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El despertar mapuche en Neuquén
Los jóvenes guerreros
Si entrás a la Ruka, ubicada en pleno corazón del laburante barrio Islas Malvinas, vas a encontrar a los konas tejiendo sus redes de comunicación a través de cadenas de mails, o pergeñando próximas actividades en toda la provincia, u organizando la tarea para editar el próximo número de su revista “Tayin Rakizuam” (nuestro pensamiento). Es notable: los konas mapuches son bravos, todo el tiempo te hablan como si estuvieran completamente ocupados en llevar adelante su trabajo, el de defender sus derechos, dar a conocer su cultura y buscar la vía para que su gente viva como debe y se proyecte feliz y completa en su propia identidad (Foto de 8300).
Leer Además: Entrevista - Los jóvenes Kona de Neuquén
Especial de (8300) / Azkintuwe Noticias / Martes 9 de agosto de 2005
PUELMAPU / Los “konas mapuche” son parte del futuro de su pueblo. Su juventud, su empuje y la aplicación de su pensamiento universalmente comprensivo para entender a este mundo (que tan etnocéntricamente solemos mirar) los convierte en muchachos verdaderamente opuestos a ese imaginario baladí que tenemos: el del joven frívolo y sin horizontes, el de la pequeña persona incapaz de leer con sensatez el entrelineado de complejidades que acechan por ahí, a la espera de anularnos como personas.
Si entrás a la Ruka (casa), ubicada en pleno corazón del laburante barrio Islas Malvinas, vas a encontrar a los konas tejiendo sus redes de comunicación a través de cadenas de mails, o pergeñando próximas actividades en toda la provincia, u organizando la tarea para editar el próximo número de su revista “Tayin Rakizuam” (nuestro pensamiento). Es notable: los konas mapuches son bravos, todo el tiempo te hablan como si estuvieran completamente ocupados en llevar adelante su trabajo, el de defender sus derechos, dar a conocer su cultura y buscar la vía para que su gente viva como debe y se proyecte feliz y completa en su propia identidad.
Hace no mucho tiempo (tres, tal vez cinco años) los jóvenes mapuches del lof wariache (territorio urbano, es decir: ésta ciudad) decidieron rescatar del olvido una figura olvidada dentro de su organización básica: la del konas. Ellos explican (aquí sería bueno hacer un paréntesis y aclarar que no quieren que pongamos sus nombres por separado, ya que prefieren dejar en esta nota su pensamiento conjunto) que “el concepto de kona se perdió en la época de la conquista. El kona era el encargado de preservar y cuidar la orientación estratégica de nuestro territorio, trabajaba en conjunto con los Toki y los Lonkos. Una vez instalado el Estado, tanto la figura del Machi como la del kona se perdieron. El Machi ya no está más aquí en Puelmapu, los han barrido a todos, o la mayoría se han ido para Chile. Pero los jóvenes mapuche hemos empezado a revalorizar la figura del kona como la de un joven guerrero que es necesario para su comunidad”.
El Estado winka se consolidó en territorio mapuche y al llegar exigió -entre otras cientos de cosas- que el organigrama social/político y religioso de ellos se “adaptara” al nuestro: allí fue cuando el kona se convirtió en “Vocal de una vecinal”. Nada que ver, ¿no?.
Resignificados
Resignificados, con vigencia y proyección, los kona urbanos salieron a “contagiar” sus planes y su entusiasmo a sus hermanos de las comunidades y lof del resto del Puelmapu. No fue para nada difícil lograrlo, ya que en el interior de la provincia sus pares viven realidades similares a las de ellos. En mayo de este año hicieron el primer encuentro en Neuquén, un Kona Trawun (Reunión Kona), jornada que comenzó con un Witratripan (ceremonia filosófica) en el que buscaron una relación armónica para el posterior debate de su Kimvn (conocimientos) y su Rakizuam (pensamiento).
Del acta final del Trawun se puede extraer un párrafo que es clave para comprender la importancia empática que existe entre todos los jóvenes mapuches, sean estos urbanos o no urbanos: “Cada uno de los jóvenes que asistió vive realidades diferentes, pero al mismo tiempo muy similares. En algún momento a todos se les ha vulnerado sus derechos, tanto personales como comunitarios: discriminación, invasión y destrucción en su territorio por parte de las empresas, o alejamiento de su espacio territorial e inclusive represión física o psíquica (…)”.
Los konas son activos, no paran ni un momento. Dicen que por todo deben estar atentos, que esa es su misión como jóvenes mapuches: “El poder no nos comprende y lo diferente los asusta. Para ellos es mucho más conveniente que los mapuche nos peleemos entre nosotros para que puedan alcanzar su meta de borrarnos del mapa. El sistema siempre quiere borrar del mapa a lo que se le diferencia”.
Si bien es cierto que los jóvenes urbanos fueron los que se interesaron primero por la revitalización del rol del kona, no les gusta mucho la diferenciación tajante que nosotros solemos hacer entre mapuche de la ciudad y mapuche del campo. “Para nada reivindicamos esa diferenciación y tratamos de evitar neologismos como el de ‘mapurbe’ que nos han puesto a los mapuche de ciudad. Nuestras condiciones pueden ser diferentes, pero los derechos que exigimos son los mismos”, dicen con firmeza.
En relación a la celebración del Wiñoy Tripantu, su año nuevo, los konas tienen asumida una posición de respeto absoluto. “El Wiñoy Tripantu es importantísimo para nosotros, cuando estamos en el Rewe (lugar de la ceremonia) encontramos que todo nos fortalece, que todo está allí para renovarnos. A la vez es una posibilidad enorme de sentarnos con nuestros mayores a recibir su pensamiento sobre las cosas que están pasando y sobre las que se vienen. Es un momento de reflexión y a la vez uno de proyección de un nuevo ciclo que comienza. También es un momento de aliento, porque allí nos encontramos todas las comunidades para hablar claramente sobre lo que hacemos y lo que necesitamos hacer”.
Algunos planes de los konas para este año son: “Seguir creando lazos con los jóvenes mapuche de todo el Puelmapu y organizar un nuevo Kona Trawun, continuar editando su revista “Tayin Rakizuam”, participar del foro nacional de todos los pueblos originarios de la Argentina para entregarle un documento al Presidente de la Nación, seguir de cerca y participar activamente de las alternativas de la próxima e inminente reforma de la Constitución neuquina, profundizar y poner en marcha el Plan de Educación Intercultural que quieren implementar en conjunto con la UNC, trabajar con todo en los barrios interculturales que existen en lugares como San Martín de los Andes o Aluminé”, señalan / Azkintuwe
Periódico Mapuche Azkintuwe: http://www.nodo50.org/azkintuwe