La Editorial de este peri?dico explora sobre las causas y consecuencias del costalazo del dictador de Turqu?a
Derrota de Erdogan
La derrota del presidente turco en las municipales muestra el rechazo urbano al proceso islamizador y autoritario
EDITORIAL
EL PA?S
4 ABR 2019 - 00:00
La derrota en las grandes ciudades del presidente Recep Tayyip Erdogan en las elecciones municipales celebradas en Turqu?a el domingo es un claro mensaje del electorado urbano de ese pa?s sobre su rechazo a la v?a autoritaria y de islamizaci?n de la sociedad en la que el mandatario se ha embarcado desde hace algunos a?os.
Aunque su formaci?n, el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, en sus siglas turcas), obtuvo el mayor n?mero de votos en el conjunto del pa?s, lo cierto es que las grandes urbes, especialmente Ankara y Estambul, han dado la espalda al islamismo. Particularmente significativa ha sido la derrota en Estambul ?que concentra el 20% de la poblaci?n de Turqu?a y maneja un presupuesto astron?mico?, ciudad en la que Erdogan comenz? su carrera pol?tica y cuya alcald?a ha ocupado su formaci?n pol?tica durante los ?ltimos 25 a?os. En total, la oposici?n ha pasado a controlar seis de las diez ciudades m?s pobladas de Turqu?a, lo que coloca al mandatario ante una perspectiva in?dita desde que pusiese en marcha la demolici?n del sistema laico que, bajo diversos reg?menes, ha sido una constante en Turqu?a desde la creaci?n del Estado moderno en noviembre de 1922, tras la partici?n del Imperio otomano.
Erdogan se ha acostumbrado a ejercer el poder sin cortapisas. El intento del golpe de Estado de 2016 le ha servido de excusa para desencadenar una represi?n sin precedentes. La oposici?n ha sido hostigada y sus manifestaciones reprimidas violentamente en numerosas ocasiones. Ha realizado purgas tanto en el Ej?rcito como en la Administraci?n p?blica, as? como en institutos y universidades. Ha perseguido a periodistas incluso fuera de las fronteras turcas al amparo de una legislaci?n ad hoc sobre injurias al jefe del Estado, es decir, ?l mismo. La minor?a kurda contin?a denunciando violaciones de sus derechos b?sicos mientras el Ej?rcito turco ha combatido abiertamente a los kurdos tanto en Irak como en Siria. Ha utilizado a los refugiados de este ?ltimo pa?s como moneda de cambio en unas dur?simas negociaciones con la UE. Y todo ello con un giro radical islamizador en una de las sociedades mayoritariamente musulmanas m?s laicas del mundo.
El resultado electoral muestra que la sociedad turca m?s moderna, y que hasta bien poco ha estado llamando a las puertas de la Uni?n Europea, no se halla dispuesta a seguir d?cilmente por ese camino. Turqu?a es un pa?s muy complejo con una organizaci?n formalmente democr?tica y resulta necesario tener en cuenta la opini?n de todos a la hora de establecer el rumbo del pa?s. Algo que hasta el domingo Erdogan no ha hecho.