Han pasado 20 años desde el día en que las autoridades y comunidades de Çxhab Wala Kiwe nos reunimos en El Tierrero, resguardo de Huellas, para darle vida formalmente a la guardia indígena como aquella estructura propia y comunitaria para el control territorial y la construcción de paz. Pero nuestra lucha es milenaria. Como kiwe thegnas recogemos los pasos desde la Gaitana hasta Quintín, quien dijo en su tiempo: “una columna formará un puñado de indígenas el día de mañana para reivindicar sus derechos”. Y aquí estamos. Somos guerreras y guerreros milenarios, caminantes de la palabra.
En el andar del tiempo hemos demostrado nuestra vocación de paz, como defensores de la vida y el territorio. Los mandatos comunitarios nos han orientado a la protección de la comunidad, recorrer los espacios de vida, recoger las enseñanzas de los mayores y sembrar la semilla de la resistencia en las nuevas generaciones.
Cumplimos estos 20 años en medio del gran Paro Nacional Indefinido, una experiencia que se suma a una historia de luchas. En el proceso hemos tenido grandes aprendizajes. Hoy sabemos que defender la vida significa mantener el equilibrio y la armonía en comunidad, cuidar el valor fundamental para nuestra pervivencia como pueblo. También sabemos que defender el territorio significa vivenciar los principios de unidad, tierra, cultura y autonomía, para garantizar el wët wët fxi’zexi desde lo espiritual y lo comunitario.
Con estas orientaciones hemos crecido en todos los territorios. La guardia se ha fortalecido en lo operativo, en lo humanitario, en lo espiritual y en lo político. Contribuimos al proceso comunitario desde el acompañamiento a las autoridades. Por esta convicción enraizada en nuestro proceso de lucha y en nuestra cosmovisión, han sido asesinados valiosos compañeros y cegadas muchas esperanzas de paz. Recordamos aquí a nuestros compañeros de lucha que hoy nos acompañan desde el otro espacio:
PEDRO PASCUE
LORENZO LARGO
MILCIADES TROCHEZ
BELARMINO CHOCUÉ
JOSE LIBARDO PACHO
DANIEL COICUÉ
MANUEL ANTONIO TUMIÑA
GERARDO VELASCO
GERSAIN YATACUÉ
KEDVIN MESTIZO COICUÉ
EUGENIO YOSANDO TENORIO
TORIBIO CANAS
ASDRUBAL CAYAPÚ
ELIODORO FINSCUE
JOSE GERARDO SOTO
JAMES WILFREDO SOTO
JAIVER GIRON TRIVIÑO
Recordamos sus nombres para continuar la lucha. Viven en nuestra memoria y en nuestras acciones. Con sus crímenes han querido destruir al movimiento indígena, pero seguimos con la fuerza de la unidad y la tierra. Recordamos también a las decenas de kiwe thegnas heridos en las movilizaciones, en la liberación de la madre tierra y en el cuidado cotidiano del territorio. Reconocemos su entrega y sacrificio por nuestros derechos. Son niños, niñas, mujeres, hombres, mayores y mayoras que han enfrentado a quienes quieren imponer su proyecto de muerte.
En el proceso no solo hemos tenido pérdidas; también hemos cosechado frutos. Hoy nuestro camino ha contribuido a fortalecer procesos de guardia en otros sectores de la sociedad: se ha fortalecido la guardia cimarrona, la guardia campesina, y también algunos procesos urbanos de guardia. El reconocimiento a los kiwe thegnas ya no solo existe en las comunidades, sino también a nivel nacional e internacional, tal y como lo vimos en los puntos de resistencia en Cali durante este paro. Esto demuestra que la resistencia por fuera de las armas es posible y es el camino, siempre desde la orientación de la comunidad.
Resistimos porque sembramos paz en los territorios. Resistimos porque estamos convencidas y convencidos que es posible construir una verdadera autonomía. Resistimos porque la pervivencia es una lucha constante. Resistimos proyectando los próximos 20, 50, 100 años de kiwe thegnas, sintiendo y pensando cada paso, con el mandato de la asamblea, defendiendo la vida “mientras no se apague el sol”.
¿Quiénes somos? ¡Kiwe thegnas!
¿Qué defendemos? ¡La vida y el territorio!
¡Guardia, guardia! ¡Fuerza, fuerza!
28 de mayo de 2021
Cumpliendo un mes de movilización en el Paro Nacional, 20 años como kiwe thegnas y más de cinco siglos de resistencia