El desarrollo de la lucha de resistencia contra el capital encuentra en las organizaciones sociales sus mejores exponentes. Organizaciones barriales, juveniles, campesinas, trabajadoras, originarias y otras tienen más que mostrar que los colectivos de afinidad, pues es allí que se está construyendo una nueva sociabilidad, en su localidad, en su barrio, en su territorio, en su centro de trabajo o estudio.
Hay dos formas de organizaciones sociales: las verticales o tradicionales y las horizontales o asamblearias de democracia directa. Entre ambas existe una vasta gama de diversidad, algunas con mayor énfasis hacia un lado y algunas hacia el otro. Algunas se disfrazan de autónomas para esconder la mano del gato. Unas reciben dineros de alguna fuente externa, otras practican la autogestión, que también presenta sus bemoles.
Los colectivos de afinidad proponen, organizan o dirigen; las organizaciones sociales hacen, practican; algunas con una conciencia adquirida gracias a los colectivos de afinidad, otras por el desarrollo de la autoconciencia o el rescate de la cultura ancestral.
Algunas organizaciones desarrollan determinadas formas de lucha, otras practican otros modos de resistir, algunas eligen a priori determinados métodos, otras no descartan ninguna forma de lucha.
Es verídico que existen muchos que convocan a luchar de esta o de la otra manera, pero en definitiva quien decide eso es la organización social, he ahí la autonomía.
Sucede que muchas organizaciones, decisiones, batallas, etc. no son divulgadas por los medios tradicionales y a veces tampoco por los medios alternativos, que no alcanzan a llegar a todas partes, existiendo una mayor extensión de las formas de autoorganización social que capacidad de comunicarla. Algunas organizaciones cuentan con sus medios, desde un boletín hasta una radio o página web, otras no cuentan ni tan siquiera con la comprensión de que sus esfuerzos pueden ser un ejemplo o un material de estudio para otras experiencias, prefieren mantenerse en bajo perfil a la espera de estar más organizados o con más gente, o con más resultados, etc. cuando en realidad lo que interesa es aprender de eso poco que se está haciendo, así ese poco puede crecer si se conocen y discuten las experiencias de los otros. Eso es tejido de intercambios.
Una de las formas primarias de autodefensa es justamente la capacidad de convocar a la solidaridad y el apoyo. El intercambio y el apoyo mutuo son formas de tejido horizontal que contribuyen notablemente al crecimiento de las formas de organización, lucha, construcciones, nuevas relaciones, maneras de autogestión, etc. y, por lo tanto, a la multiplicación y generalización de la resistencia y construcción de una nueva sociedad en cada localidad.
Muchos militantes y activistas cuentan con acceso a la internet, cuyos usos son variados, desde divulgar hasta intercambiar, pero en general no estamos aprovechando entre todos ese capital humano y combativo para las tareas de tejido de redes entre organizaciones, luchas y experiencias sociales.
Por eso estamos convocando a participar en red haciendo llegar noticias, comunicados, actividades y luchas de las organizaciones barriales, juveniles, culturales, autogestionarias, etc. que usted conozca. No necesita contar con experiencia en relatorios ni crónicas, basta mostrar con sus palabras lo que está sucediendo, una reunión en su barrio, detalles de una asamblea, formas de educación popular, como se hacen los juegos de niños, como se discute la autogestión, etc.
No se necesitan solamente noticias que impacten y llamen a ser leídas, sino que hace falta mostrar más la cotidianeidad de las construcciones de la nueva sociabilidad, los problemas y dificultades de la práctica de la horizontalidad y el asambleismo, los resultados de las discusiones de tareas en el barrio, los detalles de la metodología de trabajo desde un colectivo hacia una comunidad, hasta detalles ínfimos, como ser la forma de distribuir las tareas para cocinar y limpiar en un encuentro social.
Son esas pequeñas cosas las que verdaderamente muestran al sujeto que construye y que con eso se construye a si mismo. Son esos detalles que muestran el grado real de los intercambios entre vecinos. Son miles de pequeñas grandes cosas, es una enorme escuela de vida que es necesario compartir para el aprendizaje, el estímulo, el ejemplo.
Puede hacerse por medio de entrevistas, observaciones, participación directa, etc. tomando notas, fotografías, etc. que serán de gran apoyo a la población envuelta que necesita salir del underground para mostrarse como referencial del cual se pueden extraer lecciones que nos ayuden a todos.
Las organizaciones sociales pueden postar directamente en la página, para lo que se les entrega una clave de acceso, pero los corresponsales populares pueden enviar sus notas al mail clajadep@gmail.com
Esa es la idea, que usted sea un corresponsal de guerra, que haga llegar las noticias desde el fragor de las luchas de resistencia y la ternura de la construcción cotidiana de la autoorganización. Anote cuales son las experiencias de autonomía que existen en su entorno, en su barrio o centro de estudio y trabajo, también en lugares próximos. Converse con ellos, discuta lo aquí expuesto y otras ideas que considere pertinentes para llegar a la comprensión común de que el intercambio es fundamental, lleve a ellos algunas noticias de otros lugares, en especial las que les sirvan para sus propias necesidades de lo cotidiano. No vaya solamente a las manifestaciones, entre en las organizaciones, reúnase con ellos, participe de sus actividades, aprenda también de ellos.
Anótese en la red Clajadep. Sea un militante del tejido de intercambios horizontales.
Escriba a clajadep@gmail.com
Mande sus noticias.
Clajadep
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