¿Por qué nos fuimos del Psuv?
Autor: Leonardo Guevara
Fecha de publicación: 26/06/12
Aporrea
En la década del 1.960, período en el cual la oligarquía y burguesía venezolana y el imperio yanqui se afianzaron con los gobiernos de Rómulo Betancourt y Raúl Leoni, continuaron las contradicciones en el seno del partido político Acción Democrática (AD), desprendiéndose de ese partido político tres tendencias: sectores juveniles radicales con ideología marxista denominado Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), el sector denominado ARS o AD oposición que posteriormente se convirtió en el Partido Revolucionario de Integración Nacional (PRIN), y el sector que conformó el Movimiento Electoral del Pueblo declarado socialista pero no marxista.
El partido AD, que en su origen fue un partido de izquierda bajo la denominación de ARDI Agrupación Revolucionaria de Izquierda (ARDI) fundado en Barranquilla Colombia en 1.931, a partir de 1.941se convirtió en un partido de centro izquierda moderado o derechista, declarándose partido policlasista, reformista no estatista, abrazando a la oligarquía y burguesía venezolana y entregándose a los intereses del imperialismo de USA. En 1960, Ignacio Luis Arcaya, del partido URD (integrante del Pacto de Punto Fijo con AD y COPEI), renunció a la cancillería venezolana por no estar de acuerdo con la solicitud del gobierno de Rómulo Betancourt de expulsar de la OEA a Cuba, y Fabricio Ojeda renunció al Congreso Nacional debido a que el Pacto de Punto Fijo desvió la revolución del 23 de Enero de 1.958, y junto a otros compañeros de URD se incorporó a la lucha armada fundando las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional contra el gobierno adeco sátrapa y cipayo del imperio. Fabricio Ojeda, junto a José Vicente Rangel y Antonio José Herrera fundaron Vanguardia Popular Nacionalista. Después de la derrota electoral de 1.968, AD siguió dividiéndose en cuatro sectores más pero con tendencia derechista, no por razones ideológicas si no por apetencias y ansias de poder.
Con la derrota electoral de AD y COPEI y demás partidos de derecha en 1.998, y el triunfo del comandante Hugo Chávez Frías con el Movimiento Quinta República (MVR), dirigentes no destacados de ambos partidos políticos se sumaron al fenómeno chavista con los mismos vicios de corrupción, nepotismo y con la misma ideología capitalista socialdemócrata y socialcristiana de sus partidos originarios. El partido PSUV surgido del MVR con anexiones de tendencias reformistas y una minoritaria representación de la izquierda marxista se consolida como un partido estrictamente electoral sin estructura ni cuerpo orgánico como los partidos tradicionales de América Latina. Allí prevalece el poli clasismo y la poli ideología, con representación de las diversas clases sociales y con una diversidad de matices ideológicos y corrientes políticas, predominando la tendencia de derecha. De esta forma se repite la historia de AD en cuanto a su composición y praxis política.
Así como en AD y en COPEI predominó una cúpula oportunista, corrupta y anti popular, hoy en el PSUV y en otras organizaciones políticas predomina una cúpula conformada por grupos de poder que se disputan privilegios, practican el nepotismo, frenan, estrangulan y sabotean las investigaciones de las denuncias que se formulan sobre el mal manejo de los recursos del estado, a esto se agrega el rotundo y férreo control partidista que impide la democratización del partido, y se empeña en seguir violando el artículo 67 de la CRBV, negando la posibilidad de hacer elecciones internas para escoger las autoridades del partido y los candidatos a elección popular, aferrándose así a una entelequia leonina y privilegiada mediante el método anti democrático de selección denominado cooptación. Hay complicidad y tolerancia ante el saboteo que se efectúa en todas las instituciones, empresas, y servicios públicos por parte de los “quinta columnas”, amparados por el compañerismo, amiguismo y los nexos de consanguinidad con medianos y altos funcionarios de la administración pública y del PSUV. Los trabajadores y empleados de organismos dependientes de la gobernación son reprimidos, agredidos, despedidos y violados sus derechos laborales, contradiciendo y echando por tierra los principios clasistas del socialismo.
Dentro del PSUV no se respeta el activismo político de las diversas corrientes e ideológicas, persiguiéndose a sus militantes, destruyendo la propaganda y desacreditando e injuriando a sus militantes. No hay espacios para el debate, no hay democracia interna, todo lo deciden 15 personas de la impuesta Dirección Regional, muchos de estos están construyendo verdaderos imperios económicos personales con los recursos del Estado al igual que los directores de organismos del ejecutivo regional y de organismos nacionales que hay en el estado Trujillo, así como la mayoría de los alcaldes y legisladores de la Asamblea Nacional y Consejo Legislativo regional. Se ha comprobado que una corriente o tendencia revolucionaria, marxista, leninista, bolivariana, zamorana o simplemente socialista o inspirada en principios cristianos, no puede coexistir dentro del PSUV ante el aplastante poder económico y político de las cúpulas que controlan el partido.
Estas y múltiples razones derivadas de las desviaciones derechistas dentro del PSUV y de la administración pública son las que nos obligan irrevocablemente a desprendernos de ese partido e incorporarnos a Vanguardia Bicentenaria Republicana por que coincidimos en lo político e ideológico y en lo programático. En la Corriente del Pensamiento Bolivariano y Socialista “Fabricio Ojeda”, nos resistimos a convalidar y aceptar estas desviaciones de derecha adecas y copeyanas, y seguimos el ejemplo de Fabricio Ojeda, ya no con los fusiles si no con las armas de nuestra ideología revolucionaria y decidimos impulsar una RESISTENCIA POPULAR FABRICISTA para redimensionar y profundizar el proceso de reformas hacia una revolución verdadera sin corrupción donde queden eliminados lo privilegios de una minoría partidista que a lo largo de estos doce años se ha convertido en la nueva clase social privilegiada o nueva oligarquía y burguesía venezolana que compite con la oligarquía y burguesía tradicional.
Seguimos respaldando al comandante Hugo Chávez Frías porque es el líder de este proceso al que queremos profundizar, por lo tanto con la posición de Vanguardia Bicentenaria Republicana de postular al comandante Joel Acosta Chirinos no se pretende quitarle votos al presidente, si no todo lo contrario, fortalecerlo, ya que nuestro mensaje está dirigido a las bases populares que por decepción y descontento con los gobernadores y demás funcionarios públicos nacionales y regionales “quinta columnas”, se convierten en abstencionistas, indecisos o por voto castigo se inclinan ingenuamente por la candidatura del oligarca Enrique Radonski.
A esos sectores hay que orientarlos a no cometer ese ingenuo error y convencerlos de que inclinen su preferencia hacia la tarjeta del comandante Acosta Chirinos, con lo cual se consolidará el evidente triunfo del presidente Chávez el 7 de Octubre. Pero esta estrategia va más allá del 7 de Octubre, pues con el apoyo de esa masa de electores recuperada y con el voto de miles de seguidores del proceso bolivariano, participaremos en las elecciones a la gobernación con la tarjeta del partido VBR y demás organizaciones del GPP y conquistar muchas gobernaciones, alcaldías, concejalías y diputaciones para ponerlas al servicio de la construcción del Poder Comunal, el Estado Comunal, es decir el socialismo, esto mediante la selección de los candidatos con un método democrático semejante al establecido en el artículo 67 de la CRBV.
El comandante Chávez contará con nuestro apoyo en las elecciones del 7 de Octubre, pero no con la tarjeta del PSUV, pues mandaremos a votar por otro partido nacional con el cual tengamos coincidencias ideológicas y políticas tendentes a enderezar y profundizar el proceso bolivariano, ya que la cúpula de derecha del PSUV le impidió al presidente aceptar el respaldo de Vanguardia Bicentenaria Republicana a su candidatura. Buscaremos otra alternativa para que miles de trujillanos y trujillanas que no quieren votar por el PSUV, voten por el comandante Chávez con otra tarjeta el 7 de Octubre y ratificarlo como presidente de la República y líder del proceso bolivariano.
MARÍA MENDEZ, ANTONIO BECERRA, ELIO MATHEUS, RAUL ROMAN, JHONNY AGUILAR, RAUL ROMAN, JOSE ARTIGAS, ELIO MATHEUS, ALIRIO GIL Y MARCOS PARRA VOCEROS DE LA CORRIENTE DEL PENSAMIENTO BOLIVARIANO Y SOCIALISTA “FABRICIO OJEDA”. Trujillo, Junio de 2.012.
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