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Lunes 22 de agosto de 2005
Entre ellas, liberación de presos políticos y apoyo a movilizaciones obreras y campesinas
La Jornada
Un insurgente y bases del EZLN frente a una casa en la que se reunió el subcomandante Marcos con integrantes de organizaciones sociales en la comunidad de Dolores Hidalgo FOTO Víctor Camacho
Dolores Hidalgo, Chis., 21 de agosto. El subcomandante Marcos afirmó que no existen garantías de seguridad para los dirigentes zapatistas que en fechas aún no definidas recorrerán el país con el fin de impulsar la otra campaña.
Dijo que por eso, antes de lanzar la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) “hizo una restructuración de su organización político-militar, en el entendido de que los que salgan podrían perder la vida, la libertad o simplemente desaparecer”.
En respuesta a la inquietud de uno de los delegados asistentes a la reunión que se efectuó ayer en esta comunidad, Marcos sostuvo que “la única garantía de seguridad que tenemos es la movilización de la gente y las medidas que tomen cuando nos reciban”, ya que ni en los municipios, en los estados, ni en ninguna parte de la República mexicana que recorrerán las hay.
Al término de la tercera de seis reuniones con distintos sectores -más la general con todos, que se realizará el 16 de septiembre-, el dirigente zapatista aseveró que han surgido propuestas de método para el programa nacional de lucha de la otra campaña, que podría incluir la exigencia de la liberación de los presos políticos, la defensa de la seguridad social, la solidaridad con todas las luchas obreras, campesinas, estudiantiles, indígenas, los problemas de la Asamblea Nacional de Braceros, las luchas que casi todos han marcado por la democratización sindical y contra los patrones.
Gran parte del mensaje-resumen de clausura de la reunión realizada este sábado con unos 400 delegados de más de 100 organizaciones sociales de todo el país, el subcomandante lo dedicó a reiterar los objetivos y alcances de la Sexta Declaración de la Selva Lacandona, sobre la cual se han hecho distintas interpretaciones desde junio pasado, cuando salió a la luz pública.
“Estamos preocupados porque desde la Primera Declaración de la Selva Lacandona nunca habíamos hablado tan claro en una declaración como en la Sexta, y sin embargo ninguna había sido tan mal interpretada”, dijo.
Insistió en que la Sexta y la otra campaña se proponen ir a escuchar, no a hablar. Ambas iniciativas “no buscan un lugar para la palabra, sino un lugar para el oído”, y “no llaman a la realización de grandes encuentros, convenciones, frentes, asociaciones, coaliciones y los etcéteras que correspondan”, manifestó.
En el resumen de las exposiciones, que desde las 11 horas hasta la media noche de ayer hicieron los participantes en el encuentro, Marcos encontró que “algunos grupos políticos están todavía discutiendo y esperando las definiciones del EZLN sobre la Sexta y la otra campaña”.
Pensamos, dijo, que algunas de estas definiciones: lo electoral, el respeto, la independencia organizativa y el horizonte de la Sexta están claras, pero “sobre todo quiero decirles que les digan a sus compañeros que no se harán definiciones sin el acuerdo de todos”.
Comentó que en el encuentro de este sábado aparecieron nuevamente planteamientos para impulsar la otra campaña, como “el de la Promotora (contra el Neoliberalismo), el del frentote, la declaración de Querétaro, los diálogos nacionales, la candidatura independiente, el abstencionismo, la inquietud de que no se vaya a culminar este proceso de la otra campaña en una estructura organizativa de mando y subordinación que coarte la iniciativa y la imaginación -y la inteligencia, agregamos nosotros”.
Informó que en este encuentro surgió de nuevo “la inquietud de que la otra campaña tome en cuenta lo específico de las mujeres y que se hagan reuniones de género”.
También volvió a aparecer, dijo, el problema de la privatización de la seguridad social, “y vemos en esa lucha semejanzas con la lucha del movimiento estudiantil de la UNAM en 1999, porque son compañeros y compañeras que están preocupados porque esos intentos de privatización afecten a los trabajadores que vayan a entrar después y a toda la gente que acude a estos servicios sociales del Seguro y del ISSSTE”.
Ante las distintas interpretaciones de la Sexta, Marcos pidió a los asistentes: “Lo que queremos pedirles es que cuando informen a sus organizaciones y colectivos lo que aquí se dijo les digan que lo que los zapatistas quieren hacer es otra campaña, y díganles que si los zapatistas insisten en lo de otra es porque no va a ser una campaña electoral”.
Díganles, insistió, que es “otra” porque su objetivo principal “no es ir a hablar a la gente humilde y sencilla, a los trabajadores del campo y la ciudad que luchan, a quienes son perseguidos y despreciados por su diferencia, se resisten y se rebelan, a quienes son reprimidos por luchar por la justicia pero no se rinden y vuelven una y otra vez -precisamente como volvieron los pobladores de esta comunidad que nos recibe, que regresaron después de haber sido reprimidos-, y en general a toda la gente de abajo que tiene el pensar y el sentir en el mismo lado en que tiene su corazón, es decir, a la izquierda. El objetivo de la otra campaña es escuchar a todas las personas; ese es el espíritu que anima la Sexta”.
Exhortó a quienes han sido invitados a preparar y realizar la otra campaña a preparar y construir “un espacio de escucha, uno nuevo, sin precedentes, muy otro como decimos los zapatistas; un espacio que es el lugar donde la palabra del otro nace, donde agarra su modo, la manera de nombrar la injusticia, la explotación, el desprecio, la represión, la discriminación, el dolor y también su manera de nombrar la lucha, la resistencia, el no dejarse, no rendirse, volver una y otra vez sobre lo que nos pertenece legítimamente: la democracia, la libertad y la justicia”.
Al reiterar que la otra campaña será para escuchar, el subcomandante Marcos precisó: “Se dirá entonces que el EZLN está perdiendo la oportunidad de que su palabra sea escuchada por miles, cientos de miles, millones, y es ahí donde está el problema, porque el EZLN no busca ahora que muchos escuchen su palabra sino, por el contrario, busca escuchar a muchos, no a todos, sino a los de abajo que existen y luchan.
“Quien no entienda que esto es lo que se propone el EZLN entonces no ha entendido nada, y una y otra vez dirá que se necesitan aclaraciones, entrevistas, comunicados, donde se explique más. Estamos dispuestos a hacerlo una y otra vez, a aclarar todo lo que no esté claro, a explicar y explicarnos más, pero de una vez les digo que no estamos dispuestos a cambiar el espíritu de la Sexta ni a cambiar el objetivo principal de la otra campaña, es decir, nuestra meta es escuchar al otro”.
Como en ocasiones anteriores, expresó que “no vamos a salir para decirle a nadie lo que debe hacer o dejar de hacer, sino para aprender a escuchar, aprender de por qué hace lo que hace y por qué deja de hacer lo que deja de hacer. Por lo demás, estamos dispuestos a discutir y debatir proyectos, programas, caracterizaciones, definiciones, planes de corto, mediano y largo alcance. La pregunta, entonces, no es cómo le van a hacer para hablar, sino para ayudarnos a escuchar a quienes son parte de ustedes, a quienes organizan y a quienes quieren organizar y unir”.
Pidió a los delegados que “no tengan miedo -o como dice la Sexta, si tienen miedo contrólenlo-, el EZLN no les disputará contingentes, ni vanguardias, ni templetes, ni cabezas de manifestaciones, ni nombres, ni siglas, ni proyectos. No tengan miedo, la salida del EZLN no significa la aparición de un nuevo rival. Les pedimos que vean nuestra salida simple y sencillamente como lo que es: la aparición de un nuevo compañero de lucha”.
A partir de lo anterior, Marcos improvisó para recalcar el objetivo principal de la otra campaña: “Llevamos 12 años hablando, según nuestro pensamiento hay que callarse y escuchar. Así fue como crecimos aquí, llegamos hablando, mucha revolución, mucha transformación, muchas clases sociales, muchos planes de mediano, corto y largo alcance, hasta que nos callamos y empezamos a escuchar ahí en su casa, en el campo de cultivo, a la hora del pozol, y ahí descubrimos otra cosa, aprendimos un modo, que es el que queremos aprender con ustedes”.
Ya casi al final, explicó: “Lo de la Sexta y la otra campaña no es algo que se nos ocurrió; hablamos con hombres y mujeres, les preguntamos, vimos todo esto que iba a pasar, y aquí queremos darles un argumento a todos los que dicen que hay que entrarle por López Obrador, porque millones lo apoyan y las encuestas están a su favor: Si nosotros, en diciembre de 1993, hubiéramos hecho una encuesta sobre el alzamiento, hubiéramos perdido la encuesta, hubieran salido millones en contra. Los argumentos cuantitativos no cuentan para nosotros, y sin embargo pasó el primero de enero, pasó lo que pasó, y perdónenme pero entre otras cosas por eso ustedes están aquí.
“Porque si le hubieran hecho caso (a las encuestas), el innombrable (Carlos) Salinas hubiera seguido gobernando”.
Insistió en el punto: “Les pido por favor que tomen en cuenta eso, porque ustedes son líderes de sus comunidades y no pueden insultar a su gente dándole argumentos cuantitativos. Lo que está a discusión son argumentos racionales (…), pero si ustedes empiezan a argumentar ‘es que son muchos’ vamos a empezar a hacer muchas cosas mal, porque muchos dicen que hay que hacerlas. Por favor, les pedimos que tomen en cuenta esto y busquen los argumentos que se están dando para plantearse frente a una opción política, porque a nosotros no nos preocupa si sí o no, pero sí que la gente discuta y tome su posición, cualquiera que sea, pero con respeto a su inteligencia”.
Marcos enumeró los lugares de la República a los que han sido invitados y que visitarán los zapatistas durante la otra campaña, incluidos Tepoztlán, el mercado de La Merced y la costa chiapaneca.