La Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

Ante el espectáculo de la oposición guaidoísta

Las muy amplias denuncias que distintos actores políticos identificados en el reconocimiento del liderazgo del Diputado Juan Guaidó, Presidente de la Asamblea Nacional, han venido realizando en los últimos días en relación a manejos mafiosos desde posiciones de poder, de dineros públicos y tráfico de influencias, más allá de la credibilidad que posean estos denunciantes por su trayectoria, han constituido una nueva frustración para muchos venezolanos que, con la desesperación por el desastre a que nos ha conducido el gobierno de Nicolás Maduro, habían cifrado muy equivocadamente sus esperanzas en quienes, abiertamente, abrían las puertas de nuestra patria a una intervención militar extranjera y que ahora se muestran desnudos en su corrupción.

Es común escuchar a la gente en las calles decir: “YA NO SE PUEDE CREER EN NADIE” y ese es, precisamente, el sentimiento que los grandes intereses transnacionales del Capital necesitan instalar en nuestra sociedad, intereses que están más allá de lo que comúnmente es visible, se encuentran, por ejemplo, detrás del gran desastre del Arco Minero del Orinoco, asesinando a nuestra gente y a nuestra tierra para negociar con el oro, diamantes, coltán, torio, litio, etc. y que ahora pretenden extenderlo a todo el país, sin que se escuchen voces en contra por parte de esa presunta oposición; son los que se benefician de la quiebra de prácticamente TODAS las empresas del Estado, participando en la rebatiña que ya está comenzando.

Hoy el problema fundamental es que las instituciones republicanas se encuentran pulverizadas; el Estado de Hecho desplazó al Estado de Derecho, nada funciona, la incapacidad y la desidia parecen haberse multiplicado y se encuentran al frente de los partidos de la oposición guaidoísta y en su autoproclamado Gobierno, y también, en grado sumo, en los partidos en el gobierno de Nicolás Maduro y, obviamente, en las empresas que unos y otros manejan. Mientras se denuncian mutuamente, ambos se benefician con el formidable negocio de las cajas de alimentos, aprovechándose del hambre del pueblo. Sólo funcionan los negocios de unos y de otros mientras el país se derrumba.

Ese “YA NO SE PUEDE CREER EN NADIE”, esa desesperanza, peligrosamente conduce a la inacción por resignación; es el caldo de cultivo para la entronización en el poder de los peores regímenes que ha conocido la especie humana.

Ante ello, sólo una conducta es correcta: la organización del pueblo para impedir la disolución de la Patria. Trabajar juntos por un movimiento de reconstrucción nacional conformado por organizaciones sociales y políticas diversas, articuladas alrededor de la defensa de la soberanía popular y nacional, de la reinstitucionalización del país, y de una salida a la crisis, soberana, pacífica y constitucional.

¡¡¡CONTRA LA CORRUPCIÓN: AUDITORÍA PÚBLICA Y CIUDADANA!!!

¡¡¡NO A LA IMPUNIDAD!!!

Santiago Arconada     Juan García     Edgardo Lander     Gustavo Márquez     Oly Millán     Esteban Mosonyi     Héctor Navarro     Ana E. Osorio