¡La Comuna Vive! Respuestas John Holloway 1. ¿Cómo se caracteriza la situación del ‘régimen dominante’ hasta diciembre de 2019? Por “régimen dominante” entiendo el capital, este sistema absurdo y violento deorganizar la vida humana. La dinámica de este sistema nos está llevando hacia laextinción. Lo tenemos que parar.Una fuente de esperanza es la fragilidad del capital. Su expansión en los últimostreinta años ha sido basada en la expansión del crédito. Es decir que la acumulacióndel capital es cada vez más ficticia, cada vez más basada en la anticipación de unaexplotación que todavía no se ha logrado cumplir. Para reproducir su dominio sobrenosotra/os, el capital necesita crear un mundo ficticio y frágil. Esta fragilidad semanifestó pero no se resolvió con la crisis financiera mundial de 2008. En diciembre de2019, ya antes de la pandemia, se decía que el sistema capitalista estaba al borde deuna crisis mucho mayor que la de 2008. Podemos pensar en esta fragilidad como una fuente de esperanza, pero tambiénse expresa como desesperación, volatilidad y violencia por parte del capital. Loscapitalistas y sus gobiernos se sienten forzados a intensificar su agresión contra lahumanidad. En eso pierden a veces la medida (la medida de su violencia normal) yprovocan nuestras resistencias-y-rebeldías. De ahí las grandes revueltas que hemosvisto en el último año en Chile, Francia, Hong Kong, todas estas explosiones de rabialatente y volcánica que menciona Luis. Cada explosión es un recuerdo de que laexistencia del capital es una agresión-hasta-la-muerte-de-la-humanidad y quenosotra/os no lo vamos a aceptar.2.¿Cómo impactaron esa situación el COVID-19, el 8 de marzo, Floyd?De la fragilidad del capital hemos llegado al fracaso. El fracaso del capital seestá haciendo evidente como nunca. La pandemia es una pandemia capitalista,resultado de la destrucción capitalista de la relación entre humanos y otras formas devida. La crisis económica que apenas está empezando y que probablemente va a sermás devastadora que cualquier crisis previa, no es resultado de la interrupción deactividad causada por la pandemia sino sobre todo de la acumulación masiva de deudaantes del coronavirus. Como dice Sergio en su respuesta, refiriéndose a la entrevista con las mujereschilenas, se ha vuelto claro que el capital es incapaz de asegurar la reproducción de lavida para gran parte de la población mundial. Ya no tiene ninguna justificación, ningunarazón de existir.Aún si no estamos saliendo a la calle de la misma manera, es muy probable queen los meses y años que vienen veamos más y más explosiones de frustración, derabia, de ¡ya basta!, como en el caso de las protestas en Estado Unidos.3. ¿Qué hacer ahora? ¿De qué relevancia es la Comuna?¿Qué hacer ante el fracaso manifiesto del capital?Primero: reírnos, como el niño en el cuento. El emperador no trae ropa, el capitales incapaz de cumplir sus promesas de bienestar. ¡Jajaja y hay que bailar!Segundo: decir ¡Ya basta! Ya vete capital, ya tuviste tu época, eres un fracaso.Tercero: Llenar el ¡ya basta!, como lo hacen los zapatistas, el movimiento enKurdistán y tantos otros movimientos. Si el capital no puede asegurar la reproducciónde la vida, lo tenemos que asumir nosotra/os, no hay de otra. Aquí entran tantos ytantos ejemplos de lo que se está haciendo ahora en medio de la pandemia, como enel caso de las mujeres chilenas, como los casos explorados por Marina en su libro,como todos los casos que van a salir en las discusiones de estos días.Cuarto: Todo esto es ya la comuna. Es un asumir comunal de nuestraresponsabilidad de salvar y recrear la vida, en un proceso que no puede caer en elendurecimiento de la Tradición sino que se tiene que ir negando y reinventando todo eltiempo. Como dicen Edith y Panos. Como hicieron la/os comunera/os de Paris
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