Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)
El encuentro y actividades democráticas de la población de una localidad, un barrio, etc, puede manifestarse de varias formas según la creatividad e iniciativa de la propia población autoorganizada y aquí ponemos algunos ejemplos:
Estudios y discusiones: Básicamente la crítica de la actual prehistoria de la democracia, la crisis de la modernidad y las consecuencias negativas del neoliberalismo y la globalización, el conocimiento y estudio de las experiencias de una nueva democracia en otros lugares y la realidad local, incluyendo allí la población, el territorio, los problemas y las necesidades.
Autogobierno local: Las experiencias que hemos estado anotando en textos anteriores muestran que es posible que la población de una localidad o determinado territorio participe directamente en la elaboración de propuestas y toma de decisiones sobre los asuntos de todos.
Autogestión productiva: Se trata de producir alimentos, materiales de construcción y otros rubros de interés para la población local a partir de la autoorganización comunitaria, de posesión, uso y disfrute de los instrumentos productivos y de los bienes por parte del conjunto del colectivo local.
Autogestión de servicios: Áreas como educación, salud, etc. pueden realizarse partiendo del diagnóstico de las necesidades concretas de la población, los recursos naturales y materiales disponibles en la localidad, la distribución de funciones entre los miembros de la comunidad y la cooperación de personas especializadas en esas áreas.
Comedores populares: La población local puede reunir, preparar y consumir en conjunto los alimentos, aunque inicialmente sea para los menores, desempleados o una vez en el día. La cooperación de ha demostrado como un mecanismo eficaz para la sobrevivencia de comunidades y para estrechar los lazos de solidaridad.
Actividades para niños y niñas: Está comprobado que la convivencia constante entre los menores contribuye notablemente para el desarrollo de una personalidad afectiva y respetuosa, un mayor equilibrio y estabilidad emocional. Los miembros de la localidad pueden cumplir de forma rotativa las funciones de monitores o responsables de la actividad, siendo lo ideal que todos los jóvenes y adultos lo hagan cada cierto tiempo. Allí se combina la actividad recreativa con la formación de valores y contenidos culturales, evitando el sistema clásico de una vez a clases y otra vez al patio. Ello permite aliviar fuertemente la carga de las madres que pueden así dedicar más tiempo y energías a la creatividad, la producción autogestiva, la participación social y la cooperación comunitaria.
Actividades culturales: Es saludable desplazar la cultura y arte espectáculos, donde unos muestran y otros observan, para sunstituirlo por el canto, el baile, la pintura, etc. de todos, en los más disímiles momentos y circunstancias para permitir la aproximación entre la actividad cotidiana, la actividad productiva, la actividad social y la creación artística.
Comunicaciones: El uso de radios comunitarias, diarios murales y boletines, trabajados rotativamente por la población evitando ‘especialidades’, permite no sólo estar informados de lo que sucede en otros lugares, sino acrecentar los lazos de intercambio interno y neutralizar la nefasta influencia de los medios comerciales. Es bueno establecer vínculos con personas que tengan medios materiales para auxiliar esta actividad, como máquinas fotográficas, filmadoras, computadoras, internet, celulares, etc. para ampliar los intercambios horizontales con otras experiencias similares y con el resto de la población en general para que conozca los avances de la democracia directa.
Solidaridad con los presos: Las cárceles están llenas de miembros de las comunidades y barrios, que no dejan de serlo por eso. No puede ser que sólo los familiares se preocupen de su atención, sino que deben ser temas para todos la visita, el apoyo y la cooperación con medios que se destinen a cubrir las necesidades de los presos. Ello también contribuye a neutralizar las desviaciones morales (ausencia de solidaridad, egoismo, falta de respeto, etc) que algunos presos pueden desarrollar debido a ingerencias perniciosas.
Reglas de derecho y justicia local: La comunidad puede desarrollar sus propios sistemas normativos y de sanciones sociales o morales a los que manifiesten un comportamiento que signifique un daño social o personal. Como ejemplo, algunas comunidades en Ecuador castigan en público con golpes de manojos de ortiga a los que violan los principios de la colectividad. Todos los sistemas jurídicos estatales respetan o deben respetar los usos y costumbres locales, por lo que perfectamente esos usos y costumbres pueden ser elaborados y modificados por la propia población autoorganizada democraticamente en cada localidad.
Pensamos que con estos ejemplos algo conseguimos mostrar el abanico de posibilidades que se abren a la población cuando asume su vida y su destino en sus propias manos en una localidad, sin esperar más por las promesas que nunca se cumplen o sólo se realizan para una mínima parte de la sociedad.
Seguiremos con el tema.
Jaime Yovanovic Prieto (Profesor J)