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Poder de Ortega se resquebraja a un a?o del estallido de la crisis en Nicaragua

Agencias :: 13.04.19

A un a?o del estallido de las protestas masivas en Nicaragua, el gobierno de Daniel Ortega se encuentra sumido en una profunda crisis, con la econom?a deteriorada, pol?ticamente debilitado por sanciones internacionales y con escaso margen de acci?n para conservar el poder, seg?n analistas.

Poder de Ortega se resquebraja a un a?o del estallido de la crisis en Nicaragua
En el 2019, la econom?a de Nicaragua caer? un 5%, la mayor contracci?n latinoamericana despu?s de Venezuela (25%), seg?n la ?ltima proyecci?n del Fondo Monetario Internacional.

AGENCIA AFP /
13.04.2019 - 05:30 AM

A un a?o del estallido de las protestas masivas en Nicaragua, el gobierno de Daniel Ortega se encuentra sumido en una profunda crisis, con la econom?a deteriorada, pol?ticamente debilitado por sanciones internacionales y con escaso margen de acci?n para conservar el poder, seg?n analistas.

La represi?n, que ha dejado 325 muertos, cientos de encarcelados y miles de exiliados, anul? el espacio de protesta para la oposici?n, pero el pa?s est? lejos de la normalidad que el gobierno intenta proyectar.

A Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, “el monopolio de la fuerza es lo ?nico que los acompa?a, m?s un poco de nepotismo y corrupci?n”, dijo el polit?logo Manuel Orozco, de Di?logo Interamericano, con sede en Washington.

El exguerrillero de 73 a?os, que ayud? a derrocar a la dictadura de Anastasio Somoza en 1979, fue sorprendido el 18 de abril del 2018 por una protesta de universitarios contra una reforma a la seguridad social.

La violenta represi?n contra los estudiantes encendi? la chispa de una demanda nacional por la renuncia del l?der sandinista, con manifestaciones y bloqueos de carreteras en casi todo el pa?s.

En el poder desde el 2007, Ortega vio c?mo las protestas le quitaron el control de la calle y deterioraron su imagen de revolucionario al reprimir a manifestantes desarmados.

“Desafortunadamente en Nicaragua no parece quedar un resquicio de institucionalidad ni Estado de Derecho”, dijo la guatemalteca Claudia Paz y Paz, directora para Centroam?rica y M?xico del Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (Cejil).

Record? que el informe del grupo de expertos de la Comisi?n Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que ella integr?, revel? que la represi?n contra las protestas “cont? con el respaldo, cuando no colaboraci?n, de distintas instancias del Estado”.

“Al borde del abismo”

Antes de la crisis desatada por las protestas, Ortega contaba con el respaldo de un 65% de la poblaci?n de 6.2 millones y el pa?s exhib?a tasas de crecimiento de entre 4% y 5% anual, en tanto el turismo creci? apoyado por la percepci?n de ser el pa?s m?s seguro de Centroam?rica.

Seg?n el Banco Mundial, la pobreza en Nicaragua cay? de 29.5% en el 2014 a 24.9% en el 2016.

Pero la crisis generada por las protestas asest? un golpe devastador a la econom?a, que se contrajo 3.8% en el 2018 y perdi? 294,000 puestos de trabajo, seg?n el Banco Central. Gremios empresariales calculan la ca?da en 4%, con m?s de 400,000 empleos perdidos.

En el 2019, la econom?a de Nicaragua caer? un 5%, la mayor contracci?n latinoamericana despu?s de Venezuela (25%), seg?n la ?ltima proyecci?n del Fondo Monetario Internacional.

La situaci?n socioecon?mica es “insostenible”, y una reforma tributaria y del seguro social que el gobierno aprob? para cubrir un d?ficit fiscal de US$ 310 millones “golpea a todos por igual”, sostuvo la exguerrillera e historiadora Dora Mar?a T?llez.

El soci?logo Oscar Ren? Vargas, consider? en un an?lisis de coyuntura que la administraci?n Ortega-Murillo “dej? de ser s?lida y popular y se transform? en un gobierno fr?gil. Ha cerrado todas las v?lvulas del juego democr?tico, ha actuado con mucha violencia”.

“El pa?s est? al borde de un abismo estamos ante una grave coyuntura”, advirti?.

Estados Unidos, aprob? en diciembre la Nicaragua Investment Conditionality Act (Nica Act), que restringe el acceso del pa?s a cr?ditos de organismos multilaterales, mientras que la OEA amenaza con aplicar la Carta Democr?tica, que podr?a a llevar a su expulsi?n de ese organismo.

De su lado, la Euroc?mara pidi? un proceso escalonado de sanciones contra el gobierno de Ortega, incluyendo su posible exclusi?n del Acuerdo de Asociaci?n de la Uni?n Europea con Centroam?rica.

Al mismo tiempo, la crisis en Venezuela dej? a Nicaragua sin una fuente de ayuda, que alcanz? m?s de 4.000 millones de d?lares desde 2007, seg?n el Banco Central de Nicaragua

Pese a todas esas presiones, los analistas descartan una salida de Ortega a corto plazo mediante un adelanto de elecciones, programadas para el 2021.

“Mesi?nico”
Ortega es “el cl?sico dictador de Am?rica Latina”, un caudillo con “la visi?n mesi?nica de que el Estado est? por encima del ciudadano”, y por eso controla las instituciones p?blicas para ejercer un control monop?lico del poder, se?al? Manuel Orozco, de origen nicarag?ense.

Ortega reanud? a fines de febrero las negociaciones con la opositora Alianza C?vica por la Justicia y la Democracia (ACDJ), pero el di?logo acab? el 3 de abril sin acuerdos para adelantar las elecciones y hacer justicia a las v?ctimas de la violencia, seg?n esa coalici?n.

La ACDJ acusa al gobierno de incumplir el acuerdo de liberar a centenares de detenidos en un plazo de 90 d?as y respetar las libertades p?blicas, incluida la de protestar.

El gobierno afirm? por su parte que “ning?n impasse o retraso (en el di?logo) ha sido responsabilidad de nuestra representaci?n”.

El exdiputado y analista Eliseo N??ez dijo que “por el momento Ortega no lo entiende, pero su mejor salida es el di?logo”.

Consider? que las condiciones est?n dadas para “un nuevo estallido social. (Ortega) debe verse en el espejo venezolano, porque aunque reprima duramente, ya no ser? capaz de detener su ca?da del poder”.


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