Piden dinisión del gobiernpo
Choques entre simpatizantes del mandatario y opositores dejan al menos cuatro muertos
Millones de egipcios exigen la renuncia del presidente Mursi
El gobernante ofrece “diálogo nacional serio”; la nación podría desintegrarse: El Baradei
Aseguran en el ejército que se trata de las movilizaciones más grandes en la historia del país
Afp, Dpa, Reuters, Xinhua y Pl
Periódico La Jornada
Lunes 1º de julio de 2013, p. 27
El Cairo, 30 de junio.
Cientos de miles de egipcios se congregaron hoy en la plaza Tahrir de El Cairo para demandar la renuncia del presidente Mohamed Mursi, en la protesta más numerosa desde la sublevación contra Hosni Mubarak, a principios de 2011. Durante las manifestaciones, que se extendieron a otras localidades del país, murieron cuatro personas en choques entre partidarios y adversarios del mandatario.
En todo el país fueron millones los que salieron a protestar contra el gobernante, quien ofreció “entablar un diálogo nacional serio”. Una fuente militar señaló que podrían haber sido hasta 14 millones los manifestantes tanto en la capital como en el interior de Egipto, con lo cual, agregó, se trataría de “las protestas más grandes en la historia de este país”.
Impresionantes columnas de opositores al régimen, integradas por unas 500 mil personas, de acuerdo con los medios, ocuparon al caer la noche las principales calles de la capital gritando consignas como “¡Fuera, fuera!” o “¡El pueblo quiere la caída del régimen!”, para concentrarse al final en la plaza Tahrir, símbolo de la movilización que expulsó al presidente Mubarak en 2011, luego de tres décadas en el poder.
Los manifestantes, algunos de los cuales llegaron del interior del país, empezaron a congregarse desde la anoche anterior en diversos puntos de la capital, aunque gradualmente fueron concentrándose en el barrio de Heliópolis, donde se encuentra el palacio presidencial.
También se registraron importantes movilizaciones en Alejandría, Menuf y Mahalla, así como en Suez, Luxor, Port Said y hasta en la ciudad natal de Mursi, Zagazig. Aunque las protestas se realizaron en general de manera pacífica, cuatro personas fallecieron durante enfrentamientos entre opositores y fieles a Mursi, una de ellas en Beni Sueif, en el sur de El Cairo.
En la provincia de Assiut, inviduos que se trasladaban en una motocicleta abrieron fuego contra los manifestantes en las proximidades de la sede local del movimiento de la Hermandad Musulmana y causaron la muerte de tres personas.
Fuentes de seguridad dijeron que en El Cairo y ciudades del delta del Nilo fueron incendiadas tres oficinas de la Hermandad Musulmana, mientras unas 200 personas resultaron lesionadas en distintas localidades.
Las protestas contra Mursi se realizan desde el miércoles en Alejandría y en las provincias del delta del Nilo, que han dejado siete muertos, entre ellas un estadunidense, en choques entre partidarios del presidente y opositores.
La oposición patrocina una campaña para recoger firmas. Según sus datos, ha recabado en semanas recientes 22 millones de rúbricas, unos 9 millones más que los votos obtenidos por Mursi cuando fue elegido presidente, hoy hace un año.
En este escenario, la mayor coalición opositora de Egipto, el Frente de Salvación Nacional (FSN), aseguró que las manifestaciones confirman la caída del régimen de Mursi y de la islamita Hermandad Musulmana. En la declaración revolucionaria número uno llamó a los inconformes a permanecer movilizados y en las calles hasta que caiga el mandatario.
“Todas las fuerzas revolucionarias y todos los ciudadanos deben mantener sus reuniones pacíficas en sus lugares, calles y ciudades del país hasta la caída de todos los elementos del régimen dictatorial”, expresó el FSN.
El ex candidato presidencial y premio Nobel de la Paz Mohamed El Baradei advirtió en un mensaje sobre el peligro de una desintegración del país y reclamó una convocatoria a nuevas elecciones. “Le dimos un permiso de conducir, pero no sabe manejar el coche”, expresó en referencia a Mohamed Mursi.
Unos 200 mil simpatizantes del presidente también se congregaron en esta capital para expresarle su apoyo, al tiempo que continúa un plantón que comenzó el viernes en el barrio Nasr City para defender la “legitimidad” del mandatario.
El Partido de la Libertad y la Justicia, de la Hermandad Musulmana, exhortó a una “movilización general” para defender al jefe de Estado. Essam el Erian, importante político de este movimiento, calificó las protesta de intento de golpe de Estado.
Frente a estos hechos, la presidencia egipcia señaló que el diálogo es la única opción para sacar al país de la actual crisis política. “No hay alternativa para llegar a un entendimiento y a una verdadera reconciliación nacional para borrar la división actual”, aseveró el voceo Ehab Fahmi, quien puntualizó que la presidencia está dispuesta a “entablar un diálogo nacional serio”.