Las protestas de campesinos, indígenas, mineros y otros sectores sociales se reanudaron ayer en La Paz, en la segunda semana de convulsión en Bolivia y en víspera de que el Congreso celebre hoy una crucial sesión que debe definir si privilegia la autonomía regional o la Asamblea Constituyente.
Miles de manifestantes, entre ellos cocaleros y vecinos y universitarios de la ciudad andina de El Alto, sitiaron por algunas horas la plaza Murillo, centro de los poderes Ejecutivo y Legislativo en La Paz, en demanda de la nacionalización de los hidrocarburos y por la instalación de la Asamblea Constituyente.
Los manifestantes, unos 10.000 de la ciudad de El Alto y otros cinco mil mineros, campesinos e indígenas que permanecen en La Paz desde la semana pasada, lanzaron débiles intentos por quebrar el férreo resguardo policial en la Plaza de Armas.
El temporal social sólo se ha abatido sobre La Paz y la vecina ciudad de El Alto, sumida en una huelga por tiempo indefinido ordenada por una organización de vecinos, pues en el resto del país las actividades se desarrollan con absoluta normalidad, según reportes de medios locales.
Explosiones de dinamita y estribillos contra el Congreso y el Gobierno caracterizaron ayer nuevamente la reanudación de las jornadas de protesta de varios sectores.
En la primera media jornada, docentes y campesinos se sumaron a miles de manifestantes alteños que se concentraron en el centro de la sede de Gobierno, tras descender desde la Ceja de El Alto en una masiva marcha que tomó las principales vías de la carretera antigua que une La Paz y El Alto.
La misma concentraba a campesinos, maestros, mineros, gremialistas y vecinos de la urbe alteña; estos últimos mantienen la huelga indefinida que se caracterizó por el bloqueo de las principales vías de comunicación con el interior y el exterior del país, además de alterar las actividades del aeropuerto internacional de El Alto; ayer no fue la novedad.
Cerca del mediodía, las movilizaciones se acercaron, como pasó la anterior semana, a plaza Murillo en un nuevo afán de cercar el centro del poder político nacional; no obstante, a pesar de la magnitud de las movilizaciones, no se registraron incidentes.
La presión social apunta al Congreso Nacional que según confirmó su presidente, Hormando Vaca Díez, reanudará sus sesiones este martes, pues al margen de exigir la Asamblea Constituyente, y la modificación de la Ley de Hidrocarburos, existen posturas sobre un eventual cambio de gobierno.
Nuevamente, los paceños soportaron las protestas que por varias horas interfirieron el tráfico vehicular, pues las organizaciones sociales concluyeron su movilización con un mitin que se concentró en la plaza de los Héroes, donde sus dirigentes instruyeron continuar con las protestas.
Al responder a las acusaciones del presidente Carlos Mesa, las organizaciones sociales movilizadas prometieron reforzar el asedio a la plaza Murillo y negaron que estén cometiendo una conspiración al pedir el cierre del Congreso, por lo que advirtieron que no suspenderán las medidas hasta lograr sus objetivos.
De esta manera, los dirigentes respondieron a las acusaciones del Presidente que había denunciado por la mañana, en un acto militar, una conspiración de grupos radicales.
Alteños anuncian gran movilización
Toda la estrategia de lucha en demanda de la nacionalización de los hidrocarburos y la convocatoria a la Asamblea Constituyente se concentrará hoy en el centro de la ciudad de La Paz, donde en horas de la tarde se reunirá el Congreso.
Este aspecto fue coordinado ayer entre Abel Mamani y Jaime Solares de la COB.
La Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto convocó a sus afiliados a concentrarse, a partir de las 7:30, en las inmediaciones de la CBN, en la avenida Montes, adonde llegarán en vehículos para evitar el desgaste de la marcha que habitualmente realizan desde la Ceja por la carretera antigua, avenida Naciones Unidas, hasta el centro de la sede de Gobierno.
El presidente de Fejuve, Abel Mamani, dijo que todo está listo para que la marcha sea masiva y haga escuchar su voz en torno a la agenda de octubre de 2003: la recuperación de los hidrocarburos, su industrializaciòn, la convocatoria a la Asamblea Constituyente y el juicio de responsabilidades al ex presidente Sánchez de Lozada.
A la marcha de Fejuve se adhirió la COR y también marcharán las organizaciones movilizadas por el MAS: campesinos y cocaleros, así como los mineros que están en La Paz desde la anterior semana. También saldrán los maestros urbanos que están en huelga general indefinida.
Asímismo, los estudiantes de la Universidad Pública y Autónoma de El Alto participarán de la movilización, pero lo harán desde las 09:00 horas desde la avenida Juan Pablo II por un mayor presupuesto y por la nacionalización de los hidrocarburos sin indemnización.