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La determinación del transporte público cruceño de elevar el precio del pasaje para mayores de Bs 1,50 a 1,80 encontró un duro rechazo en el Comité Interinstitucional de Defensa Social, que se declaró en estado de emergencia indefinido.
Después de dos meses de negociaciones con los sectores sociales, la dirigencia del transporte cruceño sindicalizado y cooperativo -respaldado por más de 400 dirigentes y propietarios de micros- tomó la decisión de poner en vigencia la elevación del precio del pasaje para mayores, desde ayer en la tarde, de Bs 1,50 a 1,80.
Bajo el argumento de que se cansaron del maltrato, peregrinación negociadora y porque cuentan con el respaldo de una resolución administrativa emitida por la Superintendencia de Transportes, que les autoriza a subir los pasajes de Bs 1,50 hasta 1,90, los dirigentes Walter Gómez, Hernán Velásquez y Richard Quispe, impulsaron la aprobación de lo que denominaron ‘tarifa de subsistencia’. “Se agotaron las instancias de diálogo y no podemos subsistir con una tarifa de Bs 1,50. Subiremos el precio para los mayores, pero mantendremos congelados los pasajes para universitarios, escolares y menores”, afirmó Gómez.
Hernán Velásquez fue categórico al señalar: “Ya pedimos garantías constitucionales a la Prefectura, la Fiscalía de distrito y al Comando de Policía Departamental. Nos vamos a defender jurídicamente y si hay enfrentamientos, ahí estaremos”.
El planteamiento fue recibido por los centenares de asambleístas con aplausos y vociferaciones que amenazaban con mandar a Palmasola a quien se anime a agredir a los choferes o los micros y que estaban dispuestos a defender a ‘puñetazo limpio’ la tarifa de Bs 1,80.
Al finalizar la asamblea de los transportistas, Velásquez adelantó que para imponer la nueva tarifa, de ser necesario, pedirán apoyo nacional.
La reacción fue inmediata. La dirigencia de la COD, Fedjuve, Uagrm, campesinos e indígenas, todos integrantes del Comisión Interinstitucional, rechazaron la pretensión del transporte de subir el precio del pasaje, se declararon en estado de emergencia permanente y conminaron al gobierno municipal y nacional a tomar cartas en el asunto.
La vicepresidenta de la Fedjuve, Betty Montero, reportó que una comisión de vecinos se dio a la tarea de comprobar si la tarifa de Bs 1,80 era aplicada desde ayer, y que la conclusión fue que no.
“Si insisten los transportistas, que se atengan a las consecuencias porque los vecinos del Plan Tres Mil y de la Villa 1º de Mayo se están organizando en brigadas para quemar los micros que cobren más de Bs 1,50. Hay guerra declarada”, advirtió.
La decisión del Comité
Ante la insistencia del autotransporte de aumentar los pasajes, las organizaciones sociales decidieron no participar más en reuniones, ya que se demostró técnicamente que los actuales pasajes (Bs,150 mayores, 0,80 universitarios y 0,50 escolares y menores) cubren su estructura de costos.
Rechazar la pretensión del autotransporte de incrementar las actuales tarifas y demandar del Gobierno nacional al municipio cruceño que tomen las acciones necesarias para la defensa de la economía popular.
Se ratificó la necesidad de otorgar un plazo de 45 días hábiles para realizar un estudio de reordenamiento del transporte público y el estudio de la conversión de la matriz energética.
Declarar estado de emergencia de todas las organizaciones sociales y pueblo en general para evitar cualquier arbitrario y abusivo incremento en los pasajes.
Exigir al Gobierno devolver las competencias a los gobiernos municipales para que sean éstos, junto a las instituciones, los encargados de regular el precio de las tarifas del transporte público.
Desde hoy comenzarán a salir brigadas vecinales de fiscalización en diferentes puntos de la ciudad.