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Campesinos amenazan con destruir ductos de Camisea
Son del valle de La Convención y reiniciaron
huelga contra Techint, Plus Petrol y TGP.
Cusco.-
Al reiniciar una huelga indefinida que fue suspendida en octubre del 2003, los pobladores de la provincia de La Convención, en el Cusco, amenazaron con destruir un kilómetro de tubería del gas de Camisea.
Son dos los principales reclamos que motivaron a los pobladores de La Convención a retomar su medida de fuerza: el problema de la hoja de coca y la mitigación del daño ambiental generado por Techint, Plus Petrol y Transportadora de Gas del Perú (TGP) en la explotación del gas de Camisea.
El primer día de paralización no registró hechos de violencia. La atención fue suspendida en la mayoría de instituciones del Estado y centros educativos, en tanto que el transporte fue irregular. Cerca del mediodía los campesinos se movilizaron por las calles de Quillabamba y en la tarde se reunieron en el local de la Federación de Campesinos de La Convención y Lares (Fedcacil) para evaluar la jornada de lucha.
Sin embargo, el presidente colegiado del Frente de Defensa y Desarrollo de la provincia, Abel Cruz Gutiérrez, advirtió que si el gobierno central nuevamente ignora las exigencias de los campesinos se verán obligados a levantar unos mil metros del ducto que transportará a Lima el gas de Camisea.
“Si no hay solución qué podemos hacer, pese a que existe un acta de acuerdo para la solución del impacto ambiental, creo que al gobierno le gustan las marchas de sacrificio y las paralizaciones. Los nativos de Malvinas están dispuestos a levantar el ducto porque se les ha contagiado de enfermedades y han depredado su hábitat”, denunció Cruz.
Además de buscar una solución al problema de la sobreproducción de hoja de coca, los campesinos han considerado en la plataforma de lucha el asfaltado de la carretera Ollantaytambo y el levantamiento de la declaratoria en emergencia que desde hace un año se mantiene en la provincia.