Despu?s de la autonom?a y autodeterminaci?n de Azawad en los territorios del norte de Mali del pueblo originario amazigh tuareg, cometieron el error de intentar hacer un estado en la forma de Rep?blica de Azawad, lo que fue aprovechado por Al Qaeda y otros grupos fundamentalistas hasta los simpatizantes del Estado Isl?mico, y fue entonces que intervino el ej?rcito franc?s el a?o 2013 y contin?an hasta ahora los choques entre las fuerzas armadas oficiales contra los grupos rebeldes, y entre los rebeldes por un lado los fundamentalistas con actos terroristas y por el otro los tuareg en lucha por la autodeterminaci?n.
En Mal?, la violencia no da tregua y los desplazados internos siguen aumentando
Por Europa Press - 24 Febrero, 2019
Madrid, 24 Feb. (EUROPA PRESS).- El n?mero de desplazados internos en Mal? se duplic? en el segundo semestre de 2018 y no parece que vaya a disminuir a la luz de c?mo ha empezado este a?o, con una persistencia de la violencia tanto a manos de los yihadistas, como la de car?cter intercomunitario y la ocasionada por la acci?n de las fuerzas de seguridad, seg?n advierte el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC), que sostiene que la soluci?n a esta crisis no llegar? solo por la v?a militar.
Seg?n los ?ltimos datos de la ONU, a finales de 2018 hab?a en Mal? unos 120.300 desplazados internos, un 92 por ciento m?s de los 62.600 que hab?a a finales de junio. El aumento ha sido especialmente acusado en la regi?n de Mopti, en el centro del pa?s y una de las m?s afectadas por la violencia, donde en un a?o los desplazados han pasado de unos 2.000 a 56.500 a finales de 2018. En total, 3,2 millones de personas necesitan ayuda.
?Desde principios de a?o no hemos notado ning?n signo de disminuci?n de la violencia, sino m?s bien lo contrario?, subraya el director del NRC en Mal?, Hassane Hamadou. ?Si la tendencia de crecientes ataques y desplazamiento de 2018 contin?a, la situaci?n humanitaria probablemente empeorar??, vaticina en declaraciones a Europa Press.
El desplazamiento en el norte y el centro de Mal? viene motivado por ?varias fuentes de violencia como las operaciones militares, los ataques de grupos armados contra localidades y civiles, as? como enfrentamiento entre elementos armados pertenecientes a distintas comunidades?, explica.
El pa?s vive sumido en una crisis continuada a ra?z de la rebeli?n separatista tuareg de 2012, pronto secuestrada por grupos islamistas y que provoc? la intervenci?n militar francesa. El acuerdo de paz de 2015 no ha resuelto la situaci?n y el norte sufre con frecuencia las acciones del Grupo para el Apoyo del Islam y los Musulmanes (JNIM, por sus siglas en ?rabe), una alianza bajo la ?gida de Al Qaeda en el Magreb Isl?mico (AQMI) y que engloba a Ansar Dine, el Frente de Liberaci?n de Macina y Al Murabit?n, que lidera el destacado yihadista argelino Mojtar Belmojtar.
Adem?s, el centro del pa?s tambi?n se ha visto arrastrado en esta espiral de violencia, en su caso obra principalmente del Frente de Liberaci?n de Macina, liderado por el predicador radical Amadou Koufa, muerto el pasado 23 de noviembre en una operaci?n del Ej?rcito franc?s.
A las acciones de los grupos yihadistas se ha sumado una creciente violencia intercomunitaria en general por los recursos entre las comunidades agr?colas y los pastores, siendo estos ?ltimos principalmente fulani, a los que se suele identificar con los yihadistas, ya que algunos de ellos han engrosado las filas de estos grupos.
Huir sin nada
Quienes huyen de esta violencia ?a menudo lo hacen dejando todo atr?s, incluidos sus medios de subsistencia?, por lo que ?dependan de la asistencia y la generosidad de las comunidades de acogida?, subraya el responsable del NRC. Estas personas, a?ade, necesita comida, agua, cobijo y acceso a atenci?n sanitaria.
Llegar hasta ellos no es tarea f?cil para las organizaciones humanitarias. ?Acceder a las personas necesitadas en el norte y el centro es un gran reto?, admite Hamadou. Llegar hasta quien necesita ayuda suele llevar m?s tiempo de lo normal debido a la inseguridad, ?lo que ralentiza la repuesta y la entrega de ayuda?. Todo ello ha creado ?un peligroso y estresante entorno para los trabajadores humanitarios y de la salud?, precisa.
Pero no solo la falta de acceso es un problema en Mal?, tambi?n lo es la falta de fondos. ?La comunidad humanitaria carece de los recursos para responder de forma adecuada y eficiente?, resalta Hamadou. En 2018 solo recibieron la mitad de los 330 millones de d?lares solicitados. Para este a?o, la ONU ha solicitado 296,5 millones.
Y en este contexto, como suele ocurrir en la mayor?a de las crisis humanitarias, los ni?os son los que m?s sufren. Actualmente hay m?s de 1,6 millones de ni?os necesitados de ayuda. Adem?s, a finales de diciembre pasado hab?a m?s de 800 escuelas cerradas, el 62 por ciento de ellas en la regi?n de Mopti, debido a la violencia y la inseguridad.
Ni?os sin acceso a Educaci?n
?El acceso a la educaci?n es un derecho b?sico, no un privilegio y por eso es crucial que los ni?os contin?en con sus estudios?, defiende el responsable del NRC. ?Sin educaci?n, los ni?os carecen de las capacidades y el conocimiento que necesitan para sus vidas adultas, para apoyar a sus familias y prepararse para su futuro?, subraya.
Ir a la escuela tambi?n ?les da un sentido de normalidad y es crucial para su desarrollo?, a?ade, lamentando que los miles de ni?os que se han quedado sin clase han quedado relegados ?a los m?rgenes de la sociedad, vulnerables y enfrentados al riesgo de la explotaci?n laboral y el reclutamiento por parte de grups armados, mientras que las ni?as podr?an verse obligadas a matrimonios tempranos?.
?El NRC hace de la educaci?n de ni?os y j?venes una prioridad en sus programas?, explica Hamadou. En este sentido, imparte clases de recuperaci?n para ni?os que no van a la escuela ?para darles la oportunidad de regresar al sistema educativo formal?, indica.
Tambi?n apoya el aprendizaje a nivel comunitario en aquellas zonas donde las escuelas no funcionan y ofrece formaci?n profesional a j?venes vulnerables con el fin de que ?puedan ganarse la vida?, a?ade el responsable del NRC. La ONG noruega tambi?n ofrece formaci?n a los profesores del sistema formal y distribuye material escolar como libros de texto y l?pices.
En lo que se refiere a los desplazados, adem?s de ofrecer ayuda de emergencia como puede ser comida o bienes de primera necesidad como mantas, mosquiteras o jab?n, tambi?n promueve actividades generadoras de ingresos como pueden ser los huertos comunitarios o las asociaciones de pr?stamo.
Adem?s, explica Hamadou, el NRC ofrece ?asistencia legal a las personas afectadas por el conflicto para que puedan conseguir documentaci?n civil, como carn?s de identidad y certificados de nacimiento? y ayuda a los desplazados y retornados a ?acceder a sus tierras y derechos de propiedad cuando han perdido su documentaci?n o la propiedad es contestada?.
Mal? merece m?s atenci?n
Ante la ?tibia atenci?n? que est? recibiendo la crisis humanitaria en Mal?, el responsable del NRC llama a los donantes a incrementar sus esfuerzos con el fin de que ?los actores humanitarios puedan responder adecuadamente a las crecientes necesidades del pa?s?.
Asimismo, reclama a las distintas fuerzas y actores armados en el pa?s que ?respeten el espacio humanitario y permitan que los trabajadores humanitarios respondan donde quiera que est?n las necesidades sin ver comprometidas su independencia y neutralidad?.
Por ?ltimo, Hamadou advierte de que ?las causas en la ra?s de la inestabilidad en Mal? requieren m?s que una respuesta militar para ser abordadas?.