Esta noticia se suma como por casualidad a la oleada de inventos y manipulaciones tecnológicas que está inundando las páginas noticiosas del mundo en los momentos que se viven de destrucción del planeta, lo que sirve para justificar en la misma medida que “hacemos consciencia” de nuestra insignificancia, lo que aprovechan los religiosos, políticos y empresarios para banalizar las dinámicas “pequeñas” de localidades cambiando el mundo desde los corazones y el estrechamiento de relaciones entre vecinos. Intentan apabullarnos y llevarnos a que las soluciones están en los dioses y en la tecnología, justamente lo opuesto a la vida, que queda sólo como objeto de “creación” o de manipulación tecnológica dependiente del poder y del dinero. En ese contexto no es extraño que surjan dudas sobre
la muerte de Tompkins y que Hawkings toque los pitos.
Radiotelescopio chileno Alma descubre nido de “galaxias monstruosas”
Ubicadas a 11.500 millones de años luz, el hallazgo permite comprender cómo las galaxias se forman y evolucionan hasta convertirse en enormes galaxias elípticas.
AFP
11 de diciembre del 2015 / 08:59 Hrs
Gracias al potente radiotelescopio Alma, en el norte de Chile, científicos descubrieron un joven nido de “galaxias monstruosas” a 11.500 millones de años luz que ayudaría a comprender cómo se forman las galaxias, indicó un comunicado del observatorio.
El equipo de astrónomos captó este nido de galaxias “justo en la intersección de filamentos gigantes que forman una red de materia oscura”, avalando la teoría según la cual estas galaxias se forman en áreas donde hay grandes concentraciones de materia oscura.
“Estos hallazgos son importantes para comprender cómo las galaxias se forman y evolucionan hasta convertirse en enormes galaxias elípticas”, explicó Alma en un comunicado.
Hace 10.000 millones de años, mucho antes de que se formaran el Sol y la Tierra, había zonas del Universo habitadas por galaxias monstruosas que forjaban estrellas a un ritmo cientos de miles de veces superior al que se observa hoy en la Vía Láctea, se explica en el texto.
Los astrónomos “creen que estas jóvenes galaxias maduraron hasta formar las galaxias elípticas gigantes que se observan actualmente”.
La dificultad para descubrir este tipo de galaxias radicaba hasta hoy en el hecho de que estaban rodeadas de polvo cósmico. Sin embargo, la potencia de Alma, con una sensibilidad 10 veces superior y una resolución 60 veces mejor que el resto de los radiotelescopios del mundo, permitió el hallazgo.
El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA, por su sigla en inglés), está conformado por 66 antenas emplazadas en el Llano Chajnantor, en el norte de Chile, a más de 5.000 metros de altura.
El observatorio es una asociación entre el Observatorio Europeo Austral (ESO), la Fundación Nacional de Ciencia de Estados Unidos y los Institutos Nacionales de Ciencias Naturales de Japón, en cooperación con la República de Chile.