Las empresas, los políticos y los estados, así como la Nasa y el Pentágono, comenzaron a contratar psicólogos, diseñadores, marqueteros y expertos en “comunicación” como locos para investigar y aplicar esos eficientes y efectivos métodos de manipulación con la idea de inducir el consumo y promover comportamientos, valores y prioridades convenientes y necesarios para sus fines.
Usos de la lógica psicológica para manipulación
Por Jaime Yovanovic (Profesor J)
Coordinador Universidad Libre.
https://www.facebook.com/groups/ULibreLaDesuniversidad
Las películas son formadas por cuadros sucesivos que pasan a una velocidad que no alcanza a procesar, conocer, evaluar y seleccionar la mente, pero que lo mismo son recepcionados de forma no consciente por la psique. O sea, entran igual, lo que quedó demostrado en el famoso experimento que se hizo de retirar un cuadro y poner en su lugar una propaganda, que obviamente no fue “vista” por el sistema que va del ojo y nervios al cerebro, pero fue capturada por el subconsciente, ya que se trata de un mensaje o señal diseñada para pasar por debajo (sub) de los límites (liminal) normales de percepción, por lo que se le llama subliminal.
En el cine en que se hizo la prueba, cada vez que se insertaba el cuadro invasivo, aumentaba en el intermedio y a la salida (en el salón de venta del hall de entrada) el consumo del producto, y cuando se retiraba el susodicho cuadrito, disminuía en la misma proporción. Aplicando la lógica experimental, la conclusión fue obvia, ya que los sujetos receptores del mensaje, sin proponérselo, tenían más sed o simplemente la aparición del deseo inducido por el mecanismo de pasar por encima de la voluntad del conejillo humano de laboratorio.
Finalmente se hicieron leyes contra ese mecanismo manipulador tan grosero, que la empresa de cigarrillos Camel evadió con el simple expediente de dibujar un pene erecto en los pliegues del muslo del camello, que no se veía racionalmente, pero que igual era captado subliminalmente por la psique construida en la reproducción fálica del patriarcado. El descubrimiento del artilugio llevó a un proceso judicial que obligó a la empresa a retirar el dibujo.
Sin embargo las empresas, los políticos y los estados, así como la Nasa y el Pentágono, comenzaron a contratar psicólogos, diseñadores, marqueteros y expertos en “comunicación” como locos para investigar y aplicar esos eficientes y efectivos métodos de manipulación con la idea de inducir el consumo y promover comportamientos, valores y prioridades convenientes y necesarios para sus fines.
Ya Pavlov había estudiado el efecto campanilla en perros a los que generaba el llamado “reflejo condicionado”, tocando la campanilla cada vez que le daba de comer al ejemplar escogido, lo que fijó en él el efecto de babar cada vez que la tocaban, aún sin ver ni oler la comida. Se llama entonces reflejo condicionado cuando la respuesta del organismo ante determinados estímulos o excitantes, es producida la misma mediante la creación, reiteración y sustitución de los estímulos naturales por otros. Como ejemplos tenemos la domesticación de animales y de plantas, para qué hablar de los efectos que ello ha tenido en el comportamiento subordinado al poder y la microfísica del poder, especialmente si atendemos a los avances en los estudios del biopoder y la biopolítica.
Otro ejemplo es la hipnosis involuntaria y reiterada que hacen algunas iglesias que hacer creer que los demonios han poseido el cuerpo cuando se trata de un despertar incompleto de la hipnosis colectiva en que algunos no recuperan de inmediato el control de sus cuerpos y quedan sometidos a estremecimientos de lucha entre el consciente que despierta y la hipnosis no acabada, que sólo finaliza el pastor cuando golpea la frente del conejillo y grita “sale de ahí, demonio”. Mientras mas veces se repita la acción, más fluida se realiza la hipnotización, es decir, se va tornando un reflejo condicionado.
Antes de seguir diremos que el poder sólo consigue instalar estos y otros mecanismos de manipulación porque mantiene la reproducción cultural de la vida de personas separadas, con miedo, odio y competencia, es decir, en medio de las prácticas individualistas generalizadas: el contexto. De allí que veremos luego el asunto contextual que rodea a cada persona y que las modificaciones contextuales en barrios y localidades (relacionales, entre las personas y de éstas con la naturaleza) permiten desplegar maneras más afines con el cuerpo, el instinto y el corazón, es decir liberarnos de las influencias culturales, psicológicas, pedagógicas, económicas e ideológicas del poder y el biopoder, lo que a su vez permite avanzar hacia el buen vivir. Eso significa, como veremos, que la liberación o emancipación no depende de la lógica ideológica de lucha política por el poder y modificaciones en el plano macro, como ocurrió en la URSS y países socialistas, que modificaron las estructuras macro sin atender a estos aspectos ya construidos por el individualismo y que si no están resueltos de antemano, la disputa de, por o contra el poder se transforma en un continuismo que sólo ha cambiado los colores de la camiseta y la gorra.
Veamos como han sido estudiados estos asuntos: Fromm y Marcuse en el campo de la psicología y las relaciones humanas, rompen con la psicología freudiana individualista. De Fromm tenemos una bella producción de textos que gradualmente desembocan en el tema de lo humano y un cuestionamiento al contexto.
Marcuse en Eros y civilización hace uso de categorías psicológicas, ya que antes los procesos psíquicos, antiguamente autónomos e identificables ahora están siendo absorbidos por la función del individuo en el estado, por su existencia pública. Por lo mismo los problemas psicológicos se transforman en problemas políticos: el desorden privado refleja más directamente que antes el desorden de la totalidad, y la curación del desorden personal depende más directamente que antes de la curación del desorden general. O sea, nuevamente la contextualidad que señalamos.
Marx había cambiado su estatismo, que caracteriza a sus seguidores actuales autodenominados “marxistas”, 10 años antes de su fallecimiento a partir de su análisis de la experiencia de la Comuna de París donde sostiene que la comuna cumple las funciones del estado y pasa a dedicarse al estudio de las formas comunitarias de vida estudiando principalmente las comunas campesinas rusas y las formas de vida comunal en las colonias, particulamnte Asia y nuestro continente Abya Yala, llegando a romper con la secuencia esclavismo-feudalismo-capitalismo señalando la existencia de un cuarto modo de producción, que llamó “modo de producción asiático”. Esos estudios fueron debidamenre invisibilizados por la nomenklatura de la burocracia del capitalismo de estado autodenominado “socialismo”, que instalada en el poder proclamó a los cuatro vientos que seguían al Marx estatista de antes de la Comuna haciendo creer a todos que esa es la ideología del filósofo, con lo que se transforman en expropiadores de la potencia social y seguidores de un Marx-biblia.
De allí que los estudios marxistas son atrapados en una forma estructural-formal-positivista, llegando Althusser a hablar del estructuralismo marxista, la receta de cocina que aplicó Marta Harnecker y sus seguidores chilenos de los grupos provenientes de la Surda.
Por ellos los autores de psicología marxista pueden ser catalogados tranquilamente de positivistas e individualistas, pues se orientan de forma “crítica” a la toma del poder, con lo que defienden la acción práctica del biopoder y la biopolítica, para aplicarla en beneficio de sus intereses y objetivos estatistas.
Por ello preferimos orientarnos por otros autores que han profundizado el tema de las relaciones humanas entregando aportes a una crítica de los estudios restringidos a la tecnología de la psique y a abrir la mente hacia el tema de la contextualidad y las modificaciones contextuales en barrios y localidades. Entre otros señalamos en primer lugar a Michel Foucault y los posmodernos, en especial Derrida, Deleuze y Guattari, este último autor del esquizoanálisis y de la definición de la sociedad esquizofrénica. Tambiérn es necesario conocer a los subjetivistas italianos provenientes de la línea ideológica de la autonomía obrera, tales como Paolo Virno y Mauricio Lazzarato, de quien traemos un fragmento de su texto “La máquina”:
“Uno puede vivir sometido a “servidumbre” o puede estar “sujeto” a una máquina (técnica, social, comunicativa, etcétera). Estamos bajo la servidumbre a una máquina en tanto constituimos una pieza, uno de los elementos que le permiten funcionar. Estamos sujetos a la máquina en tanto que somos sus usuarios, en tanto que somos sujetos de acción de los que ella se sirve. La sujeción actúa sobre la dimensión molar del individuo (su dimensión social, sus roles, sus funciones, sus representaciones, sus afectos), mientras que la servidumbre maquínica actúa sobre la dimensión molecular, preindividual, infrasocial (los afectos, las sensaciones, los deseos, las relaciones aún no individualizadas, no asignables a un sujeto)”.
Dentro de los psicólogos modernos, aunque ya fallecido, ocupa un lugar importantísimo el modo de interpretar las relaciones de Wilhelm Reich, que entra profundamente en el plexo contextual-relacional del individuo y sostiene que “Pero desde la formación de las sociedades patriarcales, el desarrollo del animal humano no ha sido éste. Las relaciones se han basado en la represión sexual, en el castigo como medio de integración sexual, perdiéndose el contacto con la propia naturaleza animal y destruyendo así la capacidad natural de autorregularse. Toda una cadena de estructuras sociales, mediatizadas por la familia, el médico, el educador y los medios de comunicación de masas actúan para que la interiorización de los mecanismos sociales neuróticos se desarrollen en cada recién nacido”.
Para concluir esta introducción traemos a Casilda Radrigáñez y su genial libro “La Represión del deseo materno y la génesis del estado de sumisión inconsciente”:
”La vida humana es una continuidad de procesos y su reproducción se asegura por el principio del placer… o por los sucedáneos tecnico- plastificados inventados por el hombre para controlarla y someterla a los intereses patriarcales, que son lo que hoy constituyen el consabido principio de realidad ya indefectiblemente opuesto al principio del placer. La cuestión estriba en que la realidad que se organiza es un diseño artificial que está arrancando las raíces mismas de la vida, el principio inmanente de la vida, de manera tal que en lugar de ser impulsada por los deseos, es sumergida en un mar de carencias, donde se manipulan y dirigen todos sus movimientos, llegando en los tiempos actuales, gracias al desarrollo de la tecnología, a unos grados de robotización en otros tiempos increíbles.”
La conclusión es la modificación contextual del flujo relacional de los cuerpos, sensibilidades y corazones de las personas, cosa que no se puede obtener mediante una lógica o receta y menos normas de comportamientos, que más bien vendrían a colaborar en la reproducción de las relaciones de dominio entre la mente racionalista y el instinto arrinconado. No es mediante órdenes u orientaciones mentales hacia el cuerpo que vamos a abrir los corazones y rearmar el tejido relacional del común, ya que estamos tratando con el instinto grabado en los genes de millones de años de compartir y que se transmite de madre a hij@s que en vez de caer en el contexto actual, puede volver a caer y dar continuidad al ser humano saliendo del vientre materno para adentrarse en el vientre de la matria, las formas de vida compartidas entre humanos y de éstos con la naturaleza, lo que ha dejado de ser una utopía o un deseo para transformarse en el grito de la especie que viene desde abajo y desde los cuerpos por todos lados en medio de la crisis de las estructuras y de destrucción del planeta.
Por lo tanto nuestra tarea no es convencer, pues estaríamos reproduciendo los mecanismos instalados de reproducción cultural, sino multiplicar en todas partes las formas de compartir entre nosotros mismos, sin sujetos externos que orienten, que permitan desarrollar en la práctica el deseo de seguir compartiendo la vida. Así en esa contextualidad local pueden y ya lo están haciendo en miles de lugares, fluir y circular los instintos, el común, el afecto y el amor.
Por eso la práctica de nuestros talleres se hacen en barrios y localidades con vecinos, vecinas, vecinitos, animales y plantas.
Inscripciones al taller gratuito. Mande sus días y horarios posibles para barajar con los otros interesados:
unlibre@gmail.com