El presidente, de 53 años, estaba en el poder desde febrero de 2017 y había denunciado amenazas al Gobierno del país.
El presidente de Haití, Jovenel Moïse (53 años), ha sido asesinado la madrugada del miércoles en su residencia privada, según ha confirmado la oficina del primer ministro interino del país. Un grupo de personas armadas sin identificar habría irrumpido en la residencia alrededor de la una de la madrugada, disparándole fatalmente. La primera dama, Martine Moïse, ha sido herida de gravedad y trasladada a un hospital.
La noticia ha sido anunciada en un comunicado firmado por el primer ministro interino, Claude Joseph, también ministro de Exteriores, y retransmitido en la radio local. “Alrededor de la 1:00 horas de la mañana, de la noche del martes 6 al miércoles 7 de julio de 2021, un grupo de individuos no identificados, algunos de los cuales hablaban en inglés y español, han atacado la residencia privada del presidente de la República e hirieron de muerte al jefe de Estado“, asegura Joseph en el comunicado, en el que también llama “a la población a la calma”.
Pocas horas después, el primer ministro interino ha declarado el estado de sitio en el país. Joseph hizo el anuncio en una declaración televisada, rodeado del director de la Policía Nacional, Leon Charles, y otras autoridades, después de presidir un Consejo de Ministros extraordinario.
Tras el asesinato, el aeropuerto de Puerto Príncipe ha sido clausurado y las aerolíneas que vuelan a la capital haitiana suspendieron o desviaron sus vuelos. Tras conocerse la noticia, y la referencia a que los asaltantes serían extranjeros, la vecina República Dominicana ha cerrado su frontera con Haití. El presidente Luis Abinader ordenó el cierre de los cuatro pasos fronterizos con Haití y dispuso el refuerzo de la vigilancia en la zona, según dijo un responsable del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront). República Dominicana y Haití cuentan con cuatro pasos fronterizos oficiales, aunque la mayor parte de la frontera, de cerca de 380 kilómetros de extensión, no cuenta con vallas divisorias.
Desde epidemias hasta ciclos constantes de disfunción política y económica, Haití, la nación más pobre del hemisferio occidental, ha encadenado una crisis tras otra desde el terremoto de 2010 en un país con una larga historia de dictadores y golpes de estado. Sin embargo, el enfrentamiento entre el ahora difunto Moïse y la oposición durante los últimos seis meses ha llevado la de por sí delicada situación del país al límite, con un Gobierno incapaz de proporcionar incluso los servicios más básicos y con una crisis de rampante inseguridad.
Esta semana, el hasta ahora presidente de Haití, Jovenel Moïse, había nombrado a Ariel Henry, antiguo ministro del Interior y uno de los doctores que dirigió la respuesta pública del país contra la epidemia de cólera, como nuevo primer ministro con la tarea de formar un Gobierno de consenso en un país imbuido en una profunda crisis política.
Desde enero de 2020 no ha habido un Parlamento constituido, y Moïse ha estado gobernando por decreto, entre críticas y protestas ciudadanas por presunta corrupción del presidente. Moïse ha estado en el poder desde febrero de 2017, cuando su predecesor, Michel Martelly, dimitió del cargo. La oposición haitiana denuncia que los cinco años de presidencia de Moïse deberían haber terminado el pasado febrero, pero Moïse se ha mantenido en el cargo.
Tras la dimisión del primer ministro Joseph Jouthe el pasado abril, impotente ante el aumento de la violencia en el país, Moïse nombró a Claude Joseph como primer ministro interino “para poder hacer frente a la fuerte crisis de seguridad” hasta el nombramiento cuatro meses después de Ariel Henry. Henry sería el séptimo primer ministro de Moïse.
El país atraviesa una grave crisis de seguridad, firmada por luchas de bandas armadas y un fuerte pico de secuestros. La situación de inseguridad ha forzado incluso al desplazamiento interno de miles de haitianos.
Más de 150 personas han sido asesinadas y otras 200 secuestradas entre el 1 y el 30 de junio pasado en la zona metropolitana de Puerto Príncipe, según reveló este martes un informe del Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos (CARDH). Un informe de Naciones Unidas cifra que solo en el área metropolitana de Puerto Príncipe hay 162 bandas criminales con 3.000 miembros. Están previstas unas nuevas elecciones presidenciales y legislativas para el próximo 26 de septiembre.