ANTE AMENAZA CAMPESINA DE OCUPACION MASIVA
Ministro del Interior anuncia desalojos
El gobierno del presidente Nicanor Duarte Frutos hará respetar la Constitución, la ley y las resoluciones judiciales en defensa de la propiedad privada, pequeñas o grandes, y sea cual fuese la cantidad de ocupantes. Habrá desalojo, según advirtió ayer el ministro del Interior Orlando Fiorotto. Al exhortar al campesinado al diálogo franco, alertó que las medidas de fuerza no constituyen la fórmula más adecuada para arribar a soluciones justas.
Ante la cada vez más aguda presión de los campesinos, quienes anuncian una masiva invasión de grandes propiedades y con mucha gente, consultamos telefónicamente con el ministro del Interior. Sostuvo que el Gobierno ha dado muestras fehacientes, acciones concretas, y que, cuantas veces sean necesarias, con órdenes judiciales, procederá al desalojo.
G. 20 MIL MILLONES PARA COMPRAR TIERRAS
Al insistir el ministro en la necesidad de que los dirigentes campesinos sean conscientes de la situación que vive el país, especialmente en lo que hace a las carencias de recursos, consignó que precisamente para ir paliando los requerimientos de los labriegos, el Poder Ejecutivo radicó en el Congreso un pedido de ampliación presupuestaria por más de 20 mil millones de guaraníes. Es para la adquisición de tierras.
Fiorotto manifestó que, en lo que respecta al gobierno, existe un ambiente propicio para la habilitación de una mesa de diálogo con los dirigentes. “Deben comprender que, hace un año, el Gobierno está destinando sus esfuerzos y sus acciones buscando mejorar las condiciones de vida de los campesinos”, dijo finalmente, refiriéndose a los dirigentes.
NO SATISFACE A CAMPESINOS OFERTA QUE HIZO EL GOBIERNO
Más de 80.000 Ha. de tierra bajo amenaza en San Pedro
SAN PEDRO DE YCUAMANDYYU
El 13 de agosto, la mesa directiva del frente departamental solicitó al Gobierno nacional la compra de 100.000 hectáreas de tierras para asentar a 10.000 familias en el departamento de San Pedro. La respuesta ante esta petición fue que solo se podía satisfacer con unas 5.000 hectáreas por el resto del año.
Considerando esta propuesta del Gobierno, los campesinos ahora, sobre la base de las 5.000 hectáreas, insisten en que el Gobierno aún debe satisfacer una necesidad de 95.000 hectáreas. Actualmente las organizaciones de sintierras están con intenciones de ocupar unas 80.000 hectáreas. En el cuadro se detallan los inmuebles, propietarios y extensión de las tierras.
El primer elemento fuerte que genera esta situación es la necesidad de conquistar tierras para establecer nuevos asentamientos. Según los dirigentes, la única alternativa es apostar al fortalecimiento de programas de producción a nivel de pequeños productores e incursionar en el campo de las pequeñas agroindustrias.
Por otra parte, buscan defender la vida y la soberanía e impedir el uso irracional de agrotóxicos.
AGROQUIMICOS SE CONVIERTEN EN AGROTOXICOS
En lo que respecta a la soberanía, es por la masiva incursión de extranjeros, principalmente de brasileños en el departamento de San Pedro, adueñándose de grandes extensiones de tierras que generalmente son vendidas por los hacendados para la producción mecanizada de soja transgénica. Por otra parte, aseguran que los agroquímicos, por su empleo irracional, se convierten en agrotóxicos y consideran esta práctica como una verdadera amenaza a la vida y al medio ambiente.
El avance de los sojeros que se instalan en diferentes zonas del departamento hace que las organizaciones armen sistemas de defensa para impedir que se cultiven más sojas transgénicas por un lado y, por otro, con estas medidas ahuyentar el interés de los brasileños en seguir comprando tierras. De ahí la gran cantidad de campesinos que permanecen instalados en los linderos, preferentemente de estancias y de otras que son consideradas latifundios improductivos y se aprestan para ocuparlas.
Ante presión campesina el Presidente llama a su gabinete de crisis
A temprana hora de esta mañana en Mburuvicha Róga, los ministros integrantes del gabinete de crisis estarán reunidos con el presidente Nicanor Duarte Frutos. Es para tratar la situación campesina. El jefe de Estado exigirá la profundización de los estudios para hallar soluciones rápidas e integrales a la problemática, su aplicación y seguimiento respectivo, según informó ayer a nuestro diario el ministro del Interior, Orlando Fiorotto.
El encuentro servirá para poner sobre la mesa los problemas reales que afronta el campesinado, al tiempo de diseñar las posibles respuestas.
A propósito, la semana anterior se informó en el Palacio de Gobierno que la idea presidencial es que tanto los ministros como los encargados de cada repartición involucrada hagan un seguimiento personal de las metas propuestas, de modo que el acompañamiento sea efectivo. El criterio del Ejecutivo es que el campesinado tenga un apoyo sostenido, para ir consolidando los diferentes programas y proyectos.
Durante la reunión de la fecha, el gobernante requerirá un plan de acción definido. Al mismo tiempo, Nicanor Duarte Frutos dará las orientaciones respectivas para avanzar en este emprendimiento cuyo objetivo final es llegar hasta los campesinos con soluciones específicas y duraderas, según se informó.
SEGMENTO CAMPESINO RECHAZA HABLAR CON ARP Y FEPRINCO
MCNOC no se va a reunir con sectores retardatarios
La Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas (MCNOC) descarta participar de cualquier mesa de diálogo en la que estén la ARP y la Feprinco, sectores de “latifundistas y empresarios retardatarios”, según afirmó ayer Luis Aguayo, secretario general de la organización campesina.
“Categóricamente no. Solamente vamos a participar en mesas de diálogo en que estén representados la Coordinadora Agrícola del Paraguay (CAP), Asociación de Productores Sojeros (APS), las cooperativas y los senadores Estanislao Martínez y José Nicolás Morínigo”, dijo Aguayo.
Explicó que en realidad la MCNOC, que forma parte del Frente Nacional de Lucha por la Soberanía y la Vida, no ha cambiado de postura de negarse a concurrir a instancias de diálogo mientras no se den algunas condiciones.
Destacó que precisamente hoy, a las 14:00, en el local del MCNOC, se van a reunir los dirigentes del Frente para resolver qué hacer. Dijo que en esta oportunidad verán si existe posibilidad de sentarse a una mesa de diálogo que, enfatizó, se truncó porque el gobierno del presidente Nicanor Duarte Frutos rompió unilateralmente un acuerdo al que habían arribado la semana pasada y que iba a terminar en una mesa de diálogo.
Aguayo dejó en claro que para que haya condiciones para conversar, los dirigentes campesinos presos actualmente deben ser liberados y cesar los desalojos de las ocupaciones.
La semana última, organizaciones integrantes del Frente se movilizaron en Asunción y en distintos puntos del país con ocupaciones de tierra, marchas y cierres temporales de rutas en reclamo de la reforma agraria y la no reactivación de la ley de privatizaciones. Las acciones del Frente coincidieron con la movilización de organizaciones campesinas y sociales, entre ellos la Federación Nacional Campesina (FNC), que integran el Frente de Defensa de los Bienes Públicos y el Patrimonio Nacional y que se llegó también a la capital.
IBAÑEZ VE BUENA PREDISPOSICION DE CAMPESINOS
Por su parte, el ministro de Agricultura y Ganadería, Antonio Ibáñez, dijo ayer que cree que hay buena predisposición de los campesinos para el diálogo y que una señal de eso es que de motu proprio se van retirando de algunas ocupaciones. Destacó que hoy en la reunión a tempranas horas del gabinete de crisis formado por el Gobierno se tomarán las decisiones de acciones inmediatas. El secretario de Estado insistió en que el único camino para encontrar soluciones y la paz social es el diálogo.
Advertencia sobre posible “anarquía total”
CAACUPE
Durante su prédica de ayer, en Caacupé, Mons. Claudio Giménez expresó que estamos atravesando una crisis profunda en todos los niveles, y que esta situación significa momentos de cambios profundos que pueden ayudarnos a mejorar o de lo contrario agravar la situación, dependiendo de cómo nos manejamos.
“Es un momento decisivo, yo diría grave, que puede desembocar en una anarquía total si no reaccionamos todos, y a tiempo, para orientar nuestra vida como nación, como pueblo, como Iglesia hacia lo que Dios quiere realmente de nosotros”, sostuvo ayer Mons. Giménez.
El titular de la diócesis de Caacupé y de la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) dijo que “una mentalidad y praxis anárquicas conducen irremediablemente a un caos social, porque es fruto de una enfermedad espiritual y moral que estamos padeciendo todos los paraguayos”.
Ante esta situación instó a reaccionar como nación, como pueblo, como Iglesia, de acuerdo al querer de Dios, y no así como nosotros estamos pretendiendo o queremos con nuestros gustos y caprichos.
CRITICA A LA “INFORMALIDAD” GUBERNAMENTAL
En otro momento de su prédica el pastor de la diócesis serrana dijo que está visto de sobra que lo informal no construye; la informalidad, la falta de seriedad en las cosas que hacemos, la irresponsabilidad en el puesto en el que nos toca actuar como cristianos y como ciudadanos no ayuda a construir una sociedad nueva, y que más bien colabora a destruirla más.
El prelado cuestionó: ¿Qué se puede esperar en un país donde no se respeta la Constitución? ¿Qué se puede esperar en un país donde no se respetan las leyes ni las normas mínimas de convivencia ciudadana y donde en gran medida las cosas se manejan con un doble discurso porque no hay claridad de criterios y de principios?
Luego de su prédica, en una entrevista, dijo que ante los problemas campesinos el Estado debe entrar a jugar su rol para regular la distribución de tierras, teniendo en cuenta las leyes. “Quizá no solucione todos los problemas, pero será una respuesta a las dificultades, ya que los campesinos están insistiendo hace años en el Código Agrario. Si no existe esa reglamentación clara, la situación se desborda y se produce un caos”, advirtió.