ROSA LUXEMBURG (1871-1919) fue la principal líder y pensadora marxista de la Liga Spartacus (que adoptó ese nombre en homenaje a los esclavos rebeldes de la antigüedad; célula inicial del Partido Comunista Alemán [KPD]). Junto a Luxemburg, en Spartacus militaron Karl Liebknecht (1871-1919), Franz Mehring (1846-1919) y Clara Zetkin (1857-1933, quien propuso el 8 de marzo como día de lucha internacional de las mujeres).

El 9/11/1918 (un año después de la revolución bolchevique encabezada por Lenin en Rusia) comenzó la revolución alemana. Luego de una huelga general, la clase obrera proclamó la República y se constituyeron consejos de obreros y soldados revolucionarios. Mientras Kautsky, Hilferding y otros vacilaron, el grupo mayoritario de LA SOCIALDEMOCRACIA (comandado por Friedrich Ebert [1870-1925] y Philipp Schleidemann [1865-1939]) enfrentó con violencia al movimiento revolucionario.

Gustav Noske (1868-1947) fue su Ministro de Guerra, organizando la represión sangrienta de los espartaquistas con ayuda de los oficiales militares del antiguo régimen alemán. El diario socialdemócrata Vorwarts [Adelante] publicó avisos llamando a los Freikorps [”cuerpos libres”, nombre de los comandos terroristas de extrema derecha] para combatir a Rosa y los espartaquistas, ofreciéndoles “sueldo móvil, techo, comida y cinco marcos extra”.

El 15/1/1919 Rosa Luxemburg y Karl Liebknecht son capturados en Berlín. Horas más tarde son salvajemente asesinados, a sangre fría y de modo extrajudicial. Poco después, Leo Jogiches (1867-1919, compañero de amor y militancia de Rosa durante años), también es asesinado.

EL CUERPO DE ROSA ES ARROJADO A UN RÍO PARA QUE NO QUEDE DE ELLA NI UNA TUMBA. Típico método que se volvería famoso con los nazis, Videla, Pinochet, etc. ¿Quién dio la orden de ese asesinato, que adelantó los métodos nazis y fascistas de ocultar los cuerpos masacrados? EL SOCIALDEMÓCRATA FRIEDRICH EBERT y su ministro NOSKE.

(El pensador peruano José Carlos Mariátegui relata los hechos en su artículo “La Revolución alemana”; el historiador argentino Osvaldo Bayer retrata la miseria moral de Friedrich Ebert en su artículo “Rosa, esa mujer”).

Es público, hoy lo sabe todo el mundo, pues sale en diversos medios de prensa: en 2022 la principal fundación alemana que reparte millones de euros en Nuestra América, cooptando intelectuales y artistas, atacando a Cuba, Venezuela, Bolivia, etc. (operando también en Argentina donde “regalan” abundante dinero a quien se deje comprar) se llama FUNDACION FRIEDRICH EBERT…

Triste homenaje al asesino de Rosa Luxemburg. ¿Quien acepte su dinero puede considerarse “de izquierda”, “marxista”, “progresista”, “democrático”, “feminista”, “pluralista”, “multicultural”? ¡Por favor!

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