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Venezuela: el cinismo del feminismo socialista

Amaranta Rojas :: 05.11.18

Hace muy poco, vimos en cadena la culminación del Congreso de la Mujeres del PSUV. Hubo en ese congreso, una declaración sobre un socialismo feminista y cuando oí hablar de eso, me sentí como una cuaima. Sabía de lo bofo de esa declaración. No era el caso, pero a las protagonistas más sobresalientes de este congreso, la vi como esas encopetadas adecas del siglo pasado. Su misma práctica manipuladora y embustera.

Deillily Rodríguez, el cinismo del feminismo socialista y María León
Por: Amaranta Rojas |
Domingo, 04/11/2018
Aporrea

Hace muy poco, vimos en cadena la culminación del Congreso de la Mujeres del PSUV. Hubo en ese congreso, una declaración sobre un socialismo feminista y cuando oí hablar de eso, me sentí como una cuaima. Sabía de lo bofo de esa declaración. No era el caso, pero a las protagonistas más sobresalientes de este congreso, la vi como esas encopetadas adecas del siglo pasado. Su misma práctica manipuladora y embustera.

Vi sin estar ahí, a Paulinas Gamus, Ixora Rojas (+), Liliana Hernández, la barragana y otras más. Estas no eran feministas. Las del congreso del PSUV sí en propaganda, pero este feminismo no pasa de ser eso propagandístico, manipulador y de mentira. Es “socialismo feminista” porque hay mujeres del PSUV en cargos burocráticos. Ese es el alcance de este feminismo.

Con todo el respeto que se merece la señora María León, está como obliga a pronunciarse. No creo que lo haga sobre este caso de una mujer joven y obrera, pero la esperanza es lo último que uno pierde y no pierdo nada, esperando (sin pedirle) que se pronuncie como mujer, con este atropello contra una joven mujer obrera.

Preguntaría a las lideresas de este “feminismo socialista”: ¿El alto porcentaje de mujeres que son pobres y cabeza de familia ha cambiado? ¿La condición de pobreza de estas mujeres ha mejorado? ¿Cómo es que un socialismo feminista no se ha quitado ese charco de la cara?

Este es un feminismo que muestra una cara porque hay mujeres del PSUV en cargos burocráticos. Más de esto; el feminismo socialista queda en puro hueso.

Hace apenas unos días, este socialismo feminista despidió como trabajadora del Metro a la joven mujer: Deillily Rodríguez. Cosa muy curiosa de este “socialismo feminista”; la joven mujer obrera Deillily Rodríguez fue despedida como trabajadora sin tomar en cuenta y respetar las exigencias mínimas de una Ley Orgánica del trabajo que es la más avanzada del mundo y que según uno oye, fue elaborada para defender a los trabajadores y trabajadoras. No hubo amonestaciones previas, ni expediente y los peor; la joven mujer obrera Deillily Rodríguez fue despedida existiendo una disposición de inamovilidad decretado por el “socialismo feminista” de Maduro.

Su delito fue opinar y solidarizarse con otros trabajadores del país que vienen reclamando sus reivindicaciones. El autoritarismo de Maduro viene abriéndose paso actuando eficaz y eficientemente contra el delito de opinión. Los corruptos tienen luz verde y el gobierno “actúa” cuando ya están fuera del país.

La fuga de capitales, que le da en la cara a la pobreza extrema y a las mujeres que son la que padecen la pobreza de los hogares pobres en Venezuela, cabalga muy libremente en este “socialismo feminista”, que lo es, porque hay mujeres en cargos burocráticos.

La joven mujer obrera Deillily Rodríguez pecó al opinar y pecó también al defender a los obreros en un gobierno que además de sersupuestamente feminista, es obrerista y tiene un presidente “obrero”. La joven mujer obrera Deillily Rodríguez no tiene derecho en una “revolución” que tiene todo estos calificativos que les cuelga como propaganda.

Es muy seguro, que las mujeres con cargo burocráticos y que son la punta de lanza de este “socialismo feminista” pero burocrático, se visten de vez en cuando con una franela con la imagen del Che. Olvidan como “feminista”, que el Che digo algo más o menos en este tono:

“Sean capaces siempre de sentir, en lo más hondo, cualquier injusticia realizada contra cualquiera, en cualquier parte del mundo. Es la cualidad más linda del revolucionario”. La injustica a la joven mujer obrera Deillily Rodríguez, sucedió en Caracas, cuna de este feminismo socialista.

En este caso, se cayeron varias máscaras al mismo tiempo. Se cayó y se llenó de lodo la máscara del socialismo feminista, se cayó la máscara de la juventud con derechos y llamada generación de oro. Se cayó también la máscara del obrerismo. La mujer Deillily Rodríguez, es JOVEN, MUJER Y OBRERA. Se cae también la máscara de “vuelta la patria”, porque esta JOVEN MUJER OBRERA, PUEDE ESTAR PENSANDO, QUE EN ESTE SOCIALISMO FEMINISTA NO TIENE MUCHAS OPORTUNIDADES. Es MUJER, JOVEN Y OBRERA.

PD. No pierdo la esperanza de recibir muy pronto, un correo en el cual, la Sra. María León me diga. Sra. Amaranta, comunícole por esta vía, que a la joven mujer obrera, Deillily Rodríguez le fueron restituidos sus derechos injustamente violentados por orden expresa del revolucionario César Ramón Vegas González, como presidente del Metro. Disculpe usted este pequeño desliz con nuestro socialismo feminista.

Amarantaroja063@gmail.com

@La_DagaRoja


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