribuyendo en Calama, Coronel, Wallmapu y otros lugares, exactamente en los mismos momentos en que se reunen diferentes representantes de regiones para elaborar propuestas institucionales de descentralización económica y administrativa del estado y la maxima organización de los empresarios prepara un informe sobre la situación nacional y sus preocupaciones, llegándose a especular que estarían aceptando la propuesta de Longueira de aumentar impuestos a los más ricos.
Está claro que la estabilidad institucional requiere llegar a las elecciones municipales en las mejores condiciones posibles, ya que se trata de un momento de consolidación de la cohesión de población en torno a los fetiches del estado y hasta ahora parecen ir voto a voto los partidos gobiernistas por un lado y la alianza Concertación-Podemos por el otro, por lo que Piñera necesita hacer concesiones que tengan dos características: La primera es que ayuden a mejorar su imagen y la de sus partidos, y la segunda es que disminuya la imagen de la oposición, lo que le favorecería si consigue entablar acuerdos con los estudiantes que no envuelvan a la oposición, que obviamente prefiere el conducto parlamentario y se ha quedado con los crespos hechos y el vestido de novia en el baúl. De esa manera el empresariado estaría contribuyendo con la aceptación de mayores impuestos.
El PC en la Confech está aceptando hasta ahora el predominio de las propuestas de los que también llaman de ultrones, en tanto se le permita seguir contando con la exposición pública de sus figuras mediáticas de Vallejo y Gajardo. De ahí que no es de extrañar que uno de sus sindicatos haya entregado una donación de 10 millones de pesos a la Confech. Para el PC si las cosas se resuelven luego, pretende salir ganancioso capitalizando los resultados obtenidos por la “conducción” de sus figuras y si se dilatan, también, mientras los colegios de profesores a nivel municipal convocan organizaciones y población a prepararse para las elecciones municipales, tirando un cable desde las movilizaciones estudiantiles para inyectar energía y “conducción”, por lo que es necesario que entre los estudiantes de base ese tema sea también considerado, pues de otro modo estarán trabajando para alimentar el pacto de omisión y al final la población quedará sin propuestas de continuidad alternativa, en tanto el gobierno, la Concertación y el PC como ganancia de pescadores, sacan los peces de las aguas revueltas. Por lo tanto hay que desarrollar iniciativas barriales que permitan distanciarse del papel que les quieren otorgar entre todos los partidos e instituciones de sacar las castañas del fuego con la mano del gato estudiantil. Que sean los gatos los que se queden con los peces y las castañas. Y en una bella fogata comunitaria compartir los pescados y las castañas asadas con los vecinos.
Abrazos
Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)
municipiosindependientes@yahoo.cl