El cambio de paradigma del movimiento kurdo después de nuestra reflexión sobre la derrota del “socialismo real” ha conducido a varios nuevos conceptos como comunalismo, confederalismo democrático y autonomía democrática
12-05-2015
Entrevista con Meral Cicek
“El movimiento kurdo de liberación puede ser un ejemplo para otras luchas en la región”
Florian Wilde
Junge Welt
Traducido por Miguel Sanz Alcántara
¿Qué papel juega el Foro Social Mundial (FSM) de 2015 para la izquierda kurda?
La cuestión social y el modelo de sociedad que queremos han adquirido un significado creciente para el movimiento de liberación kurdo en los últimos años. El FSM nos abre la posibilidad de intercambiar opiniones con gente de izquierdas, socialistas, feministas y movimientos sociales de todo el Mundo. Nos permite presentar nuestra propia lucha y recabar impresiones de otras luchas. Por eso es un lugar muy importante para nosotras y estamos aportando toda una serie de eventos al programa.
La “primavera árabe” se ha convertido en muchos lugares en el “invierno árabe”. El único ejemplo en la región donde se ven atisbos de una nueva sociedad alternativa son los territorios autónomos de Rojava en el norte de Siria, donde viven mayoritariamente kurdos. ¿Se está reflejando esta experiencia en la izquierda árabe?
Esto está ya ocurriendo, si bien no tanto como desearíamos. Mi impresión es que la izquierda árabe está aun muy aprisionada en los conceptos del siglo XX, el nacionalismo y la fijación por el Estado. Aquí la discusión sobre conceptos y estrategias del confederalismo democrático (desarrollado por Abdullah Öcalan y puesto ahora en práctica por el movimiento kurdo) podría abrir nuevas perspectivas. Pero también nosotros, como izquierda kurda, deberíamos esforzarnos porque este intercambio se produzca.
Usted es la Presidenta del Centro Kurdo para los Asuntos de la Mujer en Erbil. ¿Tienen como objetivo trabajar sólo en Kurdistan o buscan también el intercambio de experiencias en toda la región?
Somos una organización joven, fundada hace un año. En primer lugar intentamos fortalecer las relaciones entre las organizaciones de mujeres situadas en cada una de las cuatro partes en que está dividido Kurdistán y, dentro de nuestra diversidad, establecer unas bases sólidas para el trabajo en común. Somos parte de la construcción de un frente unido de las mujeres de Kurdistán, en este momento también como reacción a la ofensiva del Estado Islámico. Debemos defender nuestra dignidad, nuestro pueblo, nuestro género, nuestros valores. En segundo lugar intentamos también transmitir la experiencia de nuestro movimiento de liberación de la mujer más allá de Kurdistan, en Oriente Medio.
Durante mucho tiempo Europa estuvo en el foco del trabajo exterior kurdo. Hoy Oriente Medio está adquiriendo un rol central para nosotros. El modelo del confederalismo democrático, el que nosotros ahora mismo estamos construyendo en Rojava y que se fundamenta en la autogestión, la ecología y la liberación de la mujer, puede ser un ejemplo para otras luchas en la región. Hemos visto en la “primavera árabe” que los pueblos estaban insuficientemente preparados para un proceso así. Para la siguiente oleada de cambios debemos estar mejor equipados.
¿Es verdad que en la izquierda kurda el socialismo como fin y como método está en retroceso en favor de otros planteamientos?
Yo no creo que nos hayamos salido de los planteamientos socialistas. La izquierda del movimiento kurdo de liberación ha estado siempre muy marcada por el socialismo y hoy sigue estándolo. Intentamos, sin embargo, seguir desarrollando teóricamente la idea de socialismo y conectar las diferentes luchas de Oriente Medio con una perspectiva socialista. El cambio de paradigma del movimiento kurdo después de nuestra reflexión sobre la derrota del “socialismo real” ha conducido a varios nuevos conceptos como comunalismo, confederalismo democrático y autonomía democrática. En el fondo nos estamos refiriendo a una forma de socialismo democrático en el siglo XXI.
Fuente: https://www.jungewelt.de/2015/03-28/037.php?sstr=meral