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Tarija | Nuevo Sur.- El Movimiento Sin Tierra (MST) alista las movilizaciones y estrategias para la ocupación de tierras desde mañana, a pesar de haber recibido una carta del ministro de Desarrollo Sostenible, Erick Reyes Villa, quien los invitaba a dialogar. La misma fue considerada como una reacción tardía.
El cansancio en la espera del cumplimiento de sus demandas fue el detonante que abrió la posibilidad de mas movilizaciones en el país.
El dirigente del MST, Ángel Duran, dijo que el Gobierno los llamó a un diálogo pero consideró que en la actual lucha que desarrolla el sector campesino es difícil adoptar una posición unilateral que implique sostener un encuentro con las autoridades.
Por ello, Durán acusó al Gobierno de ser el impulsor de acciones que tienden a hundir el país, al señalar que los gobernantes no fueron capaces de dar soluciones con resultados concretos a los planteamientos que tienen los diferentes sectores que componen Bolivia, entre los que se encuentran las demandas del MST.
Falta de voluntad
Asimismo, el dirigente cree que hubo falta de voluntad en las autoridades, ya que recién cuando faltaban dos días para las movilizaciones les enviaron una carta para solucionar el problema “cuando en realidad se nos podría haber convocado en la anterior semana”, dijo.
Para Durán no sirvieron de nada los encuentros y firmas de convenios que realizaron con el Gobierno, ya que desde el pasado octubre de 2002 hasta junio de 2003 acordaron tres actas sin que hasta el momento se evidencien avances en la titulación de tierras.
Duran aseguró que no quisieran ingresar en este tipo de luchas porque saben que se perjudican pero también considera que es necesaria la movilización para que se cumplan las demandas. Además, saben que puede ocurrir más hechos de muerte como en Pananti o Huarisata, pero aseguran que están decididos a emprender la lucha.
De todas maneras -según Durán- pidieron públicamente al Gobierno nacional que antes de optar por la salida de las fuerzas armadas, piensen en los efectos que podrían ocasionar por las reacciones de las comunidades campesinas y replieguen las unidades militares y policiales para en un clima distensionado recién dialogar con respecto a cada una de los problemas que enfrentan en el país.
En cuanto a la posibilidad de enfrentamientos con los ganaderos de la provincia Gran Chaco, cuando ocupen tierras, dijo que si tienen que responder con armas “los campesinos se enfrentarán con las herramientas de trabajo”, finalizó.