Las mujeres del noreste de Siria ahora pueden participar en reuniones sociales relacionadas con asuntos políticos y tribales.

Una funcionaria cristiana siria de la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES), que gobierna la zona, acogió con agrado la nueva medida, diciendo que contrarresta siglos de marginación de las mujeres en la región.

“En Oriente Medio, las mujeres sólo están en casa y los hombres tienen papeles más importantes”, dijo a Al Monitor Elizabeth Gawryie, diputada del Consejo Ejecutivo de la administración. “Pero las mujeres deben tener igualdad y derechos”.

La semana pasada, la líder kurda de Rojava Ilham Ahmed tweeteó que se permitiría a las mujeres participar en las reuniones conocidas como “al madhafah”. Ahmed es la co-presidenta del Comité Ejecutivo del Consejo Democrático Sirio (MSD). El consejo es el ala política de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), un grupo respaldado por los Estados Unidos que controla el territorio en el noreste de Siria. Las fuerzas están lideradas por kurdos, pero también incluyen una serie de grupos cristianos y árabes.

Las reuniones de las que habló Ahmed son de líderes masculinos locales, que discuten asuntos políticos. Partes del noreste de Siria tienen tribus prominentes que ejercen una influencia significativa sobre la comunidad. Su papel es importante en el noreste de Siria porque las FDS suele negociar con las tribus, que están políticamente divididas.

Algunas mujeres en el noreste de Siria se sienten empoderadas por las noticias. Gawryie dijo que es optimista de que las mujeres tendrán más voz en los asuntos políticos ahora. “Nuestro objetivo es que las mujeres participen, especialmente en la política”, añadió.

Las mujeres ya tienen una relativa libertad en el noreste de Siria, según Gawryie. Señaló el papel de las mujeres en los grupos militares sirios, por ejemplo. (El gobierno sirio sólo exige que los hombres sirvan en el ejército y los grupos rebeldes sirios están formados únicamente por combatientes varones).

El noreste de Siria ya tiene un grado de igualdad en general, dijo, señalando también la disponibilidad de educación en kurdo, árabe y asirio, una forma de arameo hablado por los cristianos.

“Nosotros -junto con los kurdos y los árabes- hemos construido una administración con derechos generales para la sociedad”, dijo Gawryie. “Hay igualdad de derechos y deberes. Hay derechos para el árabe, el kurdo y el siríaco”.

#WomenDefendRojava es una campaña que apoya a las mujeres del noreste de Siria, a las que los kurdos se refieren como Rojava. Stera Abdo, portavoz del movimiento, coincidió con Gawryie en que las mujeres ya tienen voz en la política del noreste de Siria. Muchas instituciones en el noreste de Siria tienen líderes duales que permiten que un hombre y una mujer los dirijan. También hay una cuota de género del 40% para todas las instituciones y organizaciones de la administración autónoma, dijo a Al Monitor.

Las mujeres ya discutían sobre política con las tribus, lo que hacía que su participación formal en las reuniones de “al madhafah” fuera un desarrollo lógico, según Abdo. “Podemos imaginar que el pensamiento de las tribus está cambiando lentamente. Los líderes tribales ya están sentados alrededor de una mesa con mujeres políticas y discutiendo, así que es sólo un paso más para que las mujeres de las tribus se involucren”.

Hay algunos problemas que enfrentan las mujeres en el noreste de Siria, dentro y fuera del territorio de las FDS. El año pasado, Human Rights Watch informó que las mujeres afiliadas al Estado Islámico (ISIS) no pueden salir del campo de Al Hol, controlado por las FDS, excepto en casos de emergencia. Las FDS temen que los residentes puedan rebelarse en el campo, y muchos siguen siendo leales a ISIS. Las FDS han pedido repetidamente a los países que recuperen a sus ciudadanos allí.

Recientemente, se han producido varios secuestros de mujeres en Afrin, que los grupos rebeldes sirios apoyados por Turquía le quitaron a las FDS en 2018. En un debate con los periodistas la semana pasada, Ahmed también dijo que el Consejo Democrático Sirio es consciente de la cuestión del abuso de las mujeres durante la crisis del coronavirus en el noreste de Siria. “En el contexto del coronavirus, estamos tratando de realizar un esfuerzo de investigación sobre las implicaciones para las mujeres durante la pandemia en lo que respecta a la violencia contra las mujeres”, señaló.

El aumento de la violencia contra las mujeres durante el bloqueo relacionado con el virus es un problema en todo el Oriente Medio y el mundo.

El consejo está trabajando para ayudar a la gente a hablar sobre el tema, según Ahmed. “En la sociedad de Oriente Medio en general, es menos probable que la gente hable”, añadió. “Puedo decir que se han abierto personas que no lo habrían hecho antes”.

FUENTE: Adam Lucente / Al Monitor / Traducción: Rojava Azadi Madrid