Enumeremos las mentiras y difamaciones de Moreno, expliquemos la versión real de los hechos y sepamos en todas partes divulgar los verdaderos acontecimientos:
Primera mentira: Que el gobierno está dialogando con el movimiento.
Segunda: Que Correa y el correísmo conducen el movimiento.
Tercera: Que los manifestantes están provocando caos.
Cuarto: Que quieren sacarlo del gobierno, se trata de un golpe de estado.
Ecuador y los principales métodos de propaganda diversionista del gobierno:
Primero: Que el gobierno estás dialogando con el movimiento indígena.
La Conaie, Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, acaba de desmentir las insidiosas noticias de que el gobierno está negociando, noticias que se multiplican en diferentes periódicos evidenciando un eficiente servicio de prensa que ha subordinado algunos medios a sus intereses haciendo ver que los indígenas son cochinos y negocian por fuera de la protesta.
Segundo: Que Correa y el correísmo conducen las manifestaciones.
Esta mentira tiene por objetivo hacer ver una polarización política en las protestas, siendo efectivo que Correa desde Europa intenta sacar tajada y que su gente ha salido a manifestar, pero los manifestantes han dejado claro en pancartas y declaraciones que no están ni con uno ni con el otro.
Tercero: Que los manifestantes están provocando caos.
En efecto los correístas han aprovechado de “empujar” las movilizaciones acudiendo a medidas violentas y agitativas, pero ya han sido detectados y el movimiento indígena ha decidido iniciar allí mismo procesos de justicia comunitaria para quienes hagan actos violentos como saqueos o similares, aunque todo el mundo sabe que ellos saben diferenciar a los correístas de los moradores de los barrios periféricos.
Cuarto: Que el movimiento indígena quiere sacarlo del gobierno, que se trata de un golpe de estado.
La Conaie sabe que la escuela de cuadros o seminario político que está haciendo el pueblo en las calles está enseñando que el mejor gobierno está abajo, pues ya han sido traicionados innumerables veces y han declarado que seguirán manifestando hasta que el gobierno derogue el alza de combustibles, lo que el gobierno no puede hacer pues tendría que caer en quiebra. Los militares saben que no podrán contener a esa masa multitudinaria de población que presenta las cosas tan claramente en las calles y se han lavado las manos declarando su neutralidad en los actuales sucesos dicendo claramente al gobierno que no se van a ensuciar y que tendrán que encontrar la solución. Por otra parte los milicos advierten a los indígenas que los responsables de cualquiera situación que ocurra tendrán que afrontar las consecuencias.