Desempleo en San Pedro
Cesantes comenzaron una huelga de hambre
Son 90 los afectados representados por seis mujeres y dos hombres que dijeron pedir empleo y no limosna.
Seis mujeres, todas jefas de hogar, y dos hombres estaban postrados en la sede de la Confederación de Trabajadores Forestales de Chile, que prestó el lugar en calle Rengo, en Concepción, debido a que la sede de la CUT, donde en un principio quería realizarse la protesta, estaba cerrada. Los 90 desempleados corresponden en su mayoría a mujeres que mantienen su hogar, y que trabajaban bajo un programa del Fondo Solidario de Absorción de Cesantía (Fosac), y Pro empleo. Los afectados piden que se reanuden sus trabajos lo antes posible, ya que es su única fuente de ingreso.
Este acto se suma a las protestas que resultaron con detenidos, y a la toma de la Municipalidad de San Pedro, ocurridas la semana pasada. Según explicó el presidente del sindicato de trabajadores eventuales transitorios y de servicio de San Pedro, Orlando Vera Delgado, la huelga de hambre se debe a la respuesta negativa del Gobierno a la continuidad de los trabajos que ellos realizaban.
La medida dejó cesantes a 90 personas, de las cuales 75 son mujeres jefas de hogar, y 15 hombres. Todos ellos recibían 73 mil pesos mensuales por sus labores. “Estamos muy preocupados por nuestro futuro, lo único que pedimos es que nos vuelvan a dar empleo”, dijo.
Sandra River Maldonado, de Boca Sur, dijo que “yo trabajaba como guardia en un jardín infantil, y así podía mantener a mi familia, ahora no sé que voy a hacer para poder matricular a mis hijos al colegio”, manifestó.
Patricio Fernández Alvarez, secretario de la junta de vecinos número 60 de Santa Cecilia de Talcahuano, hizo un llamado a la Gobernación para que tome conciencia y escuche a la gente de los sindicatso de San Pedro, “que vea a los niños que están sufriendo y se ponga la mano en el corazón, si es que también es padre de familia”, dijo.
“Nosotros vamos a llegar hasta las últimas consecuencias para que nos devuelvan los empleos, porque tenemos que hacer algo por nuestros hijos. No pedimos limosna, sino trabajo”, aseguró Ana Cáceres Montecinos. Agregó que tuvo que dejar a sus hijos botados para luchar de la manera en que lo está y seguirá haciendo.