En tiempo de sol con viento se realizó la junta directiva ampliada del Consejo Regional indígena del Cauca. Fue la comunidad del territorio Misak, de la María Piendamó, filial a la organización, la que recibió la delegación de los 11 pueblos indígenas, provenientes de las distintas zonas del gran territorio CRIC.
Niños, niñas, jóvenes, adultos, mayoras y mayores acompañaron este importante encuentro, regañaron, aconsejaron y desde su sentir sentaron la palabra firme para retomar y reorientar los caminos políticos de nuestra organización.
Hay retos importantes para nuestro movimiento indígena, que no depende solo de los liderazgos, sino del caminar de la mano con la gente, con la base, tener claridades frente a la institucionalidad, nuestra lucha tiene que apuntar a la autonomía y a la defensa de la vida de nuestra Madre Tierra y con ella, la nuestra. Tenemos que defender la vida toda.
Fortalecer la unidad, es uno de las tareas y principios más importantes que deja esta junta directiva, somos pueblos organizados y en lucha, nos hemos logrado mantener en estas que son nuestras tierras, en donde nuestro ombligo ha echado raíz, en donde hemos echado a andar nuestros planes de vida y tenemos que mantenernos firmes para que no nos dividan. La pelea no es entre nosotros mismos, sino contra el plan de muerte que amenaza la vida.
La defensa territorial es responsabilidad de todos y todas. Nuestra posición es la de rechazar la violencia venga de donde venga, no seremos instrumentos de guerra para alimentar todo aquello que nos amenaza, nos asesina y despoja.
Por el contrario, seremos caminantes de la vida y el buen vivir de nuestra gente y nuestra tierra. Mantendremos viva la palabra digna y rebelde de nuestras bases que habita los distintos rincones del territorio CRIC.
Seguiremos tejiendo no solo palabra, sino también la vida con acciones concretas, que son tarea y responsabilidad de todos nosotros. Nuestras semillas de vida, nuestra Guardia Indígena, nuestras mujeres, nuestros jóvenes y mayores, son parte fundamental de nuestros proyectos políticos para la vida digna, así que con ellos caminaremos los distintos espacios del gran proceso CRIC.
Que sean los tejidos, la música, la danza, el arte lo que nos haga avanzar como pueblos en resistencia, pueblos que, organizados desde hace 52 años, en el Consejo Regional Indígena del Cauca, nos negamos a desaparecer y en esta junta directiva, ratificamos la posición firme y clara de seguir en pie de lucha, desde la mirada crítica y estratégica de sus comunidades.
Por: programa de Comunicaciones-CRIC