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El debate sobre el ?xodo centroamericano se ha centrado en especulaciones sobre las causas del notable aumento en los ?ltimos meses, extensas caravanas de miles de desamparados, en observaciones sobre los cambios en la composici?n de los flujos y argumentos sobre qu? hacer al respecto.
C?mo entender el ?xodo
Laura Carlsen
1 mayo 2019
Desinform?monos
El debate sobre el ?xodo centroamericano se ha centrado en especulaciones sobre las causas del notable aumento en los ?ltimos meses, en observaciones sobre los cambios en la composici?n de los flujos y argumentos sobre qu? hacer al respecto.
Mientras no haya evidencias para sostenerla, se debe descartar la hip?tesis de que el ?xodo y las m?ltiples caravanas que han pasado recientemente por M?xico responden a una manipulaci?n por parte de distintas fuerzas pol?ticas y econ?micas, sean el partido republicano o dem?crata en EEUU, partidos pol?ticos en Honduras u ONG que supuestamente lucran con la migraci?n. Simplemente no existen tales evidencias a pesar de los cientos de testimonios registrados e investigaciones realizadas desde que empez? el fen?meno de las caravanas.
Entonces es urgente ver las causas que expulsan a la gente en sus pa?ses de origen y lo que casi no se ve en el debate es un an?lisis actualizado y desmenuzado de las condiciones en los lugares de donde sale la mayor parte de la gente ?Honduras, Guatemala y El Salvador. Este tipo de an?lisis es indispensable para cualquier propuesta de soluciones de corto o largo plazo. Enseguida, nom?s unos apuntes para el an?lisis.
1. Los pa?ses de origen enfrentan crisis pol?ticas. Esta semana, manifestaciones contra reformas en salud y educaci?n que alegan llevar?an a la privatizaci?n de servicios y despidos masivos en Honduras, han dejado dos muertos seg?n reportes y cientos de heridos despu?s de la represi?n violenta por parte de las fuerzas de seguridad. Las manifestaciones han sido constantes desde las elecciones fraudulentas para la presidencia en 2017, e incluso antes, desde el golpe de estado en 2009.
En Guatemala, las protestas contra Jimmy Morales por encubrir la corrupci?n en su gobierno, se han intensificado a la par de las medidas represivas y en v?spera de elecciones. Se incrementan los ataques a defensoras y defensores de derechos humanos.
Estas crisis est?n suprimidas en la prensa, en parte por la falta de libertad de expresi?n ?Honduras acaba de bajar cinco puntos en la lista respectiva para colocarse en el lugar 146 de 180 pa?ses. Son factores ignorados en la migraci?n por los expertos en el tema, a la vez que Trump criminaliza a las v?ctimas y los progresistas en EE.UU. proponen m?s ayuda a reg?menes altamente cuestionados por sus propias poblaciones.
2. El neoliberalismo es un sistema criminal estructural que no puede garantizar seguridad a la poblaci?n. El neoliberalismo que domina en estos pa?ses no es tanto un modelo econ?mico, sino un sistema para la sustracci?n de riqueza por parte de grandes corporaciones transnacionales, especuladores financieros y ?lites pol?ticas aliadas. En los hechos, est? construido sobre la base de un entramado de econom?as criminales y como tal ha exacerbado las condiciones de inseguridad humana en la regi?n de Centroam?rica y M?xico.
En este pa?s la econom?a sumergida que ha resultado es enorme. Abarca el tr?fico de sustancias prohibidas ?un mercado negro que se cre? para solapar todo tipo de pr?cticas ilegales y para servir como vaso comunicante entre recursos legales e ilegales?, el huachicoleo que el presidente L?pez Obrador calcula en unos $70 mil millones de pesos al a?o, la corrupci?n y extorsi?n, y la econom?a informal que se ha convertido en m?s de la mitad del mercado de trabajo y en la quinta parte de la econom?a a partir del libre comercio. Contempla tambi?n los flujos financieros il?citos (la fuga ilegal de capital), calculados por el Global Financial Integrity en $77,400 millones de USD entre 1980 y 2010.
La ilegalidad inherente en el modelo neoliberal exige tener gobernantes c?mplices que cumplen con el papel de simular un estado de derecho, a la vez encubriendo el verdadero funcionamiento de la econom?a. Si no pueden convencer a la poblaci?n que el sistema es el ?nico y por ende el mejor posible, los gobernantes tienen que estar dispuestos a recurrir a la tergiversaci?n de las leyes y la represi?n de su propia gente. Los fraudes electorales en Honduras y en M?xico, los esfuerzos para sostener gobiernos corruptos en Guatemala y mantener en la impunidad a gobiernos corruptos en El Salvador son tambi?n imperativos del sistema neoliberal. La desigualdad y la violencia son end?micas al sistema y no se puede resolver la crisis humanitaria tras el ?xodo centroamericano sin reconocerlo.
Las pol?ticas y pr?cticas actuales, tanto del gobierno mexicano de Andr?s Manuel L?pez Obrador como de Donald Trump, no solo no resuelvan la crisis humanitaria, sino la est?n agravando. El gobierno racista de Trump lo sabe ?se apuesta abiertamente a la agudizaci?n de la crisis para apretar las medidas de restricci?n y construir una base electoral sobre el miedo de una ?invasi?n?. Por esta raz?n, no invierte ni invertir? en procesar a los solicitantes de asilo en su pa?s ni en resolver las causas de la migraci?n en Am?rica Central, causas que las pol?ticas estadunidenses han fomentado tras d?cadas de pol?ticas de saqueo y represi?n.
Por su parte, el gobierno mexicano a?n no ha presentado un plan integral para la migraci?n y su actuaci?n ha sido err?tica. Es preocupante que para dirigirse a ?las causas ra?ces? propone un programa de inversiones en conjunto con el gobierno de Trump si se supone que no comparten ni el diagn?stico del problema ni las propuestas de soluci?n. El gobierno de AMLO formalmente ha marcado una postura anti-neoliberal y pro-derechos y la pol?tica de Trump est? dirigida por promotores de la supremac?a blanca.
La tarea de trazar una pol?tica justa sobre migraci?n en el pa?s se complica por la falta de informaci?n precisa y la abundancia de noticias falsas que genera el gobierno de EEUU, los medios comerciales y a veces integrantes del propio gobierno. Sali? hace unas semanas la alarma de una ?caravana madre? de 20,000 personas, de la Secretaria de Seguridad Interior de EEUU, que fue repitida por la Secretar?a de Gobernaci?n. Nunca exisiti?. Luego la secretaria Olga S?nchez tuvo que admitir que fue falsa la informaci?n y utiliz? la frase lamentable de que hab?a ?caravanas madrecitas? que sumaron unos 5 mil personas para justificar el error. El 23 de abril anunci? que 300,000 migrantes entraron en los primeros tres meses, una cifra que no se ha podido confirmar.
Con un racismo y xenofobia crecientes en M?xico, es sumamente importante evitar declaraciones falsas y alarmistas y contar con datos fiables. No son n?meros sin antecedentes en la historia, ni flujos imposibles de absorber, ni ej?rcitos invasores. Son seres humanos que merecen un lugar seguro y pol?ticas p?blicas que garanticen sus derechos y rompan definitivamente con las pol?ticas que llevaron a la crisis humanitaria de hoy, cuando intentan, una vez m?s, culpar a las v?ctimas en lugar de extender la mano.