Nos vemos en todo el territorio nacional como pueblos que resisten a la guerra abierta, militar, paramilitar y a través de los cárteles criminales; y entendemos que este gobierno en turno no solo garantiza la impunidad a las fuerzas armadas, sino que, militarizando peligrosamente al país, las pone al frente de la seguridad y de actividades que deberían ser tarea de civiles, las pone a proteger los grandes megaproyectos capitalistas y los intereses de los Estados Unidos de América, mientras permite que las bandas criminales se apropien del territorio nacional.
Congreso Nacional Indígena |
Colectivos, organizaciones, comunidades e individuos que nos asumimos como parte del Congreso Nacional Indígena en Oaxaca, nos súmanos a la jornada de acción global contra la militarización y la guerra capitalista y patriarcal hacia los pueblos de todo México y del mundo, hacia el EZLN y las comunidades zapatistas y hacia los pueblos originarios de México. A 530 años de la mal llamada conquista de América, nosotras y nosotros no tenemos nada que celebrar, que no sean la resistencia y la rebeldía de los pueblos originarios y de la humanidad entera contra la guerra capitalista y la violencia patriarcal. Desde siempre México enfrenta flagrantes y sistemáticas violaciones a los derechos humanos que se han agudizado en el actual régimen de la 4T. Los homicidios, las ejecuciones extrajudiciales y las desapariciones masivas, así como la represión a estudiantes, mujeres, campesinos, maestros, trabajadores, jóvenes, defensores de los derechos humanos y de la madre tierra, como es el caso de nuestro hermano Samir Flores Soberanes, periodistas, activistas y pueblos originarios son constantes y crecientes; y van desde el hostigamiento y amenazas, hasta el despojo, el desplazamiento, la tortura, la prisión política, la desaparición, el homicidio y el feminicidio. Son innumerables las formas de guerra que enfrentamos los pueblos de México. Escuchándonos, nos vemos en todo el territorio nacional como pueblos que resisten a la guerra abierta, militar, paramilitar y a través de los cárteles criminales; y entendemos que este gobierno en turno no solo garantiza la impunidad a las fuerzas armadas, sino que, militarizando peligrosamente al país, las pone al frente de la seguridad y de actividades que deberían ser tarea de civiles, las pone a proteger los grandes megaproyectos capitalistas y los intereses de los Estados Unidos de América, mientras permite que las bandas criminales se apropien del territorio nacional con el propósito de sembrar el miedo y la desorganización para permitir la proliferación de jugosos negocios mineros, energéticos, inmobiliarios o de tráfico de seres humanos en una abierta GUERRA EN CONTRA DE TODOS LOS PUEBLOS DE MÉXICO. Estos megaproyectos y estos negocios son apostados en la geografía nacional y, sobre todo, en los territorios indígenas; espacios en los que desde hace algún tiempo crecen galopantes la criminalidad, el alcoholismo, la drogadicción y, por supuesto, la destrucción de la Madre Tierra, así como la pobreza y la explotación humanas.
Por todos estos hechos que enunciamos nos pronunciamos diciendo:
Alto a la guerra contra el EZLN Alto a la guerra capitalista en México y en el mundo Alto a la guerra hacia los pueblos originarios Alto a la militarización Alto a la violencia hacia las mujeres Alto a los asesinatos y feminicidios Alto al despojo de los territorios y de la madre tierra Alto a las desapariciones Libertad a los presos políticos Exigimos Justicia
ATENTAMENTE
Nunca más un México sin Nosotros y Nosotras Nuestra lucha es por la vida en contra de la muerte Por la Reconstitución Integral de nuestros Pueblos |