Imprimir
Bajo una pertinaz llovizna y en demanda de respeto para la autonomía de la Caja de Seguro Social (CSS), miles de personas marcharon en la tarde de ayer hacia la Plaza 5 de Mayo, donde el director removido de esa entidad, Juan Jované, hizo –lo que él llamó– un “referéndum de carne y hueso”.
Obreros de la construcción, sindicalistas, empleados públicos, educadores, estudiantes, enfermeras, auxiliares, jubilados, activistas de derechos humanos y políticos de oposición vociferaron consignas contra el gobierno de la presidenta, Mireya Moscoso, y sus supuestas intenciones de privatizar la Caja de Seguro Social. “Ríe, llora; a la Yeya le llegó su hora”, “Apaga la luz y enciende la vela, a este gobierno le damos candela” y “Panameño ponte duro, que te quedas sin Seguro”, fueron las consignas más entonadas.
Por el contrario, los manifestantes vitoreaban al removido director con consignas como “Jované, amigo; el pueblo está contigo”.
La manifestación, que salió del Parque Porras, en la Avenida Perú, a las 4:00 de la tarde, recorrió la vía comercial de Calidonia hasta los predios de la Plaza 5 de Mayo. La incesante llovizna obligó a muchos manifestantes a comprar paraguas en los almacenes ubicados en el tramo recorrido.
Al terminar la caminata, un grupo de obreros de la construcción subió a Jované a una plataforma ubicada frente a la plaza, desde donde dirigió un breve discurso a los manifestantes.
“Vamos a hacer aquí lo que a algunos les gusta decir: un referéndum de carne y hueso”, anunció el funcionario removido, en directa alusión a la conocida consigna política de Moscoso, quien –en campaña proselitista– siempre habló de sus “encuestas de carne y hueso”.
Inmediatamente después, Jované pidió que quienes rechazaban el aumento a la edad de jubilación de las mujeres y el incremento, a 30 años, del periodo mínimo de cotizaciones para poder pensionarse dijeran “no”. Como se esperaba, un fuerte no retumbó en la plaza.
Luego, pidió que levantaran la mano quienes estaban de acuerdo con la autonomía de la CSS y con “pararle la mano a los evasores, a los morosos” y a aquellos que abusaron de esa institución. Los manifestantes también asintieron.
La marcha transcurrió sin que se registraran hechos de violencia. Al respecto, Jované advirtió que los manifestantes que apoyan la autonomía de la Caja son pacíficos, pero no cobardes. Por otro lado, también dijo que debía dejar una reflexión a los manifestantes, que era la necesidad de que se respeten dos derechos básicos, a la alimentación y a la educación plena y gratuita.
Asimismo repudió que se encarcele a personas por expresar sus ideas, en referencia a la detención del secretario de defensa del Sindicato Unico de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS), Saúl Méndez.
Por su parte, el viceministro de Gobierno y Justicia, Alejandro Pérez, dijo que el Gobierno acepta todas las críticas que se hagan, siempre y cuando sean de forma pacífica. Es positivo que la marcha se haya dado sin violencia, señaló Pérez.