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La izquierda abertzale llama a responder ante las «agresiones de París y Madrid»
·Emprenderá una «nueva dinámica» con dos convocatorias nacionales en Bilbo y Baiona
La izquierda abertzale ha convocado el próximo lunes dos movilizaciones nacionales en Bilbo y Baiona, iniciando así una «nueva dinámica movilizadora» para denunciar «la permanente agresión que sufre Euskal Herria por parte de los estados español y francés». La iniciativa tendrá su continuación a partir del 1 de marzo, ya que cada quince días la protesta llegará a todas las localidades. Joseba Permach consideró que «ya ha llegado el momento de salir a la calle».
BILBO
Una amplia representación de la izquierda abertzale compareció ayer en Bilbo para dar a conocer una «nueva y constante dinámica movilizadora» que, tal y como explicó el mahaikide Joseba Permach, se prolongará a lo largo de las próximas semanas y meses. La finalidad de la iniciativa consistirá en «denunciar la permanente y general agresión que sufre Euskal Herria por parte de los estados español y francés».
Esa «nueva dinámica» comenzará el próximo lunes en Baiona y Bilbo, donde han convocado sendas movilizaciones de carácter nacional: la primera junto a la Subprefectura y la segunda frente a la Subdelegación del Gobierno español, en la plaza Moyua.
A partir del 1 de marzo, «ya en plena campaña electoral», la izquierda independentista preve iniciar una serie de movilizaciones que se van a celebrar los lunes, cada 15 días, en todas las localidades vascas.
Estos actos llevarán por lema «Euskal Herria aitortu. Errespetatu», ya que, según manifestó Permach, «ante tanta agresión por parte de los estados español y francés tenemos que reivindicar y exigir que respeten y reconozcan que aquí existe un pueblo que tiene derecho a vivir en paz y a decidir libremente su futuro».
El parlamentario de Sozialista Abertzaleak precisó que también emplearán otros lemas, siempre de cara a «denunciar las diferentes realidades que, desgraciadamente, se están dando en estos momentos». Así, explicó que harán uso de la consigna «Espainiar eta frantziar inposaketarik ez», otra referente al «apartheid político» y una tercera acerca de «la situación y conculcación de derechos que sufren los presos políticos».
«Ha llegado el momento de salir a la calle e imponer una dinámica movilizadora constante por parte de la izquierda abertzale», destacó Permach, quien enmarcó esta iniciativa en «la situación que vive Euskal Herria, donde es absolutamente constatable que la apuesta represiva, de guerra, fascista y jacobinista de los estados francés y español para acabar con este pueblo se ha multiplicado en estos últimos años».
Incidió en que la movilización del próximo día 1 estará enmarcada en una campaña electoral en la que la izquierda abertzale «no tendrá, una vez más, derecho a presentarse. Aun así, los comicios también deben de servir para dar una respuesta contundente a la agresión permanente que padecemos».
La presencia en las urnas se materializará por medio de una papeleta en la que «hacemos mención explícita de cuáles son las agresiones que padece este pueblo», añadió Permach, quien instó a la ciudadanía a dar «una respuesta el 14 de marzo».
Otegi ve factible un encuentro entre abertzales
GARA
BILBO
El mahaikide Arnaldo Otegi manifestó ayer que ve factible un encuentro entre las formaciones abertzales tras los comicios del 14 de marzo a las Cortes españolas, y aseguró que la izquierda abertzale mantendrá «una postura de firmeza en sus principios y de flexibilidad en las soluciones», porque «nos estamos acercando al debate real y así es como se soluciona este conflicto».
En declaraciones a Radio Euskadi, consideró «erróneo pensar que el problema de Euskal Herria radica en el fin de ETA», e indicó que quien «más apología de la lucha armada hace es el Estado español porque cierra todas las puertas».
Así, se refirió a que el delegado del Gobierno español en la CAV, Carlos Urquijo, haya enviado a la Fiscalía de Donostia sus manifestaciones del día 7 en el Kursaal y las de Itziar Aizpurua llamando a la manifestación contra la tortura. Una actuación que, según dijo, responde a «un afán persecutorio».