EL ORIGEN DEL PATRIARCADO.
4ª PARTE DE LOS TALLERES-CONVERSATORIOS VIRTUALES CON JAIME YOVANOVIC (PROFESOR J)
No es el hombre que se apropia de la mujer, sino el hombre-propietario que quiere trascender más allá de la muerte dejando la propiedad al hijo propio, que sólo podía serlo si usaba una mujer para producir al crío de forma exclusiva y sin interferencia de otro varón-semental, como los esclavos que se castraban para no engendrar hijos. Así la lucha del feminismo no es contra los hombres ni para competir puestos en la estructura patriarcal del partido y del estado, sino por el fin de la propiedad de las unidades productivas a las que se subordinan las unidades reproductivas, en principio por la fuerza, pues la mujer se vendía en la ceremonia que la convertía en mater, el matrimonio, y la hacía pasar a formar parte de las propiedades del pater familias, el patrimonio, donde ejercía la dominica potestas, o potestad de dominio, la jefatura del hogar, el domos, donde gobierna sobre el conjunto de los famulus (siervos, sirvientes, esclavos) que se denomina familia, es decir, el cerco o coto exclusivo del señor patriarca que usa los famulus que están a su servicio. Ese es el poder social del patriarca sobre todos los demás en las dos unidades, la productiva y la reproductiva.
Pero los esclavos y las mujeres resisten y se escapan, siendo capturados por otros propietarios que se niega a devolver ese animal parlante al primero, lo que genera conflictos que llevan a los propietarios a unirse naciendo así la clase social que ejerce el dominio sobre el resto en lo que se llama poder político y deben generar un aparato orgánico que cobre los impuestos y pelee las guerras, naciendo el estado con el llamado poder público.
Hasta aquí la introducción que desarrollaremos y conversaremos este lunes 23 de noviembre a las 19:30h.
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