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Nicaragua: no debemos repetir los errores del pasado

Gerardo Baltodano :: 10.05.19

Excelente este art?culo de uno de los grandes empresarios de Nicaragua. Muestra que dentro de este sector hay patriotas que piensan en el pa?s, en la gente, en la democracia, sin subordinar todos estos temas a sus negocios y ganancias. Les invito a leerlo con detenimiento. Me llama la atenci?n que toca temas que para algunos son tab?, como los intentos de un sector del empresariado de cooptar los movimientos y organizaciones, de descalificar a quienes pensamos que s?lo con movilizaci?n y organizaci?n del pueblo es que vamos a presionar y conseguir la salida de Ortega.
- M?nica Baltodano -

No debemos repetir los errores del pasado
El problema est? en el estilo de liderazgo predominante. Se quiso vender, por conveniencia o por ignorancia, que la democracia no era la ruta

Gerardo Baltodano
Confidencial
8 de mayo 2019

El a?o 2018 nos dej? un pa?s convulsionado por una crisis pol?tica y socioecon?mica, con un alto costo humanitario.

La respuesta del Estado con uso excesivo de la fuerza para acallar las manifestaciones ciudadanas de 2018 dej?, al menos, la muerte de 325 personas, dos mil heridos y 600 personas privadas de libertad, sin incluir las personas que han sido desprovistas temporalmente de su libertad, tambi?n por ejercer sus derechos ciudadanos. A esto se suma m?s de 100 personas desaparecidas al d?a de hoy.

Una crisis pol?tica, socioecon?mica y humanitaria
Las condiciones de vida de todos los nicarag?enses desmejoraron en 2018. La econom?a decreci? 3.8%, m?s de cien mil personas cayeron en el desempleo y m?s de 200 mil personas se sumaron a las 1.5 millones que viv?an en situaci?n de pobreza. El Instituto Nicarag?ense de Seguridad Social (INSS), que se encarga de pagar las pensiones a la tercera edad, est? quebrado, sin la capacidad financiera y administrativa para responder a la confianza y necesidades de sus asegurados.

El Sistema Financiero est? perdiendo la credibilidad para ejercer de forma efectiva su actividad de intermediaci?n financiera, para incentivar el ahorro interno y asignar eficientemente estos recursos a las diversas actividades productivas y de servicios, que son la base del desarrollo del pa?s.

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La perspectiva del nuevo ciclo agr?cola ante la contracci?n aguda del cr?dito es m?s que sombr?a y m?s afectaciones se suman con las ?ltimas medidas fiscales implementadas que han elevado los costos de producci?n y reducido dr?sticamente la liquidez y rentabilidad de las empresas.

El pa?s ha perdido toda su atracci?n a los flujos externos que permit?an financiar las inversiones sin sacrificar fuertemente el consumo interno, ya de cierta forma limitado en esta pobre econom?a. El talento humano, tan necesario en el proceso de desarrollo econ?mico, est? saliendo del pa?s, resultando en una migraci?n que se estima en m?s de cien mil personas.

Lo m?s preocupante y triste es que, a falta de respaldo popular y por su aislamiento de la comunidad internacional, el grupo gobernante sigue utilizando, como ?nico elemento que le posibilita mantenerse en el poder y continuar gozando de sus beneficios, la violencia extrema y organizada contra la poblaci?n a trav?s de todos los poderes del Estado.

Es de esperar que en 2019 se agudice la crisis pol?tica y socioecon?mica, as? como los niveles de pobreza.

El origen del problema: caudillismo sin democracia
Despu?s de varias d?cadas de construir lo que l?deres pol?ticos y empresariales consideraban una sociedad administrada bajo el principio de la raz?n m?s infalible, sujeta al orden y la paz social, ejemplo a imitar por otros pa?ses en b?squeda de crecimiento econ?mico, ?C?mo fue posible que lleg?ramos a estos extremos de deshumanizaci?n y pobreza ?tica y social? ?C?mo fue posible que instituciones que se construyeron para proteger a la sociedad, ahora se vuelquen con toda violencia contra ella? Debemos responder estas preguntas si FUNIDES quiere ser parte de la soluci?n para salir de la crisis y no regresar jam?s. No hay que continuar repitiendo los errores del pasado.

El origen del problema est? en el estilo de liderazgo predominante en Nicaragua, que concibe que la sociedad, nuestras instituciones p?blicas y aquellas del ?mbito de la sociedad civil, as? como nuestras instituciones gremiales, se manejan mejor bajo el control de unos pocos l?deres, del Caudillo como lo llaman algunos, due?os del monopolio de la raz?n, y no bajo la participaci?n democr?tica de sus constituyentes. La sociedad, su gobernanza, se argumenta err?neamente, es tan importante que su administraci?n debe ser controlada por unos pocos y no regirse por la incertidumbre del proceso de toma de decisi?n que produce la democracia. Siguiendo esta l?gica se valor? la seguridad, el orden y el crecimiento econ?mico sobre el resto de elementos que componen el desarrollo humano, llegando b?sicamente a deslegitimar las manifestaciones sociales en Nicaragua, pues era causante del desorden; a privatizar la informaci?n, pues era muy valiosa para compartirla con el ciudadano com?n; a evitar el crecimiento de la sociedad civil, que persegu?a el cuido del medio ambiente, el derecho a la diversidad, etc., por ser nido de radicales; pero lo peor y m?s peligroso, y quiero hacer ?nfasis, fue hacer del Gobierno el ?nico interlocutor con el Estado, acabando as? con la poca institucionalidad del pa?s; y as? sucesivamente bajo esta l?gica se fue creando, inconscientemente, una dictadura y conteniendo a quienes le pon?an barreras.

Se quiso vender, por inter?s y conveniencia o por ignorancia, que la democracia no era la ruta al desarrollo, cuando m?s bien la experiencia global muestra que el orden, la seguridad y el crecimiento, que son la base de la estabilidad y el progreso, para ser sostenibles requieren de instituciones, reglas y leyes que promuevan la cohesi?n social y el bien com?n.

La defensa de las instituciones democr?ticas
FUNIDES debe continuar abogando por las Instituciones Inclusivas, las cuales nacen con la documentaci?n de los derechos del hombre en la Revoluci?n Americana y la Revoluci?n Francesa y se consolidan con la instituci?n de la democracia, el libre mercado y el Estado de derecho sustentado en la independencia de poderes. Estas instituciones liberan el potencial humano, derrumbando las falsas divisiones y dando oportunidades de educaci?n y acceso al poder a mayores grupos de la poblaci?n.

Lo m?s inveros?mil es que habi?ndonos dado de frente con la realidad, se siguen manteniendo exactamente los mismos patrones de comportamiento. Se desarrollan argumentos para seguir manteniendo las mismas conductas que nos llevaron a esta cat?strofe: contin?an algunas mentes calificando de radicales a aquellos ciudadanos que simplemente pretenden ejercer el derecho ciudadano a manifestarse, a la movilizaci?n o a la expresi?n, ahora con el argumento de que entorpecen el proceso de negociaci?n; contin?an molestos contra aquellos movimientos sociales que no pueden controlar; siguen creando movimientos sociales con el objeto de controlarlos y usarlos y no de impulsarlos; siguen creyendo que la soluci?n viene de fuerzas externas y no de nosotros mismos; y siguen estigmatizando a partidos pol?ticos aludiendo que no son democr?ticos, cuando nosotros mismos no lo hemos sido.

Es por lo anterior que hoy m?s que nunca es relevante que FUNIDES ponga sus esfuerzos para desarrollar estos temas institucionales, pues el imperio del orden bajo la raz?n de unos pocos contin?a siendo un argumento falso, pero tentador, que hay que combatir ya que impera y carcome a diario nuestra sociedad. Bajo esta ?ptica la democracia no fomenta el desarrollo, es m?s bien su competencia.

El papel de FUNIDES ante la crisis nacional
Se dice que las crisis sacan lo mejor y lo peor de las personas, de las instituciones y de las sociedades. Con mucho orgullo puedo decir que en el caso de ustedes los miembros, directores y personal administrativo y de investigaci?n de FUNIDES, sac? lo mejor. Yo me siento m?s que orgulloso de poder decirles que la fundaci?n, como instituci?n, se puso del lado correcto, r?pidamente y con valent?a, al momento de la crisis. En conjunto con la Junta Directiva, tomamos actitudes de liderazgo: No dudamos en participar, como instituci?n, en el proceso de di?logo y negociaci?n; no dudamos en apoyar a la Alianza C?vica por la Justicia y la Democracia (ACJD), cuando desde el primer momento ofrecimos nuestro soporte log?stico; no dudamos apoyar sin ambages a nuestro director ejecutivo en su participaci?n en la Unidad Azul y Blanco; acompa?amos a los estudiantes, el sector m?s desprotegido ante la violencia estatal; hemos hecho todo lo posible por apoyar con asesores de primer orden a nuestros representantes en la Mesa de Negociaci?n del Di?logo Nacional en el ?mbito de comunicaci?n, negociaci?n, justicia transicional, proceso de paz y resoluci?n de conflictos; y seguimos apoyando, dentro de nuestra Misi?n y Estatutos, la salida pac?fica de la crisis para la construcci?n de la democracia y el Estado de Derecho en una sociedad donde haya cabida para todos.

Al final, nuestra instituci?n actu? con sabidur?a, con valores y principios humanos, principalmente por el proceso altamente institucionalizado que hemos implementado para la toma de decisiones, por medio del cual los miembros de nuestra Directiva han sido informados, consultados y tomados en cuenta. Es la sabidur?a colectiva, regida bajo valores y principios, la que tambi?n nos hizo ponernos del lado de las v?ctimas a trav?s del Fondo de Asistencia a las V?ctimas (FAV). Es esta sabidur?a de la colectividad la que debemos fomentar en la sociedad.

Aprendiendo tolerancia y democracia
Pero nuestra instituci?n no trabaj? sola, supo acompa?arse y aconsejarse de aquellos liderazgos que vienen desarroll?ndose en la sociedad. En el FAV trabajamos muy de cerca con m?dicos y personal de diferentes hospitales; en nuestras decisiones trabajamos muy de cerca con varias C?maras del sector privado y organizaciones de la Sociedad Civil que han demostrado su compromiso con la democracia y el Estado de Derecho; en la negociaci?n, trabajando junto con la ACJD y la Unidad Azul y Blanco, estamos aprendiendo de tolerancia y democracia, a no tener miedo a escuchar, entender y comprender ?pticas diferentes a la nuestra; a no estigmatizar o estereotipar opiniones de movimientos pol?ticos con los cuales diferimos; tambi?n hemos aprendido de valor y compromiso en la defensa de los derechos ciudadanos, especialmente de aquellos j?venes que han despertado nuestra conciencia; con el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP) hemos trabajado t?cnicamente muy de cerca para poder elaborar nuestros informes peri?dicos sobre la actividad econ?mica; tambi?n hemos encontrado solidaridad internacional de muchos organismos y pa?ses, as? como recibido de ellos valiosos consejos para guiar mejor nuestro actuar; y as? sucesivamente hemos sido parte de una red de organizaciones y personas que buscamos un mejor futuro para la sociedad. Nos convertimos en la Suiza de Nicaragua, atrayendo a todos los grupos democr?ticos que quieren presentar su punto de vista.

Para 2019, a nuestra nueva Junta Directiva y a nuestras autoridades que estar?n tomando cargo el d?a de hoy, les insto a continuar promoviendo la democracia y el Estado de derecho como elementos intr?nsecos para lograr la reducci?n de la pobreza y el desarrollo econ?mico sostenible.

No somos dem?cratas por nacimiento. Tristemente la democracia no se hereda, se aprende por procesos de socializaci?n, se construye y se cuida d?a a d?a, se tiene que invertir en ella. Y hasta ahora, ni el Estado, ni los partidos pol?ticos han invertido en crear cultura democr?tica, no lo hacen en el sistema escolar, ni en el funcionamiento de los partidos, mucho menos en sus instituciones, pero tampoco lo hacemos en el sector privado.

Sociedad civil, y participaci?n ciudadana en la pol?tica
Es alentador, sin embargo, que la agenda para el di?logo propuesta por la ACJD recoge la necesidad de un r?gimen democr?tico, un Estado de derecho y la justicia, como puerta de salida a la crisis. Igualmente, es alentador el esp?ritu democr?tico que hemos visto con mucho orgullo en las elecciones de AMCHAM y en su manejo institucional. Lo anterior da esperanza que la construcci?n de la nueva Nicaragua justa y democr?tica no parte de cero, pero la experiencia autoritaria vigente exige juntar todos los esfuerzos posibles para propagar esta cultura imprescindible para el desarrollo sostenible de Nicaragua.

FUNIDES debe ser promotor de la sociedad civil y de la participaci?n ciudadana en la pol?tica, pues el m?sculo de estas fuerzas es la mayor barrera ante la dictadura y la fuente de las instituciones inclusivas que promueven el desarrollo econ?mico sostenible.

Les insto a continuar fortaleciendo la institucionalidad e independencia de FUNIDES para enfrentar el monopolio de la raz?n que pretenden tener e imponer los Poderes de Hecho en Nicaragua, que tanto da?o han hecho a nuestro pa?s. Nuestra dependencia debe ser con nuestros valores y principios que est?n en nuestra Misi?n, manteniendo nuestra integridad y objetividad en nuestros estudios.

Para fortalecer nuestra institucionalidad es b?sico evitar la dependencia financiera en unos pocos, especialmente en aquellos que la usan para imponer sus puntos de vista fuera de un proceso de decisi?n participativo, pero para ello es decisivo que cada uno de nosotros incremente su apoyo financiero; tambi?n es importante la rotaci?n de las autoridades, los presidentes deben cambiar cada dos a?os para evitar el uso personal de la instituci?n; debemos mantener nuestra Certificaci?n SGS NGO que asegura la transparencia en el manejo de la instituci?n; el director ejecutivo debe continuar desarrollando equipos de trabajo, reduciendo nuestra dependencia de investigaci?n y comunicaci?n institucional en pocas personas; debemos fortalecer el ?rea de investigaci?n institucional, especialmente el relacionado con la construcci?n de sociedades democr?ticas, como es el tema de la Justicia Transicional como medio para entender la transici?n de una dictadura a una democracia.

FUNIDES debe ser ejemplo en regirse institucionalmente bajo valores, pr?cticas y comportamientos democr?ticos, como son el pensar que todos somos iguales, que cada uno de nosotros es un voto, aunque seamos diversos, que las decisiones deben ser transparentes y participativas y que debemos ser tolerantes con la discrepancia. Estos patrones de pensamiento y valores son propios de la democracia sin los cuales esta no es posible.

Con respecto a la defensa del sector privado, lo que debemos defender es el sistema de mercado libre, la propiedad privada, la libre competencia, y luchar contra sistemas que promueven el abuso en el uso de influencias para competir con ventaja. No somos defensores de empresarios particulares, debemos ser defensores del sistema y por ello debemos proponer pol?ticas p?blicas que adem?s de promover la inversi?n, tambi?n busquen a corto plazo paliar la pobreza que persiste en Nicaragua. El sistema democr?tico, la divisi?n de poderes, la libre empresa, tiene sentido en la medida que da bienestar a la poblaci?n.

Finalmente, quiero felicitar a Juan Sebasti?n Chamorro por su determinaci?n y valent?a demostrada dentro de la ACJD y de la UNAB; a Federico Sacasa por su liderazgo y por su excelente desempe?o en la administraci?n de nuestra instituci?n, donde ha sabido ser l?der indiscutible sin inter?s de figuraci?n, donde ha sabido delegar y fomentar el potencial de nuestro equipo de investigaci?n y, lo m?s importante, tomar decisiones para consolidar nuestra instituci?n dentro de Nicaragua como abanderada de los intereses del sector privado, la democracia y del Estado de derecho; al equipo por el excelente trabajo realizado, logrando mantener la calidad y neutralidad en la investigaci?n; y a Jos? Antonio Baltodano, por ser junto con Federico, mis mayores consejeros en esta confusa tarea de presidente de FUNIDES en medio de la crisis social y represi?n que hemos vivido. Al resto de directores y miembros mil gracias por su solidaridad y apoyo a mi persona; y como dije anteriormente, muchas felicidades a todos por la sabidur?a mostrada en esta situaci?n tan complicada.

*Palabras del presidente saliente de la Junta Directiva de FUNIDES en su Asamblea ordinaria, 2 de mayo 2019


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