Con la debida distancia y con cubrebocas, pero no en silencio, integrantes de la Unión de Comunidades Indígenas de la Zona Norte del Istmo (Ucizoni), se plantaron frente a las oficinas de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para exigir al Presidente la cancelación del megaproyecto corredor interoceánico ya que, dijeron, sólo beneficiará a las grandes empresas extranjeras y grupos de poder mexicanos
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Los inconformes advirtieron que el gobierno federal ha violentado los derechos de los pueblos indígenas
, y demandaron que cese la represión y los operativos de corte de energía eléctrica en el Istmo y en Candelaria, Campeche, donde hay movimientos de resistencia contra las altas tarifas.
La grave situación sanitaria que atraviesa la región ha sido denunciada en los pasados días, sobre todo en el municipio de Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, donde Mario Quintero, de la Asamblea de Pueblos en Defensa de la Tierra, señaló que en el panteón están excavando hoyos con retroexcavadoras para enterrar a quienes han fallecido, pues ya no hay cupo en el cementerio. Mientras en el hospital se contagiaron 140 trabajadores del sector salud. Aquí, dice el activista, están muriendo entre siete y ocho personas todos los días.
La Ucizoni coincide en la gravedad de la emergencia, por lo que este viernes exigieron la instalación de un hospital Covid, ya que, aseguran, las muertos que ellos cuentan no coinciden con los números oficiales. Hace un año el Presidente prometió en el municipio de Matías Romero la construcción de un hospital de especialidades del que aún no se sabe nada, por lo que la gente está muriendo en sus casas. En el istmo, señala el organismo, se vive una tragedia, pero el gobierno federal al parecer tiene prioridades que no toman en cuenta a nuestros pueblos
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