“El abstencionismo es una tendencia que podría presentarse en la segunda vuelta, porque los cargos locales ya están definidos”, dijo Tomás Rosada, de la Universidad Rafael Landívar (URL).
La participación ciudadana alcanzó 55.77 por ciento en las votaciones del 9 de noviembre; sin embargo, ese dato podría disminuir en la segunda vuelta, porque el interés de la población bajaría, expresó Rosada, del Instituto de Investigación Económica y Social (Idies), de la URL.
Añadió que la participación podría disminuir porque esa ha sido la tendencia en los comicios anteriores. Señala que otro argumento es que los liderazgos locales -alcaldías y diputaciones- ya han sido electos, lo cual podría desmotivar a los votantes.
Además, la población que no comparte afinidad por la Gran Alianza Nacional (Gana) y la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), opciones que competirán el 28 de diciembre en la segunda vuelta, podría no asistir a emitir el sufragio.
Otro factor son las celebraciones de fin de año, ya que un alto porcentaje de la población toma vacaciones en ese período.
Esas situaciones podrían influir en los registros de la segunda vuelta, en especial en la capital.
“Será un fenómeno interesante que la segunda vuelta se dé el 28 de diciembre, en medio de las fiestas de fin de año, pero el abstencionismo afectará a las dos organizaciones”, aseguró el experto de la URL.
Sin embargo, la Gana podría ser la más afectada, ya que según los datos electorales, obtuvo un alto porcentaje de votos en la capital –alcanzó el 54.45 por ciento, mientras que la UNE tuvo 24.10 por ciento.
Rosada expresó que los municipios que tienen alto porcentaje de población empadronada serán un caudal importante de votos para definir la segunda ronda electoral, pero dependerá de la capacidad de los candidatos a la Presidencia para captar esa intención de acudir a las urnas.
Los magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE) también han asegurado que la fecha de los comicios podría ocasionar problemas; sin embargo, era la más apropiada, según los plazos que manda la Ley Electoral y de Partidos Políticos.
Para motivar la participación ciudadana, el TSE lleva a cabo una campaña publicitaria en los medios de comunicación.