Es difícil que Ortega acepte y por su lado la iglesia y empresarios siguen buscando salida intermedia y el pueblo se la juega en las barricadas empujando la resistencia sin partidos y sin ceder su exigencia de que se vaya el dictador.
14 de junio de 2018 19:12
Estudiantes de Nicaragua rechazarán elecciones anticipadas si Daniel Ortega sigue en el poder
Agencia EFE
Los universitarios nicaragüenses que comenzaron las protestas antigubernamentales hace dos meses mantendrán su exigencia de que el presidente Daniel Ortega renuncie “inmediatamente” y que sea una “junta de Gobierno transitoria” la que convoque elecciones, dijo uno de sus líderes el jueves, 14 de junio del 2018.
El martes, los medios locales publicaron que Ortega, caracterizado por su discurso antiimperialista, comunicó a un delegado del Senado de Estados Unidos que estaría dispuesto a adelantar las elecciones pero no a abandonar el poder, algo que para Víctor Cuadras, líder estudiantil y miembro de la coalición opositora que negocia con el Gobierno, es “inaceptable”. “Queremos su renuncia inmediata y que acepte la instalación de una junta de Gobierno transitoria, mientras se realizan las reformas constitucionales que todos estamos pidiendo y que nos permitirán convocar elecciones libres”, afirmó el joven durante una entrevista telefónica con Efe. Cuadras aseguró que si los comicios se convocan bajo el liderazgo de Ortega habrá “irregularidades” electorales, independientemente de que haya observadores internacionales, “como ha ocurrido desde 2007″, cuando el exguerrillero de 72 años volvió al poder después de haber dirigir la revolución sandinista unas décadas atrás. “Se ha escuchado también que es posible que Ortega sacrifique la cabeza de Rosario Murillo (su esposa y vicepresidenta) con tal de continuar en el poder, pero tampoco es viable. Los dos han hecho tanto daño que es imposible continuar soportándolo”, declaró. El joven forma parte de la denominada Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, la plataforma que aglutina a los universitarios, el sector privado, los campesinos y las organizaciones civiles, y que este viernes reanudará el diálogo con el Gobierno, suspendido desde mediados de mayo por falta de acuerdo sobre la salida a la crisis. La Conferencia Episcopal, que actúa como mediadora, le planteó el 7 de junio a Ortega una hoja ruta para poner fin al conflicto y mañana dará a conocer la respuesta que le dio el presidente, que no acudirá al diálogo y que enviará a su canciller, Denis Moncada. Ortega no ha vuelto a la mesa de diálogo desde su instalación, el 16 de mayo, cuando otro líder estudiantil, Lesther Alemán, le dijo asesino a la cara y lo responsabilizó de todas las muertes. “Aún nos queda un resquicio de esperanza. Mañana es un día decisivo en el que se desvelarán todas la cartas. Si no se logra nada, tendremos que aumentar nuestra resistencia civil”, indicó Cuadras, quien tiene 25 años y estudia cuarto año de Ingeniería Química en Managua. Nicaragua vive su crisis más violenta desde 1980, en la que ya han muerto 154 personas, según las organizaciones de derechos humanos, y que se inició el 18 de abril cuando el Gobierno reprimió con extrema dureza unas manifestaciones contra una reforma a la seguridad social, que finalmente fue derogada. “No queremos una guerra, ni enfrentarnos entre hermanos. La resistencia pacífica nos va a llevar a la victoria. Ucrania lo consiguió en 90 días y nosotros podemos conseguirlo también”, añadió, en referencia a revolución del “Euromaidán” que derrocó en 2014 al entonces presidente ucraniano Víktor Yanukóvich. Cuadras dijo que el respaldo “masivo” al paro nacional convocado hoy por la plataforma opositora es una muestra de esa resistencia pacífica y de la “inconformidad del pueblo con el desgobierno de Ortega”. Las principales ciudades del país, incluida la capital, lucieron este jueves desérticas, aunque la violencia se recrudeció a las afueras de Managua, especialmente en las localidades de Masatape, Tipitapa y Jinotepe, donde los manifestantes mantienen barricadas, que son atacadas por paramilitares por las noches. “Ya no podemos aguantar más derramamiento de sangre ni más hermanos secuestrados, golpeados y torturados. Exigimos que las fuerzas paramilitares y que la Policía vestida de civil pare de matar al pueblo. Aunque hemos perdido los focos del mundo y la atención ahora está en el Mundial y en Corea del Norte, vamos a seguir alzando la voz”, concluyó líder estudiantil.