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La escritura rebelde. Entrevista con Osvaldo Bayer

17.12.04

‘Uno siente vergüenza al pasar al lado de esa estatua’, nos señaló el escritor y periodista Osvaldo Bayer tras su paso por la ciudad de Bariloche. Invitado a realizar una serie de conferencias, Bayer, un incansable defensor de los mapuche en el Puelmapu, fustigó una vez más la figura del general Julio A. Roca, a quién considera el principal responsable de la sangrienta ocupación del territorio mapuche en la Argentina. También cuestionó a quienes reivindican a Francisco Pascasio Moreno, polémica figura de la historia de la Patagonia y a quien no dudó en calificar como un ‘racista’, fundador del fascismo trasandino.

Por Adrián MOYANO / Azkintuwe Noticias

PUELMAPU / Está algo más encorvado y respira con un poco de esfuerzo porque los años no pasan en vano. No obstante el escritor y periodista Osvaldo Bayer despliega una actividad cuya intensidad avergonzaría a los más jóvenes. En el marco de la campaña ‘Awka Liwen’ -que también lo trajo a Bariloche- visitó la semana pasada seis ciudades para brindar otras tantas conferencias. ‘Y estuve en Neuquén, claro. Para festejar el triunfo de los estudiantes’, proclamó.

Antes de desplazarse hacia Villa La Angostura para participar de la conmemoración del Día de los Derechos Humanos, el autor de ‘La Patagonia rebelde’ visitó el estudio de Radio El Arka y dialogó además con Azkintuwe. Como es su costumbre, Bayer se detuvo en las polémicas figuras de Julio Roca, Francisco Pascasio Moreno y ‘otras yerbas’.

El escritor tenía previsto brindar una clase abierta ayer en el Centro Cívico y otra similar por la noche en el aula magna del Centro Regional Universitario Bariloche. En sus disertaciones, suele detenerse en la Conquista del Desierto, en los sucesos de la Patagonia trágica, en las primeras represiones al movimiento obrero y en el establecimiento de fronteras artificiales entre nuestros países.

En su opinión, la invasión que sufrió el pueblo mapuche, las tensiones posteriores con Chile y la persecución contra trabajadores de origen extranjero, son facetas de una misma manera de entender la política: la roquista. ‘Después de la eliminación de los pueblos originarios Roca la emprendió contra el movimiento obrero combativo. De ahí la Ley 4.144 que fue una ley realmente muy cruel: la Ley de Residencia’.

En función de ella ’se expulsaba del país a todos aquellos sindicalistas y obreros extranjeros que luchaban por las 8 horas de trabajo. Eran expulsados casi todos a Italia y a España y no podían volver más. Pero lo más cruel es que a la familia se la dejaba acá y no se la dejaba mover. Entonces, muchas mujeres con 4 o 5 hijos, como se tenía en aquel tiempo, quedaban solas, sin ningún medio, desoladas completamente. Esos padres nunca más podían juntarse ni ver a sus hijos’, comenta Bayer.

Si bien fue el militar dos veces presidente el encargado de poner en vigencia esa legislación, ésta recién fue derogada en las épocas de Frondizi. Una permanencia sobre todas las cosas, injusta. ‘Porque si uno lee y estudia eran luchas por las 8 horas de trabajo. Ahí está ese hermoso documento de los cinco mártires de Chicago, los obreros que van a ser ahorcados por la Justicia norteamericana por empezar la lucha’, afirma el escritor.

‘Ellos decían claramente que no luchaban para trabajar menos, luchaban porque durante el día querían tener algo de la cultura, querían leer, jugar con sus niños, hablar de amor con sus mujeres. Querían tener derecho a la vida. Es un hermoso documento. Y bueno, los ahorcaron… Después, como siempre hace la Justicia norteamericana, 100 años después pidió disculpas porque se había equivocado. Pero claro, los muertos estaban muertos’, ironiza Bayer. En la Argentina las razones de la movilización trabajadora eran las mismas e idénticas las excusas gubernamentales para su represión.

En relación con el ‘asunto indígena’, Bayer manifiesta que le gusta ‘dialogar principalmente con los mapuches porque es un idioma distinto, son ideales distintos. Es una especie de conversación a cielo abierto. Cuando uno ve los argumentos del señor Mariano Grondona y de algunos historiadores de la Academia Nacional de la Historia, son tan superficiales… Dicen que Roca trajo la civilización. ¿Qué civilización? Esa es la pregunta’.

‘Hoy podemos ver lo que esa civilización ha hecho del suelo latinoamericano. Vemos cómo está la Argentina, la violencia que hay en sus calles, el hambre que pasa su gente sin ninguna protección. Para mí desarrollar esta tarea es un deber ético, más cuando leemos las cosas que se realizaron contra los pueblos originarios, cómo se los despojó de todo, cómo se los utilizó también en la nueva esclavitud que creó Roca’, polemiza Bayer.

‘Él -Roca- lo dice claramente cuando envía a los que llama indios prisioneros a la isla Martín García a trabajar en los muros de las fortalezas, cuando los manda a la explotación del azúcar en el noroeste como esclavos en el año 1879. Hay que recordar que la esclavitud había sido abolida en 1813. También envían como sirvientas a las mujeres indígenas prisioneras y se reparten a los niños entre aquellas familias que podían mantener pequeños adoptados. Basta leer estos datos en los diarios de la época para darse cuenta qué perversión tenía esa civilización nacida de la civilización europea’.

Por eso dice Bayer, ‘para la gente honesta no queda otro camino que denunciar. En nuestro caso empezamos por los monumentos, porque no puede ser que en Buenos Aires, el monumento más grande de todos en la parte más céntrica, esté dedicado a este genocida de Roca. Es una vergüenza. Uno realmente se siente muy culpable cuando pasa al lado de esta estatua y lo ve a este hombre de puro bronce’.

Francisco Moreno, ‘racista’ y ‘fundador’ de fascismo

Para Osvaldo Bayer, Francisco Pascasio Moreno no tenía nada de progresista para la época, como cierto sector de la ‘biblioteca’ insiste en sostener. ‘Él culmina su vida fundando nada menos que la Liga Patriótica Argentina, que fue una organización absolutamente fascista creada para luchar contra los obreros, contra los dirigentes obreros que pedían las 8 horas de trabajo’, opina el periodista.

Además ‘hay que leer sus libros, los términos racistas que emplea el señor perito Moreno. Cuando di una conferencia acá en el museo, dije que era lamentable su racismo con los mapuches. Hay que ver cómo describe la forma de vivir de los mapuches. Él termina diciendo que los mapuches tienen cara de sapo. La directora de aquel tiempo me interrumpió para decirme que yo ignoraba que era la época de Darwin, quien decía que el hombre descendía del mono y por eso la comparación. Yo le contesté: ‘ahora entiendo muy bien. Claro, el hombre desciende del mono y el mapuche desciende del sapo, según el perito Moreno’. Hubo una gran carcajada pero nunca más me invitaron’.

Por otro lado, Bayer encuentra objetable que el ‘héroe cívico más grande los argentinos’ se haya dedicado ‘a fundar fronteras’. Ese hecho ‘habla de la pequeñez de su mentalidad cuando ya Bolívar -fíjense qué grandeza- había hablado de los Estados Unidos de Latinoamérica. San Martín y O’Higgins jamás hablaron de fronteras entre Chile y Argentina. Y el perito Moreno hace el gran negocio, porque donde hay fronteras se necesita un ejército bien armado’.

En efecto, ‘así se hizo. Roca y Ricchieri crearon el nuevo Ejército Argentino bajo el modelo prusiano. Todo proviene de Prusia y se envía a los mejores cadetes del Colegio Militar a estudiar a Berlín. Se adopta todo lo prusiano. Principalmente las armas, los cañones Krupp y los fusiles Máuser. Hay unos negociados impresionantes que se van a discutir en Diputados porque para un ejército de 6.200 soldados el señor Ricchieri compra 150.000 fusiles Máuser. ¿Para qué? ¿Quién recibió el resto?’ La existencia de coimas quedó probada en la Cámara Baja’ / Azkintuwe

Fuente: Azkintuwe Noticias / http://www.nodo50.org/azkintuwe


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