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Un grupo de desempleados del estado Anzoátegui cerró esta mañana la carretera nacional de Oriente para exigir puestos de trabajo en los complejos de Petróleos de Venezuela que se encuentran en la zona.

La acción provocó la movilización de la Guardia Nacional, que utilizó bombas lacrimógenas y perdigones para intentar controlar la revuelta protagonizada por personas que -según reportes de televisoras locales- en su mayoría nunca ha trabajado en la industria petrolera y se mantienen desde el pasado mes de julio protestando en los portones de Pdvsa.

Aunque la manifestación comenzó de manera pacífica, los efectivos de la GN tuvieron que actuar con armas de dispersión para tratar de evitar la tranca de la carretera nacional de Oriente, que actualmente se encuentra parcialmente congestionada.

Hasta los momentos se han registrado unos diez trabajadores heridos. Asimismo, muchas de las personas que transitaban por el lugar, resultaron afectadas por los efectos de las bombas lacrimógenas.