«¿Cómo podemos luchar por contener la escala de violencia y despojo?», se preguntan los mayas que asisten a los talleres de formación política comunitaria en el pueblo de Buctzotz, Yucatán. «Sin duda alguna el tema TERRITORIALIZAR nos da la pauta. ¿Y cómo territorializamos? Sencillamente recuperando nuestra identidad y memoria histórica», responden.
Ciudad de México | Desinformémonos. «¿Cómo podemos luchar por contener la escala de violencia y despojo?», se preguntan los mayas que asisten a los talleres de formación política comunitaria en el pueblo de Buctzotz, Yucatán. «Sin duda alguna el tema TERRITORIALIZAR nos da la pauta. ¿Y cómo territorializamos? Sencillamente recuperando nuestra identidad y memoria histórica», responden.
Sentados en círculo, acompañados de música, proyecciones, mapas, videos y audios, los mayas de la Península de Yucatán se reúnen desde enero en talleres de formación política comunitaria para practicar la «territorialización», a través de reflexiones sobre la identidad maya y la sabiduría del pueblo heredada de los abuelos, así como a partir de la información de los mecanismos de las empresas y gobiernos para despojarlos de su territorio.
Los integrantes, en su mayoría jóvenes, buscan hacer frente a las estrategias con las que las instituciones, autoridades gubernamentales y empresarios han invadido sus tierras y cultura, entre las que se encuentran la difusión de información falsa, contratos «amañados» para el uso de tierras y la sustitución de las formas de organización, «generando divisionismo y problemas en las comunidades, y fomentando el individualismo».
«Sin territorio no hay vida ni lengua, y sin lengua en el territorio no hay identidad maya», destaca uno de los defensores que participa en el taller. Es por ello que, añade, «es importante hacer llegar la información a nuestras comunidades», de manera que la defensa se replique a lo largo de la Península de Yucatán.
«¿Cómo te hago entender que el Tren Maya no tiene intenciones de nada para nuestros hermanos mayas, nuestros animales, plantas, agua, aire, nuestros Iik’o’ob? ¿Acaso el tren promueve la vida digna?», se preguntaron los asistentes del último taller, convocado por la Asamblea de Defensores del Territorio Maya, Múuch’ Xíinbal y titulado «La salud de la comunidad maya a partir de su relación con las formas de vida que hay en su territorio».
En sus participaciones, los jóvenes y activistas mayas resaltaron la importancia de conocer la identidad del pueblo y rescatar la sabiduría ancestral para defender la salud, la autonomía y el territorio, y compartieron el aprendizaje a lo largo de estos meses.
«Al principio no sabía nada sobre los diversos temas que actualmente afectan a nuestros pueblos mayas y nuestro territorio, como los megaproyectos que estén ya dentro y los que están por llegar, así como la manera descomunal como el gobierno participa para el exterminio de nuestros pueblos mayas», opinó uno de los mayas en el taller.
«Sé que no es tarde para recuperar mi identidad, mi óol, mi ser para luchar y defender lo que es de nosotros, de nuestra comunidad», aseguró otro integrante.
Los talleres, aseguran los jóvenes mayas, guiados por las palabras de defensores como Pedro Uc y Russell Peba, son una esperanza y un espacio en los que es posible «contribuir con la lucha». Su gran labor, dicen, «es concientizar y transmitir a todos los pueblos mayas de toda la Península, sólo de esa manera podremos impedir este monstruo que nos va invadiendo».