Clajadep :: Red de divulgación e intercambios sobre autonomía y poder popular

Imprimir

Nicaragua: Dora Téllez, un simbolo molesto para la dictadura

Brecha :: 30.10.22

El gobierno de Daniel Ortega continúa con la persecución a la oposición y los movimientos sociales. La huelga de hambre de Dora Téllez una de las históricas dirigentas sandinistas, hoy prisionera del régimen, es una nueva muestra de una resistencia que no se doblega.

Nicaragua: Dora Téllez, un simbolo molesto para la dictadura


14/10/2022

El gobierno de Daniel Ortega continúa con la persecución a la oposición y los movimientos sociales. La huelga de hambre de una de las históricas dirigentas sandinistas, hoy prisionera del régimen, es una nueva muestra de una resistencia que no se doblega.

Más de un año lleva presa Dora María Téllez en la cárcel nicaragüense conocida como El Nuevo Chipote. Más de un año en condiciones tan duras –aislamiento total, pésima alimentación, visitas muy esporádicas de familiares y abogados, por ejemplo– que a fines de setiembre inició una huelga de hambre junto con otros dos presos políticos. Lo que ella pide es que cese el aislamiento y que le permitan acceder a material de lectura. Otro de los huelguistas, Miguel Mendoza, reclama que lo dejen ver a su hija, a la que no ve desde que fue detenido, hace unos 16 meses.

Téllez no es cualquiera en la historia política reciente de Nicaragua. No es cualquiera tampoco en la historia del sandinismo. Comandante guerrillera durante la lucha contra la dictadura de los Somoza (la llamaban Comandante 2), fue quien lideró, como jefa del Estado Mayor del Frente Norte, la toma de León, la segunda ciudad del país, un episodio clave en el proceso revolucionario. Antes había combatido en Managua y en las montañas y la selva. Se había integrado muy joven al Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), luego de haber estudiado medicina y haberse formado como cirujana de guerra en Cuba. Tras el triunfo de la revolución fue ministra de Salud, en el marco de un gobierno cuyas principales figuras acabaron siendo purgadas del FSLN cuando este terminó en manos de la pareja Daniel Ortega y Rosario Murillo, actuales presidente y vicepresidenta de Nicaragua. Fue también vicepresidenta del Consejo de Estado y diputada, y nunca abandonó la militancia social y la producción intelectual. La universidad francesa Sorbonne Nouvelle le otorgó un doctorado honoris causa por su «excepcional trayectoria política y científica».

Su disidencia con el oficialismo sandinista comenzó hace largo tiempo, en los años noventa, cuando el aparato orteguista terminó de apoderarse del FSLN y comenzó a implementar alianzas sociales y políticas diametralmente opuestas a las que defendía en los setenta. En 2008 Téllez ya había protagonizado una huelga de hambre en pleno centro de Managua para denunciar alguna de las tantas redadas represivas lanzadas por Ortega, que estaba entonces en su segundo mandato.

La rebelión social de 2018, cuya represión causó centenas de muertos, la encontró en primera fila. Fue detenida en junio de 2021, poco antes de las elecciones de noviembre y después de una nueva oleada de protestas callejeras contra las políticas del gobierno. La condenaron a ocho años de prisión. Téllez siguió así el camino de muchos otros exsandinistas para quienes el FSLN actual es una fotocopia de pésima calidad de aquel que se había propuesto construir una nueva Nicaragua y que concentraba el odio del gran empresariado, los sectores más ultramontanos de la Iglesia y Estados Unidos. Al detenerla, la acusaron de «traición a la patria», el mismo delito que le endilgaron a otra serie de exsandinistas que marcharon a la cárcel junto con ella, como el general Hugo Torres y el excanciller Víctor Hugo Tinoco. Torres, que en 1974 participó en una operación militar que derivó en la liberación de presos sandinistas, entre ellos Daniel Ortega, y cuatro años después en la toma del Congreso, junto con Téllez, murió en febrero en la cárcel de El Chipote, sin la atención médica que necesitaba, según denunciaron sus familiares.

Sandinismo sin sandinistas

En su momento, otra excomandante sandinista, Mónica Baltodano, hoy exiliada, dijo que las detenciones de Téllez y Torres pintaban al orteguismo en toda su desnudez. De la de Téllez en particular comentó que era una de las «peores infamias», de un grado similar de «indignidad» que la persecución a la que fue sometido el sacerdote y poeta Ernesto Cardenal, integrante también del primer gobierno sandinista y luego acorralado por el FSLN reconvertido, hasta su muerte, en 2020. «Aquella fuerza que fundó Carlos Fonseca con propósitos de justicia social, liberación y avanzar en la democracia ya no existe. Ha sido pervertida por el orteguismo, así como lo ha hecho con el Ejército, la Policía, el Poder Judicial y todas las instituciones. Todo funciona como una correa del poder familiar», apuntó Baltodano en un escrito en el que denunciaba la situación de Téllez y de otros presos políticos en Nicaragua.

«El problema que los sandinistas tienen con Téllez es que ella sigue siendo sandinista», escribió la semana pasada el escritor y periodista uruguayo Fernando Butazzoni en una columna de opinión (La Diaria, 6-X-22) en la que presenta a la exguerrillera como «quizá la presa política más ilustre de América Latina, la más amenazada y la más radical». Un par de días antes, esta semana, más de 200 académicos y periodistas americanos y europeos (fundamentalmente de Argentina, Francia, México, Canadá, Estados Unidos y Uruguay), ligados en su mayoría a la izquierda intelectual, reclamaron la libertad de Téllez en una carta abierta, la segunda en el mismo sentido en pocos meses (la primera había recibido alrededor de 70 adhesiones).

En junio de 2021, pocos días después de la detención de Téllez, en otra carta pública (difundida por Brecha, 25-VI-22), intelectuales, académicos, dirigentes políticos, militantes sociales identificados comúnmente con la izquierda denunciaban los «zarpazos» represivos de Ortega y, de manera general, el «largo proceso de deterioro» del gobierno nicaragüense y del FSLN, «que registra episodios de corrupción, abandono de principios, enriquecimiento ilícito, maniobras y acomodos junto con la peor derecha, destinados a amasar fortunas y a perpetuarse en el poder».

Retórica vacía

Entre los suscriptores de esta última columna figuraba William Robinson, profesor de Sociología, Estudios Globales y Latinoamericanos en la Universidad de California que en los ochenta colaboró con el primer sandinismo e integró el claustro de la Universidad Centroamericana de Managua hasta 2001. En una entrevista que concedió a la publicación The Real News pocos días después del inicio de la cuarta gestión presidencial consecutiva de Ortega (Viento Sur la transcribió en español, 18-XI-21), Robinson hace un largo análisis sobre el derrotero del sandinismo en el poder, las distancias entre su retórica y su práctica y el tinglado del supuesto enfrentamiento a muerte entre el FSLN y Estados Unidos, alimentado por ambos, pero desmentido en los hechos.

«Desde 2007 hasta 2018 hubo un pacto de cogobierno entre la clase capitalista y Ortega, y el 96 por ciento de la economía de Nicaragua está en manos de la clase capitalista nicaragüense y transnacional», dijo Robinson en la entrevista. «Ortega abrió las compuertas al saqueo del país por parte de las empresas transnacionales. El sector agrario, la industria, los servicios, el sector financiero, todo está dominado por el capital transnacional y sus homólogos nicaragüenses, la clase capitalista y una nueva burguesía sandinista. El círculo más cercano a Ortega-Murillo se ha enriquecido fabulosamente. Han invertido cantidades importantes en las maquilas, esas empresas donde se sobreexplota a la gente. En la agroindustria, en el sector financiero, en el comercio exterior, en el sector turístico. Este círculo íntimo que ahora gobierna el país se ha integrado en la elite nacional, en la clase capitalista del país.»

Estados Unidos se ha acomodado muy bien a este estado de cosas, pautado por la cooperación estrecha de Nicaragua con la DEA (Administración de Control de Drogas en inglés), el Comando Sur o la migra estadounidenses, a pesar –otra vez– de declaraciones que van en sentido contrario. Ninguno de los gobiernos estadounidenses, ni republicano ni demócrata, quiso modificar ese cuadro, que perduró hasta 2018, cuando la represión a las protestas sociales, protagonizadas por la base histórica del sandinismo (campesinos, trabajadores, desocupados, estudiantes) más organizaciones ecologistas y feministas, fue tan brutal que Washington se vio obligado a implementar algunas sanciones ya contempladas en leyes que estaban en vigor, pero no habían sido aplicadas.

Recién en 2018, apunta Robinson, «Washington rompe su estrecha relación con el gobierno». «Pero ni siquiera entonces, ni en los últimos tres años, ha decretado sanciones comerciales contra Nicaragua, y los negocios florecen entre los dos países. Estados Unidos es el principal socio comercial de Nicaragua y este hecho no se ha visto afectado para nada por la retórica antisandinista que emana de Washington. De hecho, desde 2018 el Banco Centroamericano de Integración Económica ha proporcionado al régimen créditos de más de 2.000 millones de dólares. Y, tan solo en 2020 y 2021, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo le han concedido varios cientos de millones de dólares en ayudas. Washington no ha bloqueado ninguno de ellos ni tiene problemas con alguno.» (La guerra en Ucrania, que reforzó la dinámica intervencionista estadounidense, puede estar alternando este marco.)

Dora Téllez no paró de denunciar las inconsistencias del discurso revolucionario del FSLN orteguista. «Era un blanco obvio, cantado, privilegiado», comentó Baltodano.

En defensa de Dora María Téllez. [Declaración – Firmas]

Dora María Téllez es una destacada luchadora política nicaragüense, que participó muy activamente en el derrocamiento del dictador Anastasio Somoza en 1979. Fue ministra de Salud de su país, vicepresidenta del Consejo de Estado de la República, y después diputada electa por voto directo y secreto de la ciudadanía. Fundó el ahora ilegalizado Movimiento de Renovación Sandinista, grupo político opositor al gobierno de Daniel Ortega.

Téllez es historiadora, miembro de número a la Academia de Geografía e Historia de Nicaragua, y miembro correspondiente de la Academia de Geografía e Historia de Guatemala. Ha publicado varios libros, así como numerosos ensayos en revistas de universidades en América Central, Estados Unidos y Europa. Fue nombrada doctor honoris causa por la universidad francesa de La Sorbonne Nouvelle, en atención a “su excepcional trayectoria política y científica”, y por su “compromiso con la justicia social y la democracia”. Ella tiene 66 años y se encuentra en prisión desde junio de 2021 en Managua. En septiembre pasado inició una huelga de hambre para protestar por su encarcelamiento y por las duras condiciones de reclusión que le han impuesto.

Su vida está en serio peligro. Quienes firmamos esta carta cumplimos con un mandato moral y ciudadano, al denunciar una situación gravísima e injusta, que nos duele como militantes por la democracia, la solidaridad y la justicia sin fronteras. Es por ello que, con la urgencia de la hora, nos permitimos alertar una vez más a la comunidad internacional, y también reclamar a las máximas autoridades de Nicaragua la libertad inmediata de Dora María Téllez, una mujer que se ha consagrado a luchar por la dignidad humana y la libertad.

Para adherirse, firmar en change.org

Rodrigo Arim. Uruguay

Rodrigo Arocena.Uruguay

Margarita Alarcon. Cuba.

Gioconda Belli. Nicaragua/USA

Fernando Butazzoni. Uruguay

Gerardo Caetano. Uruguay

Ricardo Ehrlich Uruguay

Belela Herrera. Uruguay

Elena Poniatowska. Mexico

Margaret Randall. USA

Mauricio Rosencof. Uruguay

Raul Zurita. Chile

V, formerly Eve Ensler. USA

C. A. Conrad. USA

Hugo Achugar. Uruguay

Mariana Achugar. Uruguay

Karin Aguilar-San Juan. USA

Ammiel Alcalay. USA

Andres Alsina. Uruguay

Julia Alvarez. USA/República Dominicana

Santiago Alzugaray. Uruguay

Gonzalo Arijón. Uruguay-Francia

Arlene Avakian. USA

V. B. Price. USA

Deborah Barndt. Canadá

Anne Becher. USA

Federico Beltramelli. Uruguay

Francisca Benítez. USA

Nicolás Bentancour. Uruguay

Marcelo Bertalmío. Uruguay

Virginia Bertolotti. Uruguay

Fernando Bertolotto. Uruguay

John Beverley. USA

Elena Bing. Uruguay

Gerardo Bleier. Uruguay

Samuel Blixen. Uruguay

Gay Block. USA

Drago Braco Rotar. Serbia/Francia

Leonel Briozzo. Uruguay

Magdalena Broquetas. Uruguay

Barbara Byers. USA

Daniel Cal Maseda. Uruguay

Hector Cancela. Uruguay

Isabel Carlevaro. Uruguay

Laura Carlevaro. Uruguay

Graciela Carreño. Uruguay

Alicia Casas. Uruguay

Estela Castillo. Uruguay

Daneil Chasquetti. Uruguay

Denis Chavez. USA

Aviva Chomsky. USA

Robert Cohen. USA

Claudia Conteris. Uruguay

Valeria Conteris. Uruguay

Silvia Coriat. Argentina

Leonardo Croatto. Uruguay

Kipp Dawson. USA

Omar Defeo. Uruguay

Carlos Demasi. Uruguay

Ana Denicola. Uruguay

María Díaz. Uruguay

Jeff Dickenson. USA

Bill Doris. Irlanda

Marcelo Estefanell. Uruguay

Gabriela Etcheverry. Canadá

Cecilia Fernández. Uruguay

Miguel Fernández Galeano. Uruguay

Anabel Fernández. Uruguay

Milton Fornaro. Uruguay

Ana Frega. USA

Giotta Fuyo Tajiri. Holanda

Odilia Galván Rodríguez. USA

Rodolfo Gambini. Uruguay

Julio García Murillo. México

Beatrix Gates. USA

Margo Glantz. México

Chellis Glendinning. Bolivia

Elina Gómez. Uruguay

Martin Guevara. España

Soledad Gutiérrez. Uruguay

Jill Hamburg. USA

Horacio Heinzen. Uruguay

Jen Hofer. USA

Genevieve Howe. USA

Patricia Hynds. USA

Laura Janssen. USA

Eduardo Joly. Argentina

Gabriel Kaplun. Uruguay

Leandro Katz. Argentina

Regina Katz. Ecuador

Christie Kelley. USA

Carlos Ketzoian. Uruguay

Sandra Kiersky. USA

Basil King. USA

Ellen Klaver. USA

Taja Kramberger. Serbia/Francia

Paul Lauter. USA

Robert Lawson. USA

Patricia Lema. Uruguay

Enrique Lessa. Uruguay

Aurora Levins Morales. Puerto Rico

Lucy Lippard. USA

Jules Lobel. USA

Roberto López Belloso. Uruguay

Maria Luisa Passarge. México

Cassio Luiselli. México

Carlos Luján. Uruguay

Alicia Lusiardo. Uruguay

Katherine M. Hedeen. USA

Gerard Malanga. USA

Susana Mallo. Uruguay

Susan Martin. USA

Miguel Martínez Asuaga. Uruguay

Gloria Martino. Uruguay

Rose Mary Salum. USA

Gerald McCarthy. USA

Ed McCaughan. USA/México

Mariana McDonald. USA

Peter McLaren. USA

Joan McNeil. Canadá

Ana Meikle. Uruguay

Sergio Meresman. Uruguay

Pamela Michaelis. USA

María Milagros Terán. Nicaragua / USA

Brian Miller. USA

Christina Mills. Canadá

Fernando Miranda. Uruguay

Elizabeth Monasterios. USA

Ximena Mondragón. México

Sarah Mondragón. México

Rafael Mondragón. México

Felipe Monestier. Uruguay

Wolfram Morales. Alemania

Jean Michel Morel. Francia

Guillermo Moyna. Uruguay

Pablo Musé. Uruguay

Ann Nihlen. USA

Jane Norling. USA

Achy Obejas. Cuba/USA

Julián Oreggioni. Uruguay

Juan Pablo Oliver. Uruguay

Alicia Partnoy. Argentina/USA

María Paz Echevarriarza. Uruguay

Adela Pellegrino. Uruguay

Gabriel Peluffo Linari. Uruguay

Gladys Pérez. USA

Mario Pérez. Uruguay

Verónika Pérez Manukian. Uruguay

Stan Persky. Alemania

Ricardo Piñeyrúa. Uruguay

Mariela Pistón. Uruguay

Otto Pritsch. Uruguay

Celia Quijano. Uruguay

Stefhany R. Wagner. Argentina

Gregory Randall. Uruguay

Lía Randall. Uruguay

Martín Randall. Uruguay

Joe Richey. USA

Alvaro Rico. Uruguay

Anabel Rieiro. Uruguay

Circles Robinson. Panamá

Víctor Rodíiguez Núñez. Cuba/USA

Blanca Rodriguez. Uruguay

Milena Rodriguez Gutierrez. España

Clara Román Odio. USA

Susana Rostagnol. Uruguay

Fundación Rumbos. Argentina

Marc S. Sherson. USA

Minerva Salado Rabelo. Cuba/Mexico

Gonzalo Salas. Uruguay

Ruth Salvaggio. USA

Maite Sarasola. Uruguay

Oscar Sarlo. Uruguay

Jan Schwartz. USA

Mariana Seoane. Uruguay

Gonzalo Serantes. Uruguay

Susan Sherman. USA

Anne Sherson. USA

Claudio Silva. USA

Franco Simini. Uruguay

Linda Snyder. USA

Ana Solari. Uruguay

Orin Starn. USA

David Stephen Calonne. USA

Marcos Supervielle. Uruguay

Judith Sutz. Uruguay

Alan T. Roberts. Holanda

Javier Taks. Uruguay

Jorge Temponi. Uruguay

María Topolansky. Uruguay

Alicia Torres. Uruguay

Maren Ulriksen. Uruguay

María Urquhart. Uruguay

Natalia Uval. Uruguay

Juan Valle Lisboa. Uruguay

Pepe Vázquez. Uruguay

Kathleen Vickery. USA

Lourdes Villafaña. Uruguay-México

Marcelo Viñar. Uruguay

Connie Vosine. USA

Donna Vukelich-Silva. USA

Elijah Wald. USA

Joan Weissman. USA

Debbie Weissman. USA

Isabel Wschebor Pellegrino. Uruguay

Nicolás Wschebor. Uruguay

Robin Y. Swift. USA

Lynda Yanz. Canadá

Fredy Yezzed. Argentina

 

Corresponsal del diario uruguayo “La Brecha”.

Fuente:

Brecha, 14-10-2022
 


https://clajadep.lahaine.org