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Un intento de desalojo dejó a un jefe policial herido, así como varios niños y agentes afectados por el gas lacrimógeno en la aldea Buena Vista, puerto de Iztapa, Escuintla.
Al notar la presencia policial, unas 40 familias de la citada comunidad se concentraron en la entrada y colocaron barricadas de llantas y morteros con juegos pirotécnicos, a efecto de no permitir el ingreso de las fuerzas de seguridad.
La jueza Cristina Cáceres y los agentes trataron de suspender el desalojo, pero los representantes legales de la empresa Fame, S. A., parte demandante, solicitaron que se diera cumplimiento a la orden.
Al ingresar, fueron recibidos por los pobladores con piedras y botellas, y salió herido el comisario Efraín Estrada Marroquín.
Luego, la PNC lanzó gas lacrimógeno, por lo que la jueza suspendió la acción.